Parte 27

2K 248 165
                                    


Dejen sus "ya llegué" o lloro :(

••••



Esperar no es como que sea mi fuerte, la paciencia se me agota con cada segundo que pasa y mis uñas sufren los estragos de mi ansiedad.

Recargo la cabeza en la pared, estoy sentado en la banca frente a la puerta del director, mis piernas brincando de un lado a otro, aquí afuera parece que el tiempo pasa demasiado lento.

Después de que nos encontrara la enfermera sobre la camilla, nos trajo con el director sin dirigirnos la palabra en todo el camino, no sabía muy bien qué esperar ni cómo iba a comportarme o qué iba a decir, no podía negar lo innegable ni mucho menos, pero entonces Rin pidió hablar con el director primero y después de muchas negativas, aceptaron su petición, eso fue hace una hora y aunque ya intenté pegarme a la puerta para escuchar algo, la verdad es que no puedo oír nada.

Decido hacer un último intento y pegar la oreja contra la madera para tratar de escuchar algo pero la puerta se abre y me tengo que hacer a un lado, mirándome las uñas con fingido interés.

— Piensa en lo que te he dicho, Itoshi Rin.

Levanto la mirada para encontrarme con la del director, que me mira con cara de pocos amigos, luego cierra la puerta tras él y yo hago intento de entrar.

— Está bien —me detiene Rin —. No tienes que ir allí.

Su mano me sujeta la muñeca, su toque es demasiado suave pero lo suficiente firme como para no dejarme ir.

— ¿Qué pasó? —pregunto, tratando de no sonar ansioso.

— No llamarán a tus padres ni te van a sacar del equipo, todo está bien.

Aunque su voz es la de siempre, noto un pequeño deje de preocupación y eso hace que todos mis sentidos se pongan alerta.

— ¿Rin? — lo llevo a la banca, me quedo parado frente a él mientras le indico que se siente —. ¿Qué pasó ahí dentro? Tardaste una hora.

— ¡Le hablaron a mamá! — Sae llega con el teléfono en la mano, le muestra la pantalla a Rin y este desvía la mirada —. ¿Qué mierda hiciste para que le hablaran a mamá? ¡Sabes que no puede venir!

— Sae, cállate.

— ¡No me calles! ¿Estás en tus cinco sentidos, Rin? ¡Mamá está...!

— ¡Sae! — Rin se pone de pie, encarando a su hermano, que ha llegado hasta nosotros y parece ignorar mi presencia —. Aquí no, hablemos en otro momento.

— ¿Cuándo? —escupe Sae —. ¿Cuando mamá venga?

No entiendo muy bien cuál es el problema aunque tampoco pregunto, si Sae está haciendo un alboroto es que algo grave pasa y yo no puedo evitar sentirme como la mierda porque todo lo he causado yo.

Rin pasa por su lado, golpeando el hombro de Sae, que bufa y luego me mira pero no dice nada, tiene la mandíbula tensa y las manos hechas puños.

Decido que lo mejor es ir tras Rin, lo encuentro en el momento antes de subirse a su coche, corro hasta él y me pongo a su lado.

— Isagi... —murmura. Siento que soy la última persona que quiere ver en estos momentos.

— No entiendo nada, Rin... —hago una pausa —. Pero puedes contar conmigo, ¿sabes? Quiero decir... me haz ayudado mucho y yo no te doy nada a cambio, entiendo que no quieras hablarme y que estás molesto pero...

Sus manos acunando mis mejillas me roban el aire que necesito para hablar, evito respirar porque temo alejarlo y espero pacientemente por su respuesta.

— ¿Quién está enojado? No seas tonto —me besa la frente —. Vamos, quiero contarte algo.

Estúpido error, ¿intencional? [Rinsagi +18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora