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16 | La misma página

⚠⚠ Aviso de contenido sensible/TW ⚠⚠

Esta nota habla de este capítulo, e imagino que hay quien lo puede considerar un spoiler (si no quieres leer la nota, sáltatela), pero sentía que debía avisar.

Este capítulo incluye contenido delicado, en este caso una escena (muy muy breve, prometido) en la que se muestra a una persona manteniendo un contacto sexual no consentido.

¡Cuídate!

16 | La misma página

Daniel

En la fiesta de Kylie bebo mucho menos que en la de Cris. Aún no se me ha olvidado la resaca del día siguiente, pero sobre todo es porque no quiero volver a hacer el ridículo como la otra vez.

Y aun así, parece que no he parado de cagarla una vez tras otra desde que he llegado.

Solo tengo que disculparme un par de veces más con Kylie por haberme olvidado del hielo para que se le pase por completo y actúe como si nunca hubiese estado molesta. Cuando llega la gente, se pasa un buen rato arrastrándome de un lado a otro para que conozca a sus amigos, y todo el mundo parece muy simpático.

Aun así, me cuesta sacudirme la sensación de malestar. Ese «tienes que esforzarte un poco» de Kylie se me ha clavado en el pecho. Lo ha dicho como si no lo hiciese ya. Como si hiciera en la vida algo que no fuera intentar una y otra vez no ser un completo desastre.

Kylie baila pegada de mí una canción que está demasiado alta, y me obligo a pasármelo bien incluso cuando el ruido comienza a molestarme un poco más de la cuenta. Con la mirada, sin embargo, no puedo dejar de buscar a Hannah; en medio de tanto desconocido, saber que está ahí me transmite calma. Sin embargo, apenas la veo en toda la noche.

—¿Te traigo algo de beber? —me pregunta Kylie, acercándose a mi oído para que la oiga por encima de la música.

—No, estoy bien. Luego tengo que conducir.

—¡Quédate a dormir! Mis amigas también van a pasar la noche, hay sitio de sobra. ¡Va, porfa, que es mi cumple!

Se separa de mí para mirarme con las mejillas sonrojadas por el alcohol y una sonrisa llena de ilusión dibujada en el rostro. Me agarra de la camiseta y tira de ella con gesto infantil. Luego, pone ojos de corderito y termino por ceder:

—Está bien, me quedo.

Kylie da un saltito de alegría y me rodea con los brazos.

Algo después, cuando empiezo a agobiarme, voy a la cocina a por un vaso de agua. Allí me encuentro con Phoebe, que está sentada en la encimera junto a la misma chica pelirroja que vi en la fiesta de Cris. Las dos hablan junto al fregadero, copa en mano y sonriéndose tan cerca la una de la otra que me da a entender que, o bien están a punto de besarse, o acaban de hacerlo.

En cuanto me ven entrar, sin embargo, Phoebe se gira hacia mí.

—¡Daniel! ¿Qué?, ¿cómo te lo estás pasando?

—Muy bien. ¿Y vosotras?

Ambas comparten una mirada cómplice y los ojos de Phoebe brillan con picardía.

—Mejor imposible. Ella es Erin, por cierto. —Señala a la chica pelirroja—. Erin, él es Daniel.

—¿El novio de Kylie?

Lo pregunta con cierto retintín que no sé bien cómo identificar y, pese al desconcierto inicial, no puedo evitar una risita nerviosa.

—No sé si estamos en ese punto todavía. —Me encojo de hombros.