CAPITULO 27

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-Lo siento...- Otró bache. -Lo s-siento.

-Louis, ¿por qué rayos decidiste venirte por esta vieja carretera?.

-No esta vieja.

-Pues lo parece.

Había miles de baches en el camino, mi cabeza comenzaba a doler cada que el viejo cacharro de Marc topaba con algún bordo, o caía a algun pequeño poso.

-Lo siento.

-Callate.- Dije seria.

-¿Podrias decirme que te sucede?.- Dijo sin despegar su vista del horrendo pavimento.

-Por lo menos hubieras salido a saludarlos.

-Anny...- Soltó una risa. -Aún no entiendes, ¿cierto?.

-¿Entender qué?.

-Olvidalo.

Quede en silencio un par de segundos, hasta que el maldito auto dejo de moverse.

-¿Por qué nos detuvimos?.

-Yo no me detuve.- Se defendió.

-¿Entonces qué tiene el auto?.

-No lo se.- Se acercó hacia el frente y hecho un vistazo hacia el marcador de gasolina, aceite, bateria, y temperatura del motor.

Y nada.

Todo estaba normalmente bien.

-Espera aquí...- Abrió la puerta del piloto y salió. -No te bajes, estas calles son peligrosas.

¡¡ Ay Diosito !!

El cofre del auto estaba levantado, y Louis se encontraba inclinado viendo de cerca el motor y de más.

- ¡MIERDA !.- Escuche a Louis gritar.

-¿Estás bien?.- Dije sacando mi cabeza por la ventanilla del auto.

-Anny...- Se acerco hacia la puerta del co-piloto, donde me encontraba y la abrió. -Debemos irnos.

-¿Y el auto?.

-Olvida el maldito auto.- Dijo. -Debemos salir de este lugar y conseguir otro auto.

-¿Qué pasará con el de Marc?.

-Marc está de suerte, le comprare un auto nuevo.

¿Primos asi?...

¡¡ Ya no existen !!

-Anda...- Tomó mi mano y estiro delicadamente de ella para ayudarme a bajar del auto.

-¿En dónde estamos?.- Pregunté.

-En...- Louis giró su vista hacia ambos lados de la carretera, eran las 2:15 de la tarde, pero el dia estaba exageradamente nublado, incluso hacia frio, y no se dejaba ver el sol.

-¿Louis?.- Dije tras escuchar unos pasos acercarse a nosotros.

-No mires atrás y camina.- Susurró en mi oído. Me abrazó y comenzamos a caminar deprisa, ya que los pasos aún se escuchaban.

-¿Tienes frio?.- Preguntó, pero a los pocos segundos soltó una pequeña y adorable sonrisa. -No me lo digas... Ya escuche el craqueó de tus dientes.

Sonreí y lo abracé aún con más fuerza, el se quitó su chamarra y la colocó encima de mis brasos, ya que no quería soltarlo, tenia miedo de que nos llegará a pasar algo si nos separabamos en un instante.

-Anny... ¿Estás bien?.- Preguntó sacandome de mis cavilaciones.

Asentí.

Si, porque no quería ni hablar de tanto frio que tenía. Estoy pensando seriamente en asistir a la Boda Formal del padre de Louis con un pantalon tibio y un sueter largo y grueso.

-¿Por qué dijiste que Niall había escuchado mi vos?.- Preguntó.

Me encogí de hombros, eso me daba un poco de miedo.

¡¡ Me soñe muerta !!

Más bien, nisiquiera fue un sueño, solo una vision.

-Oh vamos Anny.- Dijo. -Dime lo que viste realmente.

Sabrá Dios cuantos kilomentros hemos avanzado, pero los pasos se dejarón de escuchar, y la vieja carcacha de Marc, ya no se veía en el camino de regreso, de hecho, nisiquiera se si vamos bien, o nos hemos perdido de nuevo.

-Anny.- Dijo Louis.

-¿Qué?.

-Dime todo.

-Todo.- Bromeé.

-No jueges Anny, hablo en serio.

-Yo tambien Lou.

-Dime que diablos paso por tu cabeza estando inconcoente.- Dijo desesperado.

-¿Quieres saberlo todo?.

El asintió y me miró mientas caminabamos.

-¿Quieres parar aquí?.- Pregunté apuntando hacia una banca color cobre que se encontraba a la orilla del camino.

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Graxias a todos por su visita.
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AN ADVENTURE IN SECRETDonde viven las historias. Descúbrelo ahora