Deseo

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Su mirada se mantenía fija en el camino, totalmente concentrado en su labor como conductor de aquel vehículo. No había pronunciado ni una sola palabra desde que abandonaron el hospital, solamente se había limitado a ayudarte a salir de ahí y después a abordar el vehículo. 


No estaba tenso, lo habrías notado. 


Incluso el silencio que reinaba entre ustedes no era molesto, al contrario, era bastante cómodo. 


Haber estado encerrada por un tiempo en aquella habitación sin ventanas había sido bastante asfixiante, pero ahora que tenias la oportunidad de ver el paisaje durante el camino no te interesaba en lo mas mínimo, en su lugar, encontrabas mucho mas atrayente el perfil del hombre que te acompañaba. 


Tenia unas largas y hermosas pestañas, se veían preciosas en cada parpadeo que hacia. En estos días que habías podido mantenerte cerca de el habías notado muchos detalles en su persona. Y cada uno te encantaba mas que el anterior. Era lindo aprender cosas nuevas sobre tu persona especial ¿Simón sentiría lo mismo?


Por un momento, mientras el vehículo estaba detenido por que el semáforo estaba en luz roja, giro su cabeza para mirarte. Había sido completamente consciente de tu mirada sobre el, no le molestaba, pero sentía curiosidad. Su mano derecha abandono el volante y se encamino hacia tu rostro acariciándolo, usando solo el dorso de la misma.  Esta acción apenas y duro el cambio en la luz del semáforo, después volvió a lo suyo y no se distrajo mas hasta llegar a su destino. 


En un principio pensaste que terminarían regresando a la base de Los Vaqueros, después de todo ahí estaban tus pocas cosas, y era el lugar donde ambos habían estado desde que comenzaron su misión. Pero no, al parecer Ghost tenia otros planes en mente.


Las Almas no era precisamente una ciudad muy grande pero aun así tenia su propio encanto. Y de alguna manera Ghost había dado con una bonita casa, la cual había alquilado por unos días.

-¿No iremos a las base? - 


-¿Por que iríamos ahí? Ya no hay misiones - Su mirada te decía que aquello era muy obvio. 


-Pues, no lo se ¿No debería reportarme? - 


-Alejandro ya esta informado - Termino por estacionarse frente aquella casa, apago el motor del vehículo y de dispuso a salir del mismo. 


Lo observaste como se dirigía a la entrada principal de aquella casa y utilizando otro juego de llaves, abría la puerta principal. Después volvió al vehículo, abriendo tu puerta y extendiendo su mano para que la tomaras. 


Cuando descendiste por completo se posiciono ligeramente detrás de ti, pasando su mano por tu espalda, la cual bajo hasta llegar a la altura de tu cintura. Sentías una ligera presión en la zona, Ghost estaba atrayéndote un poco hacia el pero al mismo tiempo te guiaba para que entraras a la casa. 


El interior era bonito, muy colorido y lleno de diversos adornos. Tenia grandes ventanas que permitían que entrara mucha luz y contaba con todos los muebles necesario para sentirse cómodos. 

Last ChanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora