Se abrió paso por los corredores de la base, gracias a lo tarde que era no se encontró a nadie en su camino.
Fue directamente a la habitación asignada a su compañero, tenia muchas cosas que hablar con el escoces. Era consciente que necesitaba ayuda de una mente que estuviera mucho mas clara y en ese momento solo podía contar con el. Soap era alguien de su confianza.
Ni siquiera se molesto en tocar la puerta, no tenia tiempo para esas cortesías, así que simplemente abrió la puerta y al encontrar a Soap dormido se acerco a el y le arrebato la manta con la que se estaba cubriendo.
Como era de esperarse de un soldado entrenado como el, esa acción lo hizo reaccionar como si estuviera apunto de recibir un ataque sorpresa. Se levanto y se lanzo hacia la persona que estaba en su habitación, su puño estaba en camino a golpear el rostro de quien fuera aquel invasor pero este nunca llego a destino porque otra mano contuvo su golpe.
Solo entonces se dio el tiempo para ver de quien se trataba.
-¿Ghost?- Paso en un segundo de la confusión a la sorpresa.
-Johnny, necesito que hablemos - Directo, el tiempo estaba en su contra.
-¿Que sucede? ¿Nos atacan? ¿Alguna misión? - Debía tratarse de algo importante para que Ghost se aparezca de esa manera.
-No, es algo personal - Debía empezar a pensar en como explicarle su situación, en usar las palabras correctas.
-Te escucho - Adopto un semblante serio, algo raro en el. Pero si Ghost quería tratar temas personales, cosa que prácticamente nunca sucedía, el seria todo oídos.
-Es sobre _________... y Alejandro -
-¿Que hay entre ellos? - Intuía hacia donde iban las cosas, pero necesitaba la confirmación de Ghost.
-Hoy se vieron... en una "cita" - Incluso mencionar esa palabra le estaba costando, el recuerdo de lo que vio dentro del vehículo le dejaba un mal sabor.
-¡¿Que?!... Esos dos ¿Están saliendo?... Alejandro se veía muy cercano y quizá demasiado amable con ella pero no pensé que llegarían a eso -
-Johnny... No se que hacer ... - Le era tan raro sentirse así, perdido.
Centro su mirada totalmente en el hombre frente a el, analizando la situación, ante el estaba un Ghost que nunca antes había visto. No, ante el estaba Simón.
-Estas enamorado de ella ¿No? - Era mas bien una afirmación que una pregunta
-Si- De eso ya no tenia duda. Ya no.
-Tu mismo te propusiste aprovechar esta misión para hablar con ella, no me dirás que ya te arrepentiste ¿Verdad?- Si quiera ayudar a su amigo, tendría que ponerlo a prueba, encaminarlo a que el mismo encontrara la respuesta.
-No es eso... pero y si ya están saliendo, si ella ya es feliz... - Las dudas volvían.
-¿Tienes pruebas para decir que están saliendo?-
-Los vi... besarse -
Esa respuesta no la esperaba, así como tampoco el ver como la mirada de su amigo, su hermano, se apagaba. No necesitaba ver su rostro completo para darse cuenta que aquello le resulto doloroso, sus ojos eran demasiado expresivos.
Jamás imagino que esa madrugada estaría conociendo a Simón Riley, al hombre que era realmente, una persona con sentimientos y un corazón, alguien que también puede sufrir y que no solo es un soldado de apariencia fría.
-Ghost, ¿De verdad quieres entregársela a Alejandro?- Se acerco y coloco sus manos en los hombros del otro - ¿Quieres que sea Alejandro el encargado de hacerla feliz?-
-No... pero tampoco tengo mucho que ofrecer-
-No necesito leer tu expediente para saber que has tenido un duro pasado pero a pesar de ello mírate, elegiste ser un buen hombre, un soldado de elite, luchas cada día para que el caos no alcance al resto del mundo y puedan seguir viviendo tranquilos, a sabiendas de que nunca tendrás un reconocimiento por ello. Maldición, L.T.; si hay alguien que merece ser feliz eres tu, permítete ser egoísta en esto -
-¿Y si ya es tarde?-
-Solo hay una manera de saberlo, no lo pospongas mas Ghost, habla con ella. Se sincero acerca de lo que sientes, explícale porque antes la rechazaste. Ella es una buena persona, si se lo pides, seguro te escuchara -
-Debías haberla visto, Johnny...se veía mas hermosa - Había fijado su mirada en un punto muerto mientras su mente divagaba en aquel instante.
Enternecido era la palabra mas adecuada para describir el como se sentía en ese momento, era la primera vez desde que lo conocía que lo escuchaba hablar de esa manera sobre alguien.
-Lastima que en esta ocasión no pude tomarle una foto - Sonrió, quería mantener presente a este Simón, al que estaba feliz por experimentar estos nuevos sentimientos.
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Cumplió con su palabra y te dejo en la puerta de tu habitación, le regresaste su saco y le agradeciste por todas las atenciones de esa noche.
-Fue un placer para mi y al contrario, soy yo quien agradece la confianza para que me contaras sobre ti - Su mano estaba en tu mejilla, acariciándola ligeramente.
-Siempre tan gentil, Alejandro... - Ese hombre sabia como ponerte nerviosa en cuestión de segundos.
-Justo como debes ser tratada, corazón -
Descendió desde tu mejilla pasando por tu cuello, rozando tu piel solamente con la punta de sus dedos, delineado la forma del mismo hasta llegar a tus hombros en donde se desvió hasta dibujar un camino hasta tu clavícula.
Su toque erizo tu piel, una sensación electrizante recorrió todo tu cuerpo poniéndote aun mas nerviosa. No estabas muy segura de como reaccionar o que decirle, el por el contrario, estaba mas ocupado observando aquellas zonas. Tu piel era bastante suave, le gustaba, y no iba a negar que le gustaría explorar mas allá de lo que tu vestido le permitía. Pero no lo diría, no lo veía conveniente aun.
-Eres hermosa - Deposito un corto beso en tu frente.
-Gracias... - En un intento de tu parte por regresarle el afecto que te mostraba, te acercaste y te estiraste solo un poco, ya que tus tacones te ayudaban, para poder dejar un suave beso en la comisura de sus labios.
Una acción bastante coqueta pero discreta.
-Descansa, mas tarde habrá trabajo - Acariciando por ultima vez tu rostro, se despidió de ti.
Esto estaba bien ¿Verdad? ¿Alejandro era la elección correcta? Te sentías feliz pero eso mismo te daba miedo, cuando hay demasiada felicidad se siente sospechoso.

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Last Chance
RomansaCuando eres un soldado que puede morir en la siguiente misión, lo ultimo que deseas es quedarte con arrepentimientos. Por ello fuiste sincera con la persona que amabas pero las cosas no resultaron como lo esperabas. Ahora es el turno de cierto Fant...