Not a love story

Dopamina

Vicky pov

Me sentí mucho mejor después de la conversación con Nuvia,me alegraba que la situación no termino en una pelea o algo parecido.

Entre a la cocina silenciosamente intentando no llamar la atención de Nuvia.Me acerqué hacia ella lentamente por detrás con la intención de asustarla.

—Hola Nuvia—Susurre en su oído.

—¡Puta madre!—Dijimos las dos al tiempo.

¿Yo?Porque Nuvia me pego un putazo en la cara con sus lentes al voltear la cara rápidamente .¿Ella?No se güey ,esta loca.

—Mi cara güey—Me queje agarrando mi mejilla izquierda mientras me sobaba lentamente.

—Vicky porque me asustas pendeja—Se quitó los lentes dejándolos en la mesa.

—Yo fui la víctima cállate—Nuvia se rio caminando hacia mi.

—Déjame ver—Murmuro ella alejando mi mano de mi cara

—Uh—Río nerviosamente alejándose de mi.—Tienes una pequeña línea roja,pero pequeñísima—Se mordió el labio intentando no reírse.

—No mames—Susurre saliendo de la cocina en dirección al baño.—¡No mames! Parece como si un bebe hubiera salido de ahí ,que pedo—Mire toda mi cara.

Y es que con los rasguños de la cerca y ahora esto ,parezco luchadora.

—Güey van a pensar tantas cosas de mi...—Me agache en busca de una crema para los moretones.

—Mira si lo ves por el lado positivo...Te ves sexy.
—Dijo ella arreglándose el cabello.

—¿Ah si?—Susurre aplicando un poco de crema en mis dedos.

Me levante dejando la crema sobre el granito del baño.

La aplique sobre la línea roja esparciendo el espeso líquido blanco sobre mi pómulo.

Mire de reojo a Nuvia quedándome helada.

Que mujeron.

—¿Que tanto me miras?—Pregunto con un tono seductor.

—¿No te puedo mirar?—Apoye mis manos sobre el lavabo

Negó con su cabeza con una sonrisa.

Abrí mi boca para decir algo,sentí su brazo tomar el mío separándolo del lavabo,su cuerpo se coló en el espacio entre mis brazos y el lavabo.

Lleve mi brazo nuevamente a la cerámica del lavabo prácticamente encerrándola.

Sus manos fueron a mi nuca jalándome fuertemente besándome con dulzura.

No quiero dejar de besarla nunca.

Con mis manos apreté su cintura empujándola hacia la cerámica,sus besos bajaron hacia mi cuello comenzando a jugar con el punto de pulso.

Todo estaba de maravilla hasta que un sonido irritante lleno las paredes del baño.

Parece un complot en nuestra contra.