CAPÍTULO 31

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"Adivina quien volvió hoy, esos chicos con ojos salvajes que estaban lejos"

The boy are back in town- Thin Lizzy 

A quien más le costó despertarse ese día fue a Joffrey. No atendió a los llamados de su septa, tampoco el de los guardias, ni siquiera el de los sirvientes. Se revolcó entre sus sábanas tratando de aminorar el ruido y poder seguir durmiendo, con suerte lo logró y cayó nuevamente en el reino de los sueños.

Para su mala fortuna Jace y Luke interrumpieron en su cuarto haciendo un gran escándalo, aplaudiendo, llamándolo a los gritos y hasta destapándolo. Joff no tenía la energía necesaria para maldecirlos o resistirse así que solo se quedó acostado enterrando la cabeza en la almohada en un intento fallido de ocultarse de sus hermanos. Sin embargo ellos se dejaron caer a sus costados y en un acuerdo implícito lo atacaron con terribles cosquillas en las costillas y barriga.

—Arriba, enano ¿O quieres que llame a mamá?—amenazó Jacaerys.

Oh prefería cualquier cosa antes que ser despertado por su madre; tenía una táctica cruel y poco divertida según él, siempre se acercaba sigilosamente y le salpicaba la cara con gotitas de agua. Al principio era algo que podía ignorarse pero a la décima gotita los nervios lo empujaban a despertarse si o si. Una vez escuchó que despertó a su tío Aegon con un balde entero, pero nunca supo si era verdad o no.

Joffrey se emocionó mucho cuando terminó de despabilarse y recordó que día era. Le contagió su felicidad a sus hermanos y cuál niños pequeños, e ignorando que uno de ellos ya estaba casado, saltaron en la cama haciendo un desastre con las sábanas.

Todo fue invento de Jace, estaba preocupado por no haber pasado tiempo de calidad con su familia las últimas semanas y ofreció la fantástica idea de visitar Dragonstone y quedarse unos días antes de la gira. Helaena habría ido según tenía entendido, pero ella prefirió dejarles el castillo solo a ellos ocho, además también quería pasar tiempo con sus propios hermanos y padres.

Fuera de todo eso, la emoción de Joffrey venia de la mano de su primer viaje largo en Tyraxes.

Luego de lograr sacarlo de la cama, su hermano Luke picoteó un poco del desayuno mientras él se cambiaba de ropa. Jace por otro lado se dedicó a guardar en un morral algunos juguetes y chucherías que había olvidado empacar.

El viaje en la carroza hasta Dragonspit los sumió en un aburrimiento conjugado con la impaciencia. Jace hasta dejó escapar unos ronquidos que Luke tomó como iniciativa para una broma.

—¿Noche ajetreada?

—No me quejo.

Había algo en su diálogo que Joffrey no comprendía del todo, y se sintió excluido cuando sus hermanos musicalizaron el lugar con risas. A veces le gustaría ser mayor como ellos y poder acompañarlos en sus chistes o salidas, pero todavía le quedaba un buen tramo, aunque su padre le asegurara lo contrario.

Los dragones ya estaban listos para ser montados cuando llegaron, y en el instante que se detuvieron Joffrey salió corriendo hacia el suyo aun cuando siempre le dijeron que no lo hiciera para evitar asustarlos, Tyraxes ya estaba acostumbrado de todos modos.

De la fosa salieron sus padres tomándolos por sorpresa, no tanto por su madre sino por su padre. El hombre estaba vestido con su armadura de pies a cabeza.

—Cambio de planes, muchachos—dijo él—Somos una familia de dragones, todos iremos volando.

Era un impacto para la mayoría, el plan original era que su padre, los mellizos y Visenya irían en barco, pero ahora Luke llevaría a Aegon, Jace a Viserys y su madre a su padre y a Visenya.

Warrior, Mother and MaidenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora