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El silencio reinaba en los alrededores de Arrow house. Un silencio escalofriante y desesperante. Caroline podía sentir la tensión en el aire de su hogar aún dentro del auto que la dirigía al mismo.
—Joe, ¿que está pasando?
Cuestiona a su hombre de confianza, el cual la acompañó a emprender su viaje de casi una semana. El chico busca su mirada a través del retrovisor para hacerle saber que sabía lo mismo que ella, nada, pero con esa sola mirada, Caroline entendió que las vibras que transmitía la zona también fueron percibidas por el.
El niño a su lado se remueve y rápidamente esta lo conforta pegándolo más a su cuerpo. Los castaños cabellos del niño estaban por toda su frente y esta los aparta por el, ya que el pequeño en su sueño estaba intentando hacerlo. Caroline deja ir un fuerte suspiro ante la imagen de Charles junto a ella, era casi idéntico a su hijo, Caleb.
De manera delicada, toma al niño en brazos cuando por fin estacionan frente a su hogar. Joe la ayuda a bajar del auto y se encarga de buscar el equipaje del niño y el de ella. A pasos firmes y con el corazón a todo dar, se dedica a entrar a su hogar, el cual encuentra solo y silencioso. Camina hacia la cocina, esperando encontrar a Marie o algún otro empleado, pero por desgracia, encontró otra escena.
—¡Tommy!— exclama cuando lo ve tirado en las escaleras.
De manera débil, su esposo la ve y casi puede ver la vergüenza que tiene de mirarla estando en ese estado. Se encontraba golpeado a muerte y el sudor corría por todo su cuerpo, debido al claro esfuerzo que hacía para mantenerse despierto. Ada y Joe se hacen presentes en la escena y rápidamente Caroline le pasa al pequeño Charles a Joe para poder ayudar a su marido. Charles gimotea al ser apartado de los brazos de la mujer y está le ordena a Joe buscar a Marie para que ponga a salvo al niño.
—Ada, ¿que carajos paso?— cuestiona en un tono enojado, a modo de ocultar su preocupación.
—No lo se, Caro— le responde intentando poner de pie junto con ella a su hermano—, solo se presentó así a una reunión y no quiso hablar del tema.
—Eres un egoísta, Tommy Shelby— le dice mirándolo a los ojos, ojos los cuales se encontraban perdidos—. Eres un egoísta que no piensa más allá de su nariz.
De manera rápida toma un pañuelo limpiando su frente para comprobar que efectivamente su temperatura estaba por los cielos. Sus manos se dirigen al pecho de este, el cual estaba siendo cubierto por el propio Tommy con sus brazos. Aparta las piezas del traje y nota una fuerte contusión en el mismo. La preocupación llena el pecho de Caroline, ya que por más enojada que estuviera, sabía que su marido estaba en un grave peligro en este instante.
—Te amo, Caroline— dice entre balbuceos incomprensibles—, perdón por no ser el marido que mereces.
Caroline mira a Ada y su cuñada la mira casi pidiendo disculpas de igual manera. Ambas logran poner ambos brazos de Tommy en los hombros de cada una y así ponerlo de pie. A duras penas ambas arrastran al hombre hasta el recibidor de la mansión Shelby, donde Joe hace presencia. El chico reúne todas sus fuerza y toma él solo a su jefe y lo sube en el auto con ambas mujeres tras de él. Caroline intenta subirse al auto y Ada se lo impide.
