Fingir para agradar

586 21 0
                                    

Unos amigos de Eric y Clara, los habían invitado a una fiesta que organizaban en su casa, así que ambos asistieron.

Durante la fiesta, comenzaron a jugar un juego llamado "el juego de la botella". Eric comenzó a ponerse bastante nervioso, pero no pudo evitar sentirse emocionado cuando la botella finalmente lo señaló a él y a Clara.

Eric— (Nervioso) Oh Dios, ahora somos nosotros.

Clara—(Sin tomarle importancia) Solo es un juego.

A pesar de que Clara no lo tomaba en serio, el beso fue más largo de lo que cualquier otro en el juego. El corazón de Eric latía rápido, y un sentimiento extraño tomaba su cuerpo, pero Clara continuo ignorando todo aquello.

Natalia—¡Pero que intensos! Ni parecieran ser mejores amigos ustedes dos ¿eh? (Dijo sorprendida).

Clara—(Despreocupada) Sí, solo un juego. Vamos a seguir divirtiéndonos.

Eric se siente confundido por el beso, pero sigue disfrutando de la fiesta. Empieza a notar que Clara no lo trata como a los otros invitados, sino que solo le muestra su lado amable y genuino.

Eric—(Pensando) ¿Acaso Clara siente lo mismo que yo? No puedo dejar de pensar en ese beso.

Clara—(Acercándose a Eric) Oye, ¿estás bien? Pareces un poco distraído.

Eric—(Sonriendo) Solo estoy disfrutando la fiesta a tu lado.

Clara—(Riendo) Tú siempre has sido mi favorito. Pero solo amigos, ¿verdad?

Eric siente un nudo en su estómago, pero se obliga a sonreír.



Sábado...

Pedri está parado afuera de la casa de Clara, esperándola impaciente mientras revisa su reloj. Finalmente la puerta se abre y aparece Clara.

Clara—¿No me vas a abrir la puerta?

Pedri—Eh.. si, lo había olvidado.

Clara—Pues no lo olvides nunca más, esto es lo que merezco.

Pedri—Amanecimos de malas ¿o que?

Clara—No, así soy, ya habíamos hablado de esto. Mejor dime a dónde me vas a llevar.

Pedri—Primero quiero hablar contigo, así que vamos a ir a un lugar.


Pedri lleva a Clara a un parque tranquilo y apartado. Clara está nerviosa y trata de mantener su actitud, pero se nota que está incomoda.

Clara—¿Qué hacemos aquí? No me gusta estar sola en lugares así.

Pedri—Solo necesitas relajarte y confiar en mí. Lo que tengo en mente va a ayudarte a cambiar por completo.

Clara—¿Cómo?

Pedri—Quiero que hablemos y que seas completamente honesta conmigo. Sabes que no me gusta perder el tiempo, así que vamos al grano.

Pedri y Clara se sientan en un banca y comienzan a hablar. Clara trata de mantener su actitud, pero cada vez se suaviza más conforme va hablando honestamente y va sintiéndose cómoda con Pedri.

Clara—Sabes, no siempre he sido así. Me he dado cuenta de que mi actitud solo me ha alejado de las personas que realmente me importan.

Pedri—Sabía que podía sacar lo mejor de ti. Solo tenías que tomar la decisión de ser quien realmente eres. Yo también quiero ser completamente honesto contigo y ya dejarnos de rodeos, porque he esperado mucho tiempo para esto.

Pedri y Clara se acercan lentamente y se besan apasionadamente. Al separarse, ambos se miran intensamente.

Pedri—¿Quieres intentar algo juntos?

Clara—Sí, quiero intentarlo. Pero sin actitudes ni falsedades. Solo ser nosotros mismos.

Pedri—Lo prometo. Y si algo no funciona, siempre podemos hablarlo.



Pedri vuelve a acercarse a Clara para volverla a besar. Era un beso apasionado y lleno de sentimientos. Al final, ambos se miran a los ojos, sonriendo con complicidad. Saben que algo ha cambiado entre ellos y que, a pesar de sus diferencias, hay algo que los une.


Pedri y Clara comienzan a caminar por el parque, mientras conversan animadamente.

Pedri—Me alegra que hayas decidido intentarlo conmigo. Creo que podríamos ser una gran pareja juntos.

Clara—Sí, pero no podemos olvidar que somos diferentes. A ti te gusta ser frío y serio, mientras que yo soy más expresiva y extrovertida.

Pedri—Esa es una buena cosa. Siempre es mejor tener a alguien que equilibre tus rasgos de personalidad.

Clara—Eso es cierto. Pero también tenemos que trabajar en nuestra comunicación. Yo no soy buena en expresar mis emociones, lo que a veces me lleva a tener actitudes.

Pedri—Yo tampoco soy bueno en eso. Pero creo que podemos trabajar juntos para mejorar.

Clara—Vale, pues creo que esto puede funcionar. Los dos estamos dispuestos a trabajar en nosotros mismos y en nuestra relación.

Los dos continúan conversando hasta que comienza a oscurecer. De repente, Clara mira su reloj y se sobresalta.

Clara—¡Ya es tarde! Mi mamá me matará si llego tarde de nuevo.

Pedri—¿Sólo tu mamá?

La cara de Clara se dirigió al piso y luego miro a Pedri con pena.

Clara—Em.. si, mi papá murió hace poco. Creo que no te lo había dicho.

Pedri—Soy un imprudente, lo siento, Clara.

Clara—No, déjalo, tú no lo sabías.

Pedri—Bueno, vamos que te llevo a casa. Pero antes, hay una cosa que quiero decirte.

Clara—¿Qué cosa?

Pedri toma la mano de Clara y la mira profundamente a los ojos.

Pedri—Quiero que sepas que conmigo siempre puedes ser tú misma. No tienes que fingir otra actitud para impresionarme, porque ya lo haces con tu verdadera personalidad.

Clara—(Suspira) Eso significa mucho para mí. Realmente espero que esto funcione entre nosotros.

Pedri—Si va a funcionar, te lo prometo.

 Eso de olvidarte nunca lo aprendíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora