Regresar a casa, siempre es satisfactorio a veces, más bien lo es siempre. No hay lugar exacto que el hogar, todos volvemos de alguna forma a nuestra casa, a pesar de los años.
Vanney y Henrik volvieron a su antiguo hogar, una casa demasiado grande. Con muchas ventanas, una gran puerta, de color blanca y con balcones, que la hacían más moderna a las demás casas. Está estaba, oculta en el bosque y al verla, vieron que no ha cambiado nada, por fuera.
La casa de los Slattely, es una de las casas más importantes del este y a lo largo de estos 500 años, se ha mantenido a pie, a pesar de las circunstancias y los daños que a sufrido en varios siglos.
Vanney miro a la casa y le trajeron tantos recuerdos, algunos buenos y otros... que no quería seguir recordando. Todavía recuerda esa noche, la noche que su padre murió y como se convirtió en la noche más larga de toda su vida. Aún puede oír los gritos en su mente y cierra sus ojos, tratando de no pensar en ello.
Henrik la mira - Yo también lo recuerdo - admite y trata de hacer sentir mejor a su hermana.
- Es difícil superar un trauma, que te marco de por vida.
- No eres la única con un trauma, prácticamente toda la familia lo tiene.
«Tal vez tengas razón» piensa y está consciente que su familia sufrió mucho, después de que su padre murió para salvarlos.
Dejando a su familia sola y desprotegida.
Entonces las puertas de abren, su madre los recibe. Una mujer delgada, su cabello negro, piel blanca, ojos marrones y lo más importante, el collar que los protege de los rayos del sol.
Penélope los recibe y los abraza en cuanto los ve. Se siente tan alegre de volverlos a ver, feliz de hecho, los extraño mucho. Ambos le corresponden el abrazo a su madre, a pasado mucho tiempo, desde la última vez que se vieron.
Cuando se separan, Penélope los invita a pasar.
Ellos entran y se asombran bastante, la casa por dentro es enorme, muchas habitaciones, la escalera de espiral y lo más relevante, es el gran patio que contiene la casa, dentro de ella.
Una mansión en pocas palabras.
- ¿Hace cuánto llegaste? - Henrik le pregunta.
Penélope mira a su hijo - No mucho, hace unas horas, en realidad.
Vanney en cuanto entra, muchos recuerdos llegan a su mente, como un torbellino. Estar en esta casa, hace que sienta la necesidad de apagar su humanidad; son muchos sentimientos encontrados y no le gusta, sentirse tan vulnerable.
Penélope mira a su hija - ¿Estás bien, Van?
«Ya nadie me ha llamado así» piensa y se le hace un nudo en la garganta. La última persona que la llamo de esa forma, fue su padre hace años, antes de morir.
- Estoy bien - miente.
- ¿Segura?
Vanney asiente y entonces ve bajar a un hombre robusto, que conocería a la perfección, las escaleras. Es de piel oscura, su cabello rapado y esa sonrisa amistosa, que conocería en cualquier momento, además, su ropa de cuerpo, muy ajustada para su gusto - Vaya - el hombre los mira ambos -, como han crecido, recuerdo cuando eran solo unos niños.
- ¿Cómo estás Brady? - Henrik lo saluda y le pregunta, dándose un apretón de manos.
Brady sonríe - Ser inmortal, tiene sus ventajas. Me veo mejor que antes - bromea con los hermanos, haciendo reír ambos.
- Brady se quedará aquí, al igual que Mía - comenta Penélope.
Vanney se tensa y Henrik se pone nervioso - ¿Enserio vendrá? - la vampira interrumpe este momento, no le agrada que Mía venga y se quede en su hogar.
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PRINCESA GUERRERA [Libro 1]
FantasyUna tragedia, un arco, una muerte... una historia dónde la magia abunda. Tres reinos, una princesa, una guerrera; la magia y la fantasía se unen en una sola. El comienzo de todo... Susana no sabe que es una bruja y que sus padres murieron a manos d...