PRINCESA GUERRERA [Libro 1]

CAPITULO 7: La presentación

Antes de volver a la aldea, Tony se detuvo, algo que dejo desconcertada a ambas.

-¿Qué haces Tony? - Susana cuestiono.

Tony miro a Rosalinda, -Supongo que no tienes nada que hacer, ¿No? - Rosi no sabía a que quería llegar, así que miro a Susana, en busca de ayuda, pero la chica de cabello casi anaranjado no se lo dio.

-Eh... no, creo que no - respondió.

-Bien, porqué entonces conocerás nuestra aldea.

Susana que estaba cruzada de brazos, abrió más sus ojos de sorpresa, ella bufó y no podía creer que Tony hablará enserio.

Rosalinda no sabía que decir, que el castaño la haya invitado, la hizo sentir halagada de cierta forma, pero también sentía la mirada irritable de Susana y no supo como tomarlo, -Claro, será todo un placer - dijo sonriendo un poco.

Tony se alegro y por la forma en como lo dijo, miro a Susana, pero ella no dijo nada. Ni siquiera estaba de acuerdo en que la llevaran a la aldea, pero no le quedo de otra, que aceptar. 

-Bien, no te molesta, ¿Verdad Susana? - se dirigió a ella.

Susana sonrió, una sonrisa demasiado falsa, pero eso su novio no lo noto, -No, no me molesta... seguro le encantará nuestra aldea - dijo con ironía, mirando a Rosalinda con molestia, Rosi también la miro y se tensó, la tensión entre ellas, era muy obvia que estaba poniendo incomodo a Tony.

Así que los tres iniciaron el paso hacia a la aldea, Rosalinda desde lejos noto lo cerca que Susana y Tony estaban, ella vio como sus hombros rozaban y supuso que eran pareja. Ella no comento nada al respecto y la verdad, es que desde su punto de vista, cree que Tony es muy guapo. "Susana debe tener suerte" pensó Rosalinda, así que les siguió el paso a los dos.

En la aldea de las brujas, Lisa estaba preparando un conjuro para su próximo hechizo, ella estaba sentada, mientras que en la mesa tenía todos los ingredientes listos para el conjuro. Oyó que la puerta se abrió y fue cuando Esmeralda entro.

-Hola - la saludo, pero Esmeralda no la oyó, Lisa que estaba cortando la hierva para su conjuro, vio como su amiga pasaba de un lado a otro. Buscando algo en particular.

Esmeralda miro la vitrina de pociones y estaba buscando una para curar la herida de su brazo. Lisa dejo de hacer lo que estaba haciendo, respiro profundo y mantuvo la calma. Que su amiga este tan desesperada buscando algo, la pone ansiosa.

-¿Qué buscas? - le pregunto.

-Me corté, necesito un remedio - dijo, buscando esa maldita poción.

Lisa se levantó de su silla, -Hey - toco su hombro, -Déjame ver la herida - Esmeralda suspiro, como niña pequeña se resigno y se volteo, dándole su brazo.

Lisa miro el brazo de su amiga, con su dedo cálido, paso por la herida y Esmeralda se quejo, -No te quejes - la regaño, Esmeralda rodeo los ojos.

-¿Te duele? - le pregunto mirándola a los ojos.

-Un poco - respondió, soltando un gemido.

Lisa toco más profundo, con su magia empezó a curar la herida de Esmeralda, algo que ella le agradeció no con palabras, sino con la mente, -Es la marca, ¿Verdad? - ella sabe sobre la marca de fuego, una maldición que Hernis le coloco a Esmeralda cuando era niña. Esmeralda nunca habla de eso y no quiere, porqué esa maldición limita sus poderes; es por eso que necesita el corazón de una bruja blanca.

Esmeralda oyó los entrenamientos de las demás brujas, preparándose para la batalla y la llegada de la luna sangrienta. Sí bien el hechizo para ser inmunes a al fuego esta funcionando, no dudará mucho, la única "cura" es el corazón de una bruja blanca. Y encontrar a Susana, no ha dado frutos los últimos años, en especial por esos par de cazadores que hay en el bosque.