17. Noche De Chicos Y Chicas

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Azul estaba hecha un lío de cabello rosado, lo cuál por supuesto me daba risa.

Eran sólo poco más de las 7 y ya nuestro cabello estaba lleno de tinte, nuestras uñas pintadas y nuestras mascarillas de aguacate puestas, mis padres estaban en una cita por lo cuál la casa era sólo para nosotras.

- Deja de lloriquear, Azul ¿Qué es lo que te tiene así ahora? - moví la mezcla para galletas que estaba preparando y Azul gimió miserablemente.

- Diego se muda a Colorado, por eso no ha estado en el local últimamente - la miré sorprendido, si había notado la ausencia de Diego en el local, pero pensaba que era más por una gripe que una mudanza a otro país - Se irá y jamás supo lo que sentía por él.

- Oh, Blue de verdad lo siento ¿Sabes porqué se muda?

- Su familia es de allá y al parecer le ofrecieron una oportunidad de empleo mejor que Inked - ella volvió a lloriquear inútilmente y yo me encargué de meter las galletas al horno, luego miré hacía todas las direcciones cómo si mis padres pudieran verme y saqué la media botella de vino blanco que mamá guardaba en el congelador.

- No es mucho, pero es todo el alcohol que hay en la casa - hice una mueca y serví el vino en dos copas, Azul me dió una sonrisa triste y bebió un sorbo del vino - ¿Porqué no le dices lo que sientes? La verdad es que no tienes nada que perder Blue, puede que pase un milagro y hagas que se quede.

- ¿Y si no le gusto? - ella enserio hizo un puchero y no pude evitar abrazarla.

- Entonces se irá, pero al menos no quedarías en la duda, no te torturarías todo el día con el "¿Y si hubiera...?", te quiero Blue y si Diego no lo hace, pues mejor que corra a otro país porque lo perseguiré y le patearé su sexy culo ¿De acuerdo? - ella soltó una risita y yo me sentí aliviado por hacer que ella se riera.

- Gracias, Joaco - Blue tomó el resto de su vino en silencio mientras yo sacaba las galletas del horno - ¿Qué pasó con el idiota de Germán?

- No lo sé, su auto no estaba ésta mañana así que supongo que volvió a la universidad.

- No te ofendas, pero creo que necesito algo más fuerte que vino y galletas ¿Qué tal si salimos por unas copas?

- ¿Estás segura? - hice una mueca para decir que en realidad no quería salir de casa, pero ella asintió vigorosamente y luego me arrastró a mi armario por algo lindo para usar. No estaba de ánimos para salir de fiesta así que sólo me puse una camisa holgada a rayas, unos pantalones y unas botines de tacón. Azul por otro lado, me robó un mono y unos zapatos de tacón dispuesta a bailar toda la noche.

- Creo que necesitamos más amigas, eso sería divertido - dijo ella tratando de aplicarse delineador en los ojos, yo asentí sin prestarle mucha atención porque en realidad no me importaba tenerla sólo a ella y pienso que con más chicas las cosas se pueden ir al demonio rápidamente. - u un amigo gay, eso sería doblemente divertido.

- Algo me dice que no tienes más amigos gays porque Dios es piadoso con nosotros - ella frunció el ceño y me sacó el dedo medio cuándo entendió mi chiste.



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Inked Love // Adaptación EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora