Narra Aly
Teníamos todo, o bueno, casi todo preparado para la boda, era en menos de tres semanas, y estaba demasiado nerviosa, pero muy contenta a la vez, era como un sueño que estaba a punto de cumplir.
—Hola Aly— me dijo mi padre llegando a casa dándome un beso en la cabeza— Pasé a ver lo de la decoración del lugar, lo deje pagado.
—Papá, no debiste...
—No, no es nada, hija, lo hago de corazón. Además, se que les va a encantar, confía en mí.
—De acuerdo— le sonreí— Gracias.
***
Narra Hector
—Bien, aquí se puede ver que el bebé esta en perfecto estado, tienes tres meses de embarazo— decía el doctor señalando la pantalla a la cual no le entendía nada, pero en realidad tampoco me importaba y me sentía mal conmigo mismo por eso.
No estaba emocionado, no tenía curiosidad, no sentía amor, ¿que clase de padre era?
Tal vez tenía que esperar a que naciera, esperar a verlo y que el amor naciera, o no se.
No me sentía emocionado porque tal vez tengo la ligera sospecha de que no es mío, pero no puedo decirlo porque si lo es, me sentiría como el peor padre de la historia.
Pero, ¿y si no lo es? No tengo que hacerme responsable de él, ¿o si?
Supongamos que no es mío, y que Frida tampoco sabe de quien es, no me gustaría dejar a un bebé a la deriva.
Pero atarme a ella de por vida por un bebé que no es mío, tampoco es mi plan.
Tenía que pensar bien las cosas...
—¿Están de acuerdo?— dijo la ginecóloga, que me miraba atentamente, volví de mi trance.
—¿De que?— miré a Frida esperando una respuesta, ella solo suspiró.
—Si, estamos de acuerdo.
Salimos de la consulta, pagué y nos fuimos de ahí, me dirigí mi departamento, porque quería hablar con ella.
—Quiero hablar contigo— le dije seriamente una vez que estábamos en la sala de mi casa.
—Dime.
—No se como lo vayas a tomar, espero que bien.
—Bueno, ya dime.— dijo impaciente.
—Quiero hacer una prueba de paternidad.
—¿Qué?— soltó una carcajada amarga— ¿Insinúas que no es tuyo? ¿Insinúas que estuve con alguien más?— comenzó a gritar.
—Solo quiero estar 100% seguro, te recuerdo que no fue nada formal entre nosotros, así que tenías todo el derecho de tener más parejas.
—Pues no lo haré, porque no estuve con nadie más que contigo. No pongas pretextos, si no lo quieres tener solo dímelo y nos vamos de tu vida para siempre— como dije, no quería que una criatura pagara los platos rotos.
—No es lo que dije, solo te pedí la prueba, pero esta bien si no la quieres hacer— le dije con cansancio.
Después de la discusión, Frida se fue. Su actitud me hizo sospechar aún más, pero no le diría nada, traté de hacerlo por las buenas, pero no cooperó, así que ahora investigaría por mi cuenta.
¿Por dónde podía empezar?
No podía preguntarle a cada hombre que se me cruzaba si había tenido algo con ella, a sus amigas no las conozco, no se si quiera si tiene amigas, su familia está al otro lado del mundo, a Diego claramente no se lo preguntaría, además tiene mucho que no se ven, o eso creo.
¿Qué podía hacer?
Después de pensarlo muchas horas, y no obtener respuesta, me frustre, me frustré y comencé a ponerme nervioso y a sudar.
Mi pierna derecha comenzó a moverse repetidas veces, no podía parar, era algo extraño que nunca había experimentado.
Mi corazón palpitaba fuertemente, tanto que lo podía sentir. Me preocupé, así que tomé las llaves de mi auto, lo encendí, pero al momento de salir del garaje, escuché un claxon muy cerca y paré en seco.
"No estas bien" se repetía en mi cabeza.
Decidí salir del auto y volver a la casa para llamar a una ambulancia, o a alguien que pudiera ayudarme.
Me senté en el sillón y traté de respirar, pero todo esto que sentía no se iba. Sentía que en cualquier momento podría darme un paro cardiaco.
La ambulancia por fin llegó y los paramédicos entraron a la casa, checaron mi corazón y fue cuando me dijeron que si tenía que ir al hospital, así que subi a la ambulancia y nos dirigimos al más cercano.
Al llegar me hicieron un electrocardiograma y me dieron la opción de llamar a alguien de confianza para que me acompañara, la primera persona que se me vino a la mente, estaba en otro continente, así que mejor decidí no hablarle a nadie.
Cuando me estabilicé, los doctores dijeron que me recomendaban pasar ahí la noche, ya que querían monitorear que todo estaba bien. No me negué.
Tomé mi celular y vi la hora, once cuarenta de la noche, suspiré y entré a mis redes sociales. Mala idea.
Lo primero que me apareció, fue una noticia en una página de chismes cualquiera, que hablaba sobre el embarazo de Frida, donde se confirmaba que el bebé era mío.
Al parecer los paparazzis nos habían capturando saliendo de la consulta con la ginecóloga, porque adjuntaban las fotos.
¡Mierda!
Mi corazón comenzó a acelerarse de nuevo, mi respiración se agitó. Espero que Aly no vea las fotos, lo pedía de rodillas. ¿O que tal si ya las vió? ¿Qué va a pensar de mi? Me odiará.
Los doctores llegaron corriendo, fue ahí donde capté el sonido de las máquinas, estaban sonando repetidamente, supongo que era causa de mi alteración.
————————
Pobre Hector, ¿creen que es demasiado o se lo merece?
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Amor prohibido [Diego Lainez]
Fanfic-Por ti renunciaría a todo lo que soy... #1 en "america" 5/11/21. #1 en "Diego Lainez" 18/08/22.