이십구.

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HWANG HYUNJIN

Caos.

Esa era la palabra que definía a la perfección lo que estaba pasando estos últimos meses.

Hacía al menos 3 meses que había hecho oficial nuestra relación y el embarazo de Jeon y aún así los medios seguían hablando de nosotros. Algunos mejor que otros.

Había gente que nos apoyaba, mucha gente y otros, como siempre, que no les gustaba nuestra relación, aunque sinceramente eso nos daba igual mientras nuestros fans estuviesen ahi.

En estos 3 meses habíamos acabado de grabar la serie, necesitábamos meter el turbo para hacerlo antes de que Jeon empezase a no poder grabar fácilmente y que su tripa no se notase.

La premiere de la serie fue muy bien, sobre todo después de que la gente supiese de lo nuestro, tuvo más apoyo por ese motivo.

Nuestras vidas ahora mismo iban bien encaminadas y eso era algo que había costado un poco y a habido algunos problemas, pero los superamos días tras día.

-Pero yo lo dije, ¡tendrias que haber llenado el molde hasta arriba!- grito Ryujin desde la cocina.

Estábamos en el dorm, en una especie de citas de parejas. Ryujin y Jeon estaban en la cocina haciendo cupcakes. Felix se mostró voluntario para hacerlos ya que se le da bien la repostería, pero ellas dijeron que querían hacerlo.

El resto de chicos estaba o con sus familias o con sus novias. Si Chan, Han y Seungmin tienen novia, chicas que conocieron hace no mucho pero que según ellos pinta bien.

Mientras Felix y yo hablábamos de diferentes cosas y como siempre teníamos nuestras conversaciones profundas sobre, prácticamente, todo.

-Hemos llegado lejos Lix y sinceramente no esperaba que las agencias no se metiesen- me coloqué mejor en mi sitio.

-Me sorprendió si, pero eh, mejor así- me pegó en el hombro -Ryujin y yo queremos hacerlo público también, pero al ser los dos idols es más difícil- hizo una mueca pensativa y suspiró.

-Lo consegureis. Sois dos idols muy queridos y la gente os aprobará y aunque no os aprueben, seguir a los vuestro-

-Si. Tienes razón, cambiando de tema- Felix se acercó más a mi -¿Sabéis algo del sexo del bebé?-

Era sacar el tema de el bebé y sonreía como un tonto y es que era para hacerlo porque desde que Jeon se arregló con su madre y nos dijeron lo del bebé todo ha ido sobre ruedas. Hemos tenido nuestros más y nuestros menos y hay veces que discutíamos por cualquier tontería, pero siempre, siempre, siempre pasaba una cosa: no podíamos pasar más de un día peleados, hay veces que tampoco pasábamos más de unas pocas horas.

Lo que tenía claro es que quería pasar el resto de mi vida con ella.

-Tenemos cita dentro de una semana para ver cómo va todo y aunque es pronto igual se puede ver el sexo-

-Nunca te imagine siendo padre- los dos reímos y es que es verdad, me gustaban los niños pero yo a ellos no.

-Siempre quise tener y ahora lo he conseguido, no fue planeado pero eso... Eso me da igual-

Felix asintió y volvimos a reír cuando se siguieron escuchando gritos de la cocina.

-Y ¿Sobre lo otro? ¿Cómo vas?- dijo en un susurro.

-Tengo algo pensado y si todo va bien será para-

-¿Que tienes pensado?- Jeon y Ryujin aparecieron por detrás con la bandeja llena de cupcakes.

-¿El que?- me hice el desentendido.

-¿Que que es lo otro que tienes pensado?- pregunto sentándose a mi lado.

Mire a Felix y Ryujin que me miraron con los ojos un poco abiertos y a la vez le dieron un mordisco a sus cupcakes.

-¡Ah! Eso sí si es algo que estoy haciendo con Felix y Changbin, preparamos una coreografía y yo soy el encargado de hacerla- asentí intentando convencerla.

-Ah, me la tendras que enseñar ¿No?- preguntó.

-Si si claro lo haré- sonreí algo nervioso pero cuando apartó su mirada de mi solté todo el aire que estaba reteniendo.

La tarde transcurrió normal, risas, bromas y sin momentos incómodos entre nosotros cosa que es muy satisfactorio.

Jeon y yo decidimos irnos un rato más tarde ya que su madre estaba en casa y dijo que quería verme.

La madre de Jeon es una mujer intimidante y también cálida cuando la conoces. Desde que volvió a aparecer el padre de Jeon y ella han estado viajando. Si 3 meses de viajes por todo el mundo ya que el padre de Jeon tenía dinero y se lo podían permitir.

-¡Mama! Estamos aquí- entramos a la casa y todo estaba a oscuras así que supe que era el momento.

-Vamos al salón, igual esta allí- fuimos hasta aqulla sala y ahora sí que sí estaba todo preparado.

Jeon encendió las luces del salón y cuando lo hizo todo fue según lo acordado.

Contacté con su madre hace unos días para que me ayudase con lo que estaba por suceder. El plan era que llamase a Jeon diciendo que estaba en casa y que quería vernos, a los dos.

El salón estaba decorados con luces tenues que se notaron cuando yo apague la luz de la estancia y encendí las led. Globos de color dorados y blanco en el techo y confeti de color dorado también por el suelo. Había rosas rojas por las esquinas y en la mesa de centro del salón.

Simplemente era todo perfecto y aunque sentia que se me iba a salir el corazón por la boca me lancé.

-Jeon- llame. Cuando se dio la vuelta vi en sus ojos confusión y creo que también ilusión.

-¿Que es todo esto?- preguntó.

-Ahora lo sabrás- dije en un susurro -Solo necesito que no me interrumpas-.

Ella asintió y comencé.

-Jeon- sonreí -Nini, ¿Cuanto ha pasado? ¿Por cuanto hemos pasado? No se el tiempo exacto que llevamos juntos, se que no es mucho pero tampoco es poco. Hemos vivido mucho y muy rápido- hice una pausa recordando todos los momentos juntos -Hemos reído, llorado, discutido y sobre todo nos hemos querido mucho. Mi amor y admiración por ti es algo que no ha disminuido con el tiempo ni ha sido algo pasajero, no. Creí, cuando te conocí que no llegaríamos a nada pero cuando ese día, aquí en esta misma casa, conociéndonos de solo ¿Que? ¿4 días? Me besaste. Y eso me encantó, me besaste tú- Jeon bajó la cabeza con las mejillas rojas y ahí aproveché para acunar su rostro entre mis manos -Eres lo mejor que me ha pasado nunca, has sido mi primera novia, mi primera vez, la primera vez que me he enamorado de verdad de alguien y eso.. eso me hace sentir como que cuando estoy contigo estoy completo. Me has tenido paciencia en muchas, muchas cosas. Ahora más que nunca quiero estar contigo y con nuestro hijo- mirándola a los ojos baje una mano hasta su vientre que ya empezaba a crecer ella tenía lágrimas en los ojos y decidí hacerlo ya. Hinqué una rodilla en el suelo y pregunté -Kang Se-Jeon, ¿Quieres casarte conmigo?- dije en un susurro.

Y así con lágrimas ya corriendo por nuestras mejillas y sonriendonos el uno al otro ella dijo:

"Si, claro que si"

Puse el anillo que había sacado un poco antes de una pequeña caja de terciopelo negro y se lo puse en el dedo.

Después cogí su rostro entre mis manos de nuevo y la besé, con toda la delicadeza y toda la suavidad que pude reunir. Sonreí en mitad del beso y es que no podía estar más contento.

Uní nuestras frentes y baje mi mano izquierda al vientre de Jeon.

-¿Has oído pequeño? Papá y mamá se casarán- susurré, levanté mi mirada hacia Jeon -Te quiero, te quiero muchísimo Nini-

-Yo también te quiero, te quiero tanto- puso sus brazos alrededor de mi cuello y yo rodeé su cintura.

Hoy me sentía completo y se que después de esto todos los días de mi vida lo estaría. Lo estaría porque estaba con ella, la mujer de mi vida se llamaba Kang Se-Jeon y no tenía ninguna duda de ello.


Por "Accidente"// HWANG HYUNJIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora