capítulo 9: aprender a quererte.

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Todos estaban algo asombrados por la idea de Villamil; sin embargo, no les parecía tan descabellado; pues él tenía razón; eso era lo que los jóvenes necesitaban para alejarse del camino de la delincuencia pero ninguno se atrevía a darle alguna respuesta; pues por otro lado, ellos sabían que a Posada no le iba a gustar la idea de que alguien hiciera algo como eso; porque según él, estarían desafiando su autoridad.

-Ok, alguno de ustedes va a decirme algo? porque me siento como si estuviera hablando solo.

-Bueno nos encanta tu idea pero no creo que debamos desafiar a posada; ya sabemos cómo es y lo que es capaz de hacer si alguien se pone en su contra.

un momento; ustedes no fueron los que me dijeron que pensara en un plan para ayudar a los jóvenes y a los niños?. Entonces por que ahora se hechan para atrás? Explíquenme eso porque no los entiendo. Dijo Villamil algo decepcionado.

Sí pero estuvimos analizándolo por un rato y nos dimos cuenta que aunque es una maravillosa idea, no podemos hacer nada sin que posada lo apruebe antes. respondió el menor tratando de sonar calmado.

-A, muy bien; entonces creo que eso es todo. Contestó papo levantándose de su lugar, totalmente dispuesto a irse; y luego los demás hicieron lo mismo

-No! Eso no es todo. Dijo Isaza haciendo que todos los presentes se volvieran a sentar en el mueble.

-Ya basta!. Ya fue suficiente!. Yo no pienso seguir mostrándoles miedo a esos imbéciles de los posada. Yo si Apollo a papo y no me importa si ellos tienen el poder. Yo sí voy a luchar por santa Fe; allá ustedes si quieren quedarse con los brazos cruzados viendo como todo se va al carajo.

-Juan Pablo tiene razón . Concedió el mayor de los vargas quién no había dicho ni una palabra desde que había empezado aquélla discusión. -No podemos seguir quedando nos acá esperando que ellos destruyan en un instante lo que a los villamil les costó años construir; Así que yo también me uno a los Juan Pablos.

-Que? Pero Simón!...

-Simón nada! Mira Bachi, yo sé que esto no es nada fácil pero tampoco es imposible; la verdad es que yo ya estoy cansado de recoger todos los días un cuerpo de algún joven que lo único que quiere es superarse y trabajar para ganarse la vida limpiamente y lo que encuentra, es una muerte segura, simplemente porque se niega a meterse en los negocios sucios de Alejandro y su familia.

-Si lo dices así, creo que tienes razón; tenemos que hacer algo pero ya!.

-Entonces?... Preguntó villamil y todos pudieron notar la esperanza que había en sus ojos verdes.

-Cuenten conmigo! Dijo el pequeño mientras chocaba los 5 con los otros 3 chicos.

-Sí! Dijeron todos a la vez.

-Muy bien! Ahora solamente necesitamos un nombre para la fundación y otro para este maravilloso equipo. Habló Susana muy entusiasmada.

-Espera; tú también te unes a nosotros?.

-Obviamente hermanito.

-Pero, y Alejandro? Interrogó villamil. -Digo; él es tu novio y dudo mucho que le guste la idea de que nos apolles a nosotros en vez de a él.

-Pues que se joda! Yo los voy a apoyar le guste o no y sobre todo a ti; puedes creerme cuando te digo que no pienso fallarte y menos después de todo lo que has hecho por mí. Respondió ella tranquilamente.

-Yo creo que la fundación se puede llamar aprender a quererte. Propuso villa tratando de enfocarse nuevamente en esa conversación ya que otra vez se había quedado embobado mirando a Susana mientras hablaba y obviamente no quería que el resto de los chicos lo notaran y empezaran a hacer preguntas.

-Me encanta! Respondió isaza.

-A mí también!. Aprobó el policía.

-Está genial!. Observó Susy.

-Entonces, aprender a quererte. Señaló el menor. -Y nosotros cómo nos vamos a llamar?.

-Los titanes?. Propuso el Juan Pablo mayor.

-Sí! titanes!. Gritaron todos e hicieron la señal de aprobación con la mano.

Siguieron hablando sobre la fundación y lo que harían desde ese día en adelante y sin darse cuenta ya la noche había llegado; así que pidieron algo para comer y luego cada uno se fue a su respectivo hogar. Y así fue como desde esa noche la vida de todos los habitantes de Santa Fe, en especial la de villamil, cambiaría y se convertiría en una verdadera pesadilla. Pues aunque ellos no lo notaron, alguien bastante cercano a posada, estaba observando sus movimientos desde la cafetería, hasta la casa de villamil y obviamente no iba a perder la oportunidad de contarle esta información tan valiosa para él. Aunque para fortuna de Los titanes y mala suerte de posada, esta persona infiltrada no pudo escuchar lo que ellos hablaban; Así que solamente le contaría que vio a los cinco chicos entrar a la casa de la persona que él más odiaba y odiaría por toda su vida.

la última canción  - Juan Pablo Villamil & Susana Cala.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora