Capítulo 19

76 9 0
                                        

Lina

Resuena la música en mi cabeza y mis tímpanos gritan por un descanso de escuchar tanta habladuría inentendible y felicitaciones fuera de lugares. Miro a mi alrededor y solo puedo observar vestidos costosos, joyería brillante, copas medio vacías y mucha, pero mucha gente que no dan buena espina. Me siento tan furiosa y aterrada de estar aquí con esta gente que mis manos sudan y mi pierna no ha dejado de moverse. Cada vez que siento que voy a romper en llanto en medio de este lugar solo pienso en mamá y confiando en su decisión porque que horrible es sentirte insignificante e incomoda en tu propia boda.

Hundiéndome en mi miseria siento como tocan mi hombro y me paro al instante. Mis hombros dejan de tensarse cuando veo que se trata de mi padre.

- Es hora de irse

- ¿Irnos a dónde? ¿A dónde vamos papá? – pregunto sin saber nada

- El no irá a ningún lado, en cambio a ustedes – Stuart se acerca acompañado de Edryan en un medio abrazo incomodo – Ustedes irán a celebrar su maravilloso matrimonio en su luna de miel

Mi corazón da un salto al escuchar sus palabras y mi mirada busca rápidamente los ojos de papá para convencerme de que me están gastando una broma, una muy mala broma peor que casarme. Al mirarlo veo como evita mi mirada una vez más como lo ha hecho todos estos últimos días. Sin evitarlo dirijo mi mirada a Edryan para ver su reacción a tal idea de irnos de luna de miel si no es que ya la sabia, de seguro la planeo. Me sorprende ver la confusión adueñarse de sus ojos a la hora de escuchar a su padre a lo que me hace mirarlo más del tiempo estimado.

- De ninguna manera – protesto – no me voy a ir a otro lugar solo con él, sobre mi cadáver

-  Estoy de acuerdo – me secunda Edryan sorprendiéndome – ya bastante tuvimos con este teatro de boda ya déjenos en paz de una vez

-  Los entendemos, solo serán por un par de días solo es para evitar rumores – comienza excusándose papá siendo interrumpido por Stuart

-   Se van a ir y se acabó la discusión, el auto los espera – nos dice dirigiéndonos a la puerta con una mirada y voz gélida que congelan mis huesos.

Nos suben al auto sin la típica despedida a las parejas felices y se ponen en marcha de inmediato como si se cuidaran que de algunos de nosotros nos tiráramos por la ventana, aunque pensándolo bien no es mala idea. Pensando en las maneras que me puedo escapar y probablemente matar en el camino me doy cuenta del terrible silencio que estoy sumida en este auto. Me giro para ver a mi supuesto esposo a mi lado y lo veo con la cabeza inclinada hacia atrás con los ojos cerrados. No sé si es estúpido o su nivel de confianza es extrema contando que tiene a una mujer a su lado que le encantaría matarlo. Mi mente empieza a maquinar en cómo podría asfixiarlo con mis manos en este momento, en cómo podría tomar su cuello y apretarlo con todo mi ser, pero de ese pensamiento salta a como su cuello esta inclinado y su piel clara que sigue a donde esta su quijada marcada como si estuviera aguantando un gran enojo, sus ojos cerrados dejando a la vista sus pestañas oscuras, su nariz perfilada y su cabello azabache tapando gran parte de su frente. Como esta ahora nadie creería que es el jefe de una mafia y al pensar en eso me doy cuenta de que me quede mirándolo por mucho tiempo, tanto que llegamos a una pista de aeropuerto totalmente vacía con solo un jet esperando por nosotros.

Sus ojos se abren y rápidamente aparto los míos dándome una bofetada mental por dejarme quedarme tanto tiempo mirándolo. El se endereza y sale del auto, lo veo rodearlo y antes de que llegue a mi puerta la abro y salgo, aunque mi enorme y ridículo vestido me impide salir por completo. Edryan trata de ayudarme, pero le aparto su mano que toca mi vestido.

-  Puedo sola – le espeto aun luchando con la enorme cola

-  Se nota – me dice con cierta ironía que detecto mientras da un paso hacia atrás

Mientras le lanzo una mirada de fastidio sigo luchando para poder sacar lo que queda del vestido hasta que logro. Mi giro y lo veo esperándome con el inicio de una sonrisa dibujada en su rostro. Gesto que no dura mucho pues la cambia con una de seriedad al instante.

- Andando – dice con voz dura y me hace seguirlo hasta subir al jet que al entrar veo que es privado y que está repleto de puro lujo

Una azafata se me acerca y me entra una maleta de mano al igual que a Edryan y nos indica que nos cambiemos para estar cómodos cosa agradezco ya no aguanto un segundo más con este maldito vestido.

                                                                                     
                                 ...
Al terminar de cambiarme y ponerme los pantalones más cómodos que me he puesto salgo de la habitación del avión y me dirijo al área de los asientos encontrándome con Edryan vestido informal con unos jeans y camiseta de color blanco sentado con la atención puesta en su computador. Se ve muy concentrado y puedo notar que su quijada se marca mas de lo normal y sus hombros completamente tensos. Para aun mirándolo veo sus dedos se mueven sobre el teclado y su pierna esta en constante movimiento como si fuera un tic.

-  Si quieres que me vaya de aquí hubieras llegado hace 15 minutos, por lo tanto, yo llegue primero – me dice sin apartar la mirada del ordenador.

Carajo ¿eso quiere decir que me atrapó mirándolo?

-  No quiero ir a ningún lugar contigo y mucho menos de luna de miel

-  Créeme que a mí tampoco me apetece – me contesta aun sin apartar su vista del ordenador

- ¿Entonces que hacemos? No vayamos a ningún lado

-   No podemos

-  ¿Por qué no?

-  Tenemos que desaparecer al menos por dos días

- ¡Ay por favor! Eso es una estupidez para tanto poder que se dice que tienes haces todo lo que te dice tu papi – le cuestiono ganándome una mirada de su parte que fácilmente congelaría a todo el mundo

-  Cuidado – me advierte con una voz gruesa que jamás había usado conmigo lo que me indica que le molestó mi cometario lo que me hace continuar

-  Edryan cásate, Edryan sonríe para la gente, Edryan vete de luna de miel Edryan – soy interrumpida por la proximidad de el al levantarse de su asiento y plantearse justo al frente de mi con una furia notable. Me mira fijamente como si estuviera analizando las opciones de como puede torturarme o matarme en estos instantes. Esta furioso lo sé, pero yo lo estoy mas y no bajo ni una sola vez mi mirada y me quedo haciéndole frente.

-  Quizás no sepas nada de este mundo, pero te aseguro que no te conviene meterte conmigo si no quieres salir perdiendo, no sabes nada sobre mi – me amenaza acercándose aún más, tanto que puedo sentir su respiración mezclándose con la mía

-  ¿O qué? – lo desafío

-   Lina...no empieces algo que sabes que no vas a poder terminar – por su aspecto y tono de voz veo que no tiene una pizca de que esta jugando lo que me hace retroceder un poco y acabar con la conversación

-  Si tan poderoso te crees deja de ser la marioneta de tu padre, aunque sea una maldita vez – culmino caminando hacia la habitación dejándolo todo hecho una furia sin explotar.

Maldición.

Intravenous Donde viven las historias. Descúbrelo ahora