Capítulo 213: Horas extras

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Nota: Capítulo bomba! y largo, proporcional al tamaño del tremendo paquetote que se carga Gojo... digo suerte van a necesitar pañuelos tal vez.

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En efecto fueron a ver a Ijichi por asuntos concernientes a Happy Place, al parecer ya estaba todo listo para la inauguración de la segunda sucursal en otra de las ciudades. Cuando iban de regreso esta vez a Black Infinite escuchaban rumores pero nadie se atrevía a decir algo con respecto a la próxima boda. Nanami por su parte pensaba y trataba de mantener la calma... ¿cómo podía librarse esta vez? Ya se había librado una primera vez de casarse con Mei Mei... el truco que había usado antes no funcionaría ahora. Él no planeaba casarse, de verdad no lo haría pero debía encontrar una buena excusa y asegurarse de que C&P se mantuviera en el corporativo. Maldición... no podía llegar aún a una conclusión.

Después de su supervisión diaria por Black Infinite él subió primero a su oficina, Satoru se quedaría para seguir investigando. Mientras buscaba información Satoru no podía evitar dejar de pensar en todos aquellos cuestionamientos... ¿si Nanami tuviera que casarse... él qué haría? No quería llegar a una respuesta... sólo lo hacía sentir miedo y demasiados celos y los celos eran sentimientos difíciles de controlar lo estaban llevando a pensar que... debía decirle a todos que él era el amante de Nanami.

"Es una locura, Satoru. Piensa en él, en todo lo que podría perder, en la empresa que podría perder ¡no puedes hacer eso!" Tenía razón... suspiró y al no encontrar nada más sobre el dichoso asunto Epsilon, volvió a subir a la oficina. Y sí, ya se lo imaginaba mientras iba en el elevador... esa perra estaría allí.

Abrió la puerta de la antesala para escuchar a aquella mujer gritando.

—¡¿Es que no lo entiende?!

—¡No, y ya tuve suficiente! —gritó Nanami, estaba furioso— He sido lo más paciente que se puede con esta situación. Yo en ningún momento te dije que me casaría contigo. No quiero y no lo haré.

—Es que... sólo es un capricho... esa maldita amante suya está nublándole su juicio.

—¡De todas formas no es algo que debiera salir a la luz! ¿Por qué tu padre ha dicho todo eso...?

—No lo entiende, señor Nanami, él quiere lo mejor para la empresa.

—Es que no me importa lo que diga él. Tú y yo somos dos adultos podemos resolver esto.

—¡No hay nada más que discutir señor Nanami! Usted se casará conmigo y es mejor que lo acepte por el bien de la empresa y también es mejor que se vaya despidiendo de esa amante suya, ¡no pienso perdonarlo si sigue viéndola! Elíjame a mí, verá que es mucho mejor. Sólo deme una oportunidad.

—Me cansé de hablar contigo...

Satoru había notado que su voz se entrecortaba producto de su exaltación por el enojo. Abrió la puerta pero Nanami no pudo verlo.

—Largo de mi oficina.

—¡Pero señor Nanami!

—¡Que te largues! Si no hubieras hecho todo eso... no estaría tan enojado contigo. Ahora vete no hablaré más.

—Le pido —Satoru intervino estaba de pie en la entrada de la oficina— que se retire. El señor Nanami tiene mucho trabajo no puede atenderla en este momento. Dele tiempo a la situación no soluciona nada sólo haciéndolo enojar... en realidad pierde más.

Mei Mei apretó sus dientes, le dedicó una mirada llena de recelo a Nanami y se fue. Satoru también salió a la antesala, escribió un papel, se dirigió hasta la puerta de la antesala, lo pegó y aseguró la puerta. Volvió para entrar a la oficina.

Moondust II - Jujutsu KaisenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora