Moondust II - Jujutsu Kaisen

Capítulo 228: Street Dancer

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Nota: recomiendo tener a la mano su insulina! Porque llegamos a la primera cita oficial! Aunque todes aquí sabemos cuál fue la primera cita. Les dejo referencia musical, escúchenla antes de leer para que entiendan el contexto.

'Street Dancer' - Hiromi Iwasaki

Link: https://youtu.be/dreX1ihDYus?si=S68ZkaEglQGiWpOG

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Al salir Satoru iba saltando de un lado a otro cómo podía pues aún cargaba aquella cosa cubierta con telas. Iba tan feliz que tarareaba.

—¡El señor Nanami me compró ropa yupi! Podemos venir de nuevo, quisiera comprar ropa más casual.

—Cuando quiera. Usted sólo dígame el día.

—¿Me compraría ropa casual?

—Lo que usted desee que le compre yo lo haré.

Sí, lo que él quisiera con tal de verlo así de feliz. Llegaron al auto y Satoru se apresuró para abrir la puerta.

—¡Permítame por favor! —dijo Satoru con voz grave y seductora.

Abrió primero la puerta trasera y metió allí el artefacto. A grandes zancadas caminó alrededor de Nanami, abrió la puerta del auto y continuó hablando con voz seductora.

—Por favor entre.

Nanami atendió. Cuando estuvieron dentro de inmediato regresó la tensión. Ambos se quedaron callados y Satoru tardó en encender el auto. ¡Recordaban lo que acababa de pasar! El auto comenzó a andar y ellos seguían en silencio y comenzaron a sonrojarse. Fue Satoru quien habló.

—Se-señor... yo creo que debemos hablar.

—¿Sobre qué?

La voz de ambos temblaba ante el nerviosismo.

—Primero dígame... ¿está... nervioso?

—Hmm un poco avergonzado en realidad. ¿Y usted?

—Igual. Quiero hablar sobre lo que pasó, sobre... haber tenido sexo allí... No me arrepiento de haberlo hecho.

—Ni yo. Me gustó demasiado.

Satoru lo miró por un momento.

—A mí también...

—Nunca había tenido sexo en un lugar tan público. —lo decía con un poco de vergüenza y a Satoru le pareció adorable— ¿Puedo saber por qué me sigue en estas locuras?

—Hmm... ¿no debo? Creo que fue acuerdo mutuo—lo escuchó suspirar— Es complicado lo sé.

—Hizo... que el presidente de dicha empresa lo cogiera en un vestidor.

—Y el vicepresidente del corporativo más importante del país. Sí... lo hice... ¿puedo poner eso en mi currículum?

—No le voy a negar su gran hazaña. Ve... he perdido la cabeza por su culpa... Y lo disfruté demasiado. Pero no volverá a pasar.

Satoru se rio.

—Sabe... cuando me llevó a Two Arrows por primera vez yo... si no nos hubieran interrumpido creo que hubiera pasado lo que pasó hoy... dígame si sólo era yo.