Moondust II - Jujutsu Kaisen

Capítulo 217: Flores convertidas en palabras

✨🌙✨

Nota: volví con un capítulo que les dará sobredosis de dulzura

✨🌙✨

Mismo viernes. 7:32 pm

Nanami había llegado a su departamento. Haibara lo había seguido hasta la sala y comenzó a darle informes hasta que se percató de lo desanimado que estaba. La conversación de la mañana y quizás de días anteriores debería ser para ese momento.

—Oye Kento... —por fin dejó la distancia que había mantenido, aunque en realidad conforme pasaron los días su amistad volvía a sanar— Te noto mal. Y no te molestes en mentir, es muy obvio tu estado de ánimo, está por los suelos cuando antier estabas... bueno sumamente feliz. ¿Te... peleaste con el señor Gojo?

Nanami lo miró, era muy bueno para adivinar. Le dio una copa de vino y se sentó en el sofá... no estaba seguro de qué decir y Haibara no se iría hasta hacerlo hablar, en parte le agradecía que volviera a hablarle con normalidad, y él confiaría desde luego como lo había pedido.

—No estamos peleados.

—Qué extraño yo juro que están distanciados. Te la habías pasado en su departamento y hoy viniste directo aquí.

—¿Qué no puedo venir a mi departamento?

—O sea sí... pero preferirías mil veces estar con él y eso está bien. ¿Están distanciados por todo el problema que ha causado la señorita Mei Mei? Sería muy comprensible que el señor Gojo tenga celos.

—Hmm.

Bueno ¿cómo se lo decía? Sí, celos había, pero esto ya iba más allá de un juego de celos, esto los había apartado. Quizás... debía decirlo. Lo puso al tanto de todo... bueno casi de todo. Lo de Mei Mei y lo de Nobara que era lo que más le afectaba.

Haibara se había quedado callado, no esperaba eso de una niña. Entendía el distanciamiento por ese aspecto pero... ¿lo de Mei Mei?

—Kento... ¿puedo darte mi opinión?

—Por supuesto... agradecería que mi mejor amigo me aconsejara... y fuera mi cómplice de alguna forma.

Ambos sonrieron ligeramente. Sin decir nada más que eso anteriores malentendidos quedaban resueltos. Haibara estaba feliz de que pudiera hablar de nuevo con Nanami con naturalidad.

—Creo que se precipitaron al alejarse con respecto a lo de tu falso matrimonio.

—Él cree que él es la razón por la que no acepto.

—Qué soberbio de su parte —no pudo evitar reírse—. Tú no aceptas porque no te interesa. El matrimonio nunca ha sido lo tuyo ¿no? —Nanami levantó los hombros, su silencio alarmó a Haibara— ¡¿no?! ¡No me digas que lo consideras, que consideras casarte con ella!

—Tú sabes que mi plan de vida nunca consideró un matrimonio. Si fuera el caso, si yo quisiera venderme de esa forma yo lo hubiera considerado hace años con una de las mejores propuestas de mi vida. Ni siquiera hubiera llegado a ser vicepresidente de Golden Mountain.

—Exacto. ¿Se lo dijiste al señor Gojo?

—Todo eso no, pero sí le dije que no quiero casarme. Aun así él tiene razón. Si no lo hago el problema sería mayor, atentaría con todo lo que hemos logrado hasta ahora. Por el bien de Happy Place, por el bien de las otras empresas quizás deba considerar casarme...

Haibara había abierto la boca, lo desconocía.

—¿De verdad lo harás...? Bueno en todo caso es un matrimonio político no importa. Puedes seguir con tu relación con el señor Gojo, muchos lo hacen.