⚔️➼ ɪɴᴛᴇʀʟᴜᴅɪᴏ 1 ⚔ ꜰÉɴɪx Y ᴅʀᴀɢÓɴ

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⚔️《〡☀️ʜᴀᴄᴇ ᴠᴇɪɴᴛᴇ ᴀÑᴏꜱ☀️〡》⚔️

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⚔️《〡☀️ʜᴀᴄᴇ ᴠᴇɪɴᴛᴇ ᴀÑᴏꜱ☀️〡》⚔️



Una enorme capa de humedad mediterránea adornaba el ambiente, tan condensado y retorcido que, incluso, a veces resultaba ser algo vil y rastrero cuando uno trataba de respirarlo. La marea era alta, y las olas se vieron afectadas con un espeso manto de espuma blanca al arreciar sus elevadas crestas contra los escarpados murales de los acantilados que cernían las costas, o al hundirse sofocadas bajo la ira del Sol en sus arenosas playas..

Sin embargo, ni un alma compartía ese día el aliento para discutir o abordar dichos temas; dado que, a pesar de que en gran parte del mundo estuvieran viviendo festejos mientras se respiraba un aire fresco de suma tranquilidad, hubo unas cuantas ciudades que eran devastadas por un aterrador grupo de astutos villanos que trabajaban de manera separado o desorganizada. Contra todo pronóstico, siempre guardando las apariencias.

Juan Levante, mejor conocido como el Fénix, apretaba el ritmo mientras ascendía a toda velocidad por unas eternas escaleras de metal incandescente. El suelo cada vez se hacía más distante, y el sudor más copioso, sumándole a eso el carbonizado olor a quemado que provenía de los edificios derruidos de afuera, o las brasas que su propio cuerpo desprendía y que formaban unas aletas de fuego a su espalda. Ataviado con una pesada armadura, la plata todavía resplandecía ante la insuficiencia de la luz que se filtraba desde los cientos de grupos de ventanas que plagaban aquel amplio edificio, más alto que un rascacielos. Las cortinas de humo, las explosiones y los héroes en acción no deberían permitirlo; al menos, no demasiado. Y cada paso que daba por los ahuecados escalones, por fatigante que fuera, le dejaba más en claro que gran parte de la ciudad de Barcelona se convertiría en ruinas si no alcanzaba la cima de la Torre Gabarg, en pleno centro, cuanto antes.

Roma, Bucarest, París, Berlín, Londres, Oslo, Praga y Pekín. Nombres que habían resonado con severidad en los labios de altos cargos pertenecientes a la Comisión Global de Seguridad Pública de Héroes, al tiempo que les advertían para detener los diversos atentados que los Nueve Reales estaban cometiendo simultáneamente en dichas naciones: capitales en su absoluta mayoría. Un problema grave, teniendo en cuenta que la economía y la política podrían caer en picado de ese momento en adelante, como si una balanza se inclinara a favor de los criminales. Juan Levante no quería imaginarse lo que sucedería después.

Afortunadamente, los héroes se habían pronunciado de inmediato con fin de evitar un futuro desamparado; prestos y dispuestos a luchar para salvar a los inocentes, a pesar de que no hubieran sido comunicados anteriormente acerca de qué clase de villanos iban a enfrentar. En consecuencia, allí, en Barcelona, sólo se sabía que alguien estaba activando bombas y destruyendo los edificios que rodeaban toda la comunidad desde una señal remota y, ciertamente, desconocida. Pero hubo alguien que había logrado interceptar una media docena de señales esparcidas al aire libre y descubrir la localización secreta del villano que orquestaba todo aquel maquiavélico plan. Y aunque ese alguien hubiera filtrado los datos a la Comisión, primero se los había confiado expresamente a su mejor amigo de toda la vida: Juan Levante.

ᴄᴀᴍɪɴᴏ ᴀ ʟᴀ ʟᴜᴢ《☀️ʙɴʜᴀ ᴏᴄ☀️》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora