Segunda Oportunidad

Capítulo 41.

Daniela

Los días fueron pasando, Esteban se enteró y su reacción me dio miedo, no estaba de acuerdo con que tuviera al bebé pero Manu lo convenció de que podían sacar provecho de la situación y darnos aún mas fama, no lo hizo con mala intención solo para protegerme y agradezco todos los días por tenerla como amiga.

David que en un principio se mostró feliz con la situación sin embargo ahora estaba muy cambiado, prácticamente se emborrachaba todos los días, se veía como si estuviera sufriendo por algo, tal vez la noticia de ser padre tan joven le está dando duro.

—Me voy, cualquier cosa no dudes en llamarme—dijo Manu, hoy por fin se iba de vacaciones junto a Abi.

—No te preocupes, voy estar bien—le dije con una sonrisa.

—Me angustia no estar cuando salga el comunicado, fue mi culpa—mañana salía en una revista la noticia de mi embarazo, ella se sentía culpable pero fue la mejor idea para calmar a Esteban.

—Ya te dije que no tienes que sentirte así, fue lo mejor—

—Nunca había visto a Esteban tan cabreado que fue lo primero que se me ocurrió—

—Lo sé, yo también tuve miedo, pero ya, vete que te dejará el avión y Abi me odiara mas de lo que ya lo hace—ella negó.

—Abi es muy orgullosa, Poché se comunicó con ella para decirle que no estaba molesta, le dije que se tenía que disculpar contigo pero ya sabes como es—sonreí, por supuesto que la conocía.

—Ya mejor vete—me dio un último abrazo y se marchó. Esteban le había dado vacaciones porque dentro de Poco iniciaríamos  los ensayos para para un concierto aquí en México como parte de una ayuda para una fundación.

Estaba descansando cuando se me antojó un café de Starbucks, me puse de pie cuando escuché que tocaban la puerta. Abrí y me encontré con David demasiado borracho a esta hora.

—¿Qué te pasa?—le recriminé al verlo así—¿Tienes idea de la hora que es para que andes borracho?—entró.

—Necesito la verdad, necesito queme digas si ese hijo realmente es mío—me decía arrastrando las palabras.

—¿De qué mierda hablas?—me enojé—Sabes perfectamente que estoy contigo ¿Quién mas podrías ser el padre del bebé?—

—María José Garzón tal vez—me reí, yo mas que nada hubiera querido que eso pasara.

—Estás loco al pensar eso—me iba a dar la vuelta pero me sujetó con fuerza.

—No lo estoy, esa mujer llegó a decirte que no la buscaras más ¿Y si en algunos de sus encuentros se acostaron? ¿Puede que ella sea la madre?—

—Si así fuera sería la mujer mas feliz del mundo, pero no este hijo es tuyo—me vio sorprendido por mi respuesta.

—¿La sigues amando?—preguntó mas calmado.

—Sí, con cada parte de mi, sigo amando a Poché, ya no lo puedo ocultar mas, ni negar, amo a María José Garzón pero también tengo claro que ella ya no es mía y me tengo que conformar con solo verla de lejos—dio un paso atrás.

—Muy bien,me acabas de dar la mejor noticia—salió del apartamento echando  chispas, no entendí lo que quiso decir.

Poché

Hoy por fin había llegado el día, mi restaurante habría sus puertas, estaba muy nerviosa.

—Tranquila amor—dijo Diana a mi lado, también revelaría mi sorpresa para ella.