La noche era caótica en Desembarco del Rey, las parteras corrían de un lado a otro, la princesa trataba de hacer el menor ruido posible y todos esperaban que toda esa situación acabara pronto.
Un pequeño Aegon, de tres onomásticos, paseaba igual de prepcupado por el pasillo frente a los aposentos de su hermana mayor, cuidando de no ser visto por sus padres y sus tíos. Pedía a los Dioses que no se llevaran a su hermana mayor, no sabía que complicaciones ella podía tener pero no quería que su hermana sufriera. Además de preocupado, el pequeño príncipe Aegon estaba molesto, no podía tolerar el hecho de que todos solo estaban preocupados de que nadie se enterará de lo que estaba sucediento, mientras que a él solo le preocupaba que su hermana saliera viva. Aegon tenía la mirada perdida en la puerta de los aposentos, al mirar al costado de esta se sintió mejor, sabiendo que al parecer no era el único al que le preocupaba la salud y bienestar de su hermana.
Al lado de la puerta estaban Ser Laenor Velaryon y el príncipe Daemon Targaryen, quienes solo murmuraban sobre la situación entre si, cada uno mas ansioso que él otro. Si bien, ambos sabían que lo que estaba sucediendo no era correcto, no podían dejar de preocuparse por la mujer que estaba dando a luz en esos momentos.
Todos esperaron pacientes, el alumbramiento estaba tardando más de lo esperado, Daemom sabía porqué: era la verdadera sangre del dragón la que estaba naciendo. Nacía de dos dragones que siempre estuvieron destinados a arder juntos.
Los sollozos a doloridos de la princesa cesaron y dieron paso al llanto de un recien nacido. Los reyes suspiraron, por fin había acabado, Ser Laenor y Daemon se abrazaron, ambos felices por la llegada del bebé dragón. Aegon, por su parte, no pudo evitar correr hacia su hermana cuando las parteras abierón la puerta de los aposentos de la princesa. Aegon llegó hasta su hermana y suspiro aliviado cuando se percato de que ella estaba bien, de que todo estaba bien.
—Mira, Aegon —las criadas cerrarón las puertas mientras los demás hablaban afuera—. Ella es tu sobrina.
—¿Una niña? —el pequeño platinado arrugó la naríz—. Pense que me darías un sobrino para jugar, hermana.
La platinada solto una pequeña carcajada acariciando los cabellos de su hermanito.
—Lo siento, Aegon. Los Dioses me dieron una bella niña. Te prometo que algún día te dare un sobrino —la princesa descubrió un poco la cara de la recien nacida y se la mostro a Aegon—. La llamaré Aela, en honor a ti y a mi madre.
Aegon miro detenidamente a la bebé, era pequeña, palida y sus mejillas estaban muy rojas. Aegon arrugó un poco la cara, le parecía algo poco agradable de ver, pero el corazón se le hizo pequeñito ante el nombramiento de la bebé.
—Es hermanosa, Nyra.
La platinada beso la frente de su pequeño hermano y volvió a sollozar del dolor.
—Bien, ahora sal, no queremos que la reina te encuentre fuera de tus aposentos, ¿cierto?
El pequeño sonrió negando y se escabulló por los pasadizos secretos hasta llegar a sus aposentos. Corrió feliz fuera de su habitación, para ir a los aposentos de su pequeña hermana Helaena, para contarle la gran noticia, aun que seguramente la pequeña no entendería nada, tan solo tenía un onomástico.
Mientras Aegon corría feliz con su hermanita, en los aposentos de la princesa heredera se desataba nuevamente el caos.
—No pueden quitarmela, es mi hija.
La princesa sollozaba sosteniendo con fuerza a la bebé que también lloraba en sus brazos.
—Rhaenyra, cielo, acordamos que si era una niña ella se iría con Daemon.
El aludido sonrió acercandose a la princesa y a su bebé. Sostuvo a Rhaenyra mientras esta lloraba a mares.
—No puedes irte con ella al Valle, Daemon. No puedes separarme de nuestra hija.
La reina y todos se estremecieron ante las palabras de la princesa, no era para menos, tenían que mantener en secreto que el príncipe Daemon y la princesa heredera ahora eran padres de una pequeña niña.
—Rhaenyra... —habló suave, solo lo hacía con ella. El rey se tensó al ver tal intimidad entre su hermano y su hija—. Teníamos un acuerdo, si era un niño se quedaría contigo y con Laenor, pero es una niña, por su seguridad y la de todos irá al Valle conmigo y con la zorra de bronce de Rhea. Aceptó fingir ser su madre con tal de que no consumemos nuestro matrimonio.
Al príncipe se le hizo un nudo en la garganta al decirle aquello a su amada Rhaenyra. No quería alejar a la bebé de ella, pero si se sabía de que era hija de ambos a Rhaenyra le iría peor como heredera. El príncipe penso que habría sido mucho más fácil si en lugar de una niña hubiera nacido un niño, pero los Dioses no bromeaban y si fue una niña la recibiría con los brazos abiertos.
—Mi niña, podras verla y ella podra saber que es tu hija, pero por el momento tiene que irse al Valle con Daemon.
El rey miraba con pesar a su pequeña niña, no toleraba verla sufrir, pero sus desiciones habían causado todo esto.
—¿Puedo pasar al menos la noche con ella?—todos mirarón con lastima a la princesa, que rogaba no ser separada de su hija.
—El príncipe Daemon se va mañana a primera hora, la bebé puede quedarse con usted esta noche, princesa.
Ambos involucrados y Ser Laenor mirarón con odio a la mano del rey, a quien se le había ocurrido la grandiosa idea de separar a la princesa heredera de su bebé.
Sin más que hacer ahí, la mano del rey se retiro en silencio. El rey aprovecho el despiste de todos y camino hasta quedar junto a su hija y pedirle que le dejara cargar a la pequeña bebé dragón. La princesa acepto gustosa y le dio a su padre la bebé. Este la cargó con total felicidad y sin poder contener sus lagrimas.
—Es identica a mi Aemma, Rhaenyra —el rey soltó un par de lagrimas, mientras su hija se dedicaba a sostener su mano—. Es identica a mi amor.
La reina solo pudo hacerse pequeña en su lugar ante la mención de la reina Aemma. Pronto llegó la mirada de Ser Criston para reconfortarla y luego llegó la mirada del príncipe Daemon para mofarse de ella. Perfectamente equilibrado.
°°°°🐲
Olap jijijiji
Bueno, como aclaración, recuerden que todo esto es ficción. Al momento de escribir la historia me base tanto en los eventos de la serie como en los eventos de los libros (no me he leído ninguno de los libros, pero tomo referencias de pequeños fragmentos que encuentro).
Por obvias razones, las edades estan modificadas y los acontecimientos no sucederán en el tiempo que se supone que son, esto para poder ajustar todo bien para la historia.
Mencionar que como no he leído los libros, puede que para la gente que si los haya leído la historia no les guste, así que si cometo algún error o hay algo que mejorar lo pueden comentar y lo tomaré en cuenta.
Esta es la portada. Cabe aclarar que no es mía 100% ya que utilicé fanarts de pinterets, así que derechos a sus respecticos creadores. Lo único que hice fue unir todo :) jsjsjs
Gracias por leer.
Att: Sof🦋
24/06/2023
ESTÁS LEYENDO
Dragon's Blood I: Pureza de sangre
FanficAela Targaryen, dispuesta a dar su vida por los que ama, una guerrera nata e inteligente, todo lo que la sangre de dragón es. La princesa Aela Targaryen, la verdadera sangre de dragón... Tan bella como la luna y tan peligrosa como la noche, eso era...