Rhaenyra no estaba conforme con la muerte de su hijo, sentía un dolor inmenso que la mataba por dentro cada vez más. Aela, como acto de solidaridad, le recomendó ir ella misma a buscar a Luke prometiendo qué ella se encargaría de evitar que su padre comenzará una guerra innecesaria a este punto. Ahora, la reina llevaba días, quizá hasta una semana sin aparecer y Aela se hacía cargo de todo, incluso de cuidar que su padre no hiciera nada fuera de lugar.
-¡Tenemos que hacer algo! -Daemon golpeó la mesa del salón donde se encontraban todos sus hijas y Rhaenys-. Rhaenyra se ha dado a la fuga y...
-¡Esta buscando a Luke! -le recordó Aela-. Volverá pronto.
Daemon observó a Rhaenys con una mirada asesina, recordando la conversación que habían tenido hace unos momentos en los que la culpo de la muerte de Luke. Aelanla culpaba de no haber matado a Aegon y a los verdes cuando pudo, pero no sería capaz de culparla a ella por la muerte de su hermano. Ni siquiera Rhaenyra lo hacía.
-Debemos atacar ahora, antes de...
-¡¿Antes de qué?! -lo paro Aela qué era la única que se atrevía a gritarle pues Daemon jamás se atrevería a hacerle daño-. No tenemos un ejército, ¿no lo vez?
-¡Entonces déjame volar a Harrenhal! -le pidió-. Me tienes cautivo aquí como si
-¡No eres un prisionero! ¡Eres el maldito Rey Consorte, compórtate como tal! -Aela parecía querer llorar, estaba demasiado estresada últimamente-. Ve a Harrenhal si quieres, no me importa, pero mamá preferiría que esperaras su regreso y despidieramos a Luke.
Rhaena comenzó a llorar en silencio, esto la sobrepasaba demasiado. Baela la sostuvo en sus brazos para evitar que cayera. Aela asesinó a su padre con la mirada, si él no hubiera empezado a discutir por eso quizá no tendría que haber mencionado la despedida de Luke.
-¿Podrías esperar a que ella regrese? Por favor.
Daemon asintió molesto y salió del salón no sin antes volver a fulminar a Rhaenys con la mirada. Aela por fin fue capaz de sentarse y descansar un poco, habían sido días completamente horribles. Ni siquiera tenía el valor de observar a Rhaena llorar, no lo soportaría. Rhaenys se acercó y tomó asiento junto a ella, desde que había regresado no habían hablado mucho, Aela la evitaba el mayor parte del tiempo pues a pesar de que no la culpaba por la muerte de Luke, aun le guardaba mucho rencor.
-Haces un gran trabajo manteniendo a raya a los hombres, cariño -le concedió su abuela-. Me siento muy orgu...
-No hagamos esto, por favor -le suplicó Aela, sentía que su cabeza estaba a punto de explotar-. No hemos hablado en días, no necesito que ahora tú... me hagas esto.
-Soy una tía orgullosa -le dijo Rhaneys de igual forma-. Tú me llamas abuela, pero en realidad soy tú...
-Tía. Lo sé. -dijo Aela con una pequeña sonrisa-. Mis hermanos y hermanas te llaman abuela, yo no tengo una abuela en realidad así que... bueno, quería tener una al igual que ellos.
Rhaenys sonrió satisfecha al ver que había conseguido suavizar un poco a Aela. ¿Cómo lo había logrado? Fácil, la debilidad de Aela era toda su familia.
-Entonces soy una abuela orgullosa -Rhaenys acarició la mano del Aela y esta le devolvió el gesto-. Debo ser la abuela de Rhaena en estos momentos, compermiso.
°°°°🐲
-¿Sigue en sus aposentos?
El guardia asintió haciendo una reverencia a la princesa. Aela se planteo si entrar o no, pero no quería volver a discutir con su padre, ya había hecho demasiado. Se retiro a sus aposentos y se dedico a ver por la ventana el cielo, seguramente Luke ya estaría descansando. Miro hacia el mar, recordando lo bueno que era Luke con los barcos y las muchas veces que intento enseñarle a Aela navegar uno, nunca pudo lograrlo y Luke siempre le repetía: te enseñaré hasta que lo logres, hermana. Ahora ya nunca podría hacerlo...
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Dragon's Blood I: Pureza de sangre
FanfictionAela Targaryen, dispuesta a dar su vida por los que ama, una guerrera nata e inteligente, todo lo que la sangre de dragón es. La princesa Aela Targaryen, la verdadera sangre de dragón... Tan bella como la luna y tan peligrosa como la noche, eso era...