—Nyra—llamó su pequeño hermano—, ¿por qué Aela no tiene alas como los dragones?
—Porqué Aela es una bebé, Aegón, no un dragón.
La platinada acarició los cabellos del pequeño Aegon mientras reía por las ocurrencias de su hermanito.
—Pero madre me dijo que Aela era un dragón y que debía tener cuidado con ella.
La platinada se paralizó por completo al escuchar aquello. Su hija no era un dragón del cual tener miedo, solo era una bebé.
—¿Por qué dices eso, Aegon?
La princesa pedía en sus adentros que solo fueran ocurrencias de se pequeño hermano y que no fuera lo que estaba pensando, Alicent no sería capaz de decir algo así.
—No lo se, Nyra. Confuso—Murmuró el pequeño como pudo—. Madre llorar mucho y repetir que Aela y tu nos matarían cuando tomar trono. Aemond no dejaba de llorar, es molesto, Nyra. Aela me cae mejor, no llora como Aemond.
La princesa abrazó a su hermano con fuerza, soltando unas cuentas lagrimas en el proceso.
—Aegon, yo nunca te lastimaría. ¿Lo sabes cierto?—lo tomó de los hombros para verlo a la cara—. Eres mi hermanito dulce y perfecto.
—Tu nunca lastimarme, Nyra—afirmó el pequeño príncipe abrazandose a su hermana mayor—. Ojalá Aemond fuera como tú.
—¿Qué tiene de malo Aemond? Veo que no te agrada—Y a ella tampoco le agraba mucho a decir verdad, aunque solo fuera un bebé con el que lastimosamente no había convivido ni un poco.
—Hace que mamá se enfade conmigo—el pequeño hizó un puchero cruzandose de brazos.
—¿Cómo Aemond haría tal cosa? Es solo un bebé al igual que Aela.
—Cada vez que me acerco a su cuna llora y mamá me reprende por hacerlo llorar. Por eso me agrada más Aela, ella si me quiere.
Rhaenyra sentía lastima por su hermanito, por no poder ayudarlo más. También sentía pena por no poder conocer a Aemond como lo había hecho con Helaena y Aegon. Aemond sería un total desconocido para Rhaenyra el resto de su vida.
–Por su puesto que Aela te quiere –la princesa sentó a su hermanito en su regazo para ver juntos a Aela–. Te aseguro que seras su tío favorito cuando ella crezca.
–Lo seré, Nyra.
Sentenció Aegon seguro de eso. Ansiaba conocer a Aela de mayor, seguro sería igual de admirable que su hermana mayor.
°°°°🐲
—Prometeme que cuidaras mucho de nuestra pequeña, Daemon.
El mayor abrazó a la princesa y beso su frente, un gesto tan íntimo para ellos que parecería extraño para cualquiera. Lo que también era extraño era su relación, no estaban juntos y no podían estarlo, pero tenían una hija y eso irónicamente los unía.
–Lo haré –dijó con toda confianza el príncipe–. ¿Ya has pensado en un nombre para la pequeña dragoncita?
Rhaenyra sonrió ante el apodo tan lindo que el príncipe le había dado a su hija.
–Aela –Dijó orgullosa–. Por mi madre Aemma, por tu madre Alyssa y por mi hermano Aegon.
–Es precioso, Rhaenyra –el príncipe volvió a besar su frente–. Aun que no se si quiero que mi hija sea nombrada en honor a un Hightower.
–Pues tendras que aceptarlo, Aegon es mi hermano.
Daemon sonrió ante la imposición de Rhaenyra, extrañamente ella amaba demasiado a Aegon, tanto como quizás hubiera amado a Baelon. La abrazó por última vez antes de tomar a Aela en sus brazos y atarla a su pecho.
–No quiero separarte de nuestra hija, –se sentía extraño al decirlo, pero al mismo tiempo estaba demasiado orgulloso de que Rhaenyra y él fueran padres–, pero creo que no tenemos otra opción.
–Te voy a extrañar, mi dragoncita, –la princesa heredera se acerco a la bebé para darle un beso en la frente y mirarla por última vez–. Esperó que tu huevo eclosione pronto para que vengas en el y me visites seguido. –poso su mirada en Daemon y le sonrió–. Te Extrañare también.
La princesa heredera sonrió cuando vió la pequeña sonrisa que se formaba en el rostro se la pequeña al mismo tiempo que Daemon se sonrojaba. No pudo evitar volver a soltar unas cuentas lagrimas y Damon volvió a abrazarla. Unos golpes a la puerta arruinarón un poco el momento, haciendo que Rhaenyra se recompomga en seguida.
–Mi princesa, –la críada hizo una reverencia–, su hermano, el príncipe Aegon, pide verla un momento.
Rhaenyra asintió, dando aprobación de dejar pasar a su hermanito. Quien entró corriendo a los brazos de Rhaenyra.
–Nyra, no dejes que Aela se vaya –el llanto de Aegon rompía el corazón de Rhaenyra, esta solo pudo abrazarlo más –. Si se queda prometo que yo mismo la cuidaré. No dejes que se vaya.
–Aegon... –murmuró la princesa, conmovida por el actuar de su hermanito–, Aela nos visitará seguido, lo prometo.
Aegon miró con tristeza a su hermana, abrazandola por el cuello mientras se deshacía en llantos. El príncipe Daemon miro a ambos platinados con cansancio, ambos lloraban y no sabía que hacer para calmarlos, simplemente los abrazo y estuvo con ellos hasta que se tranquilizarón.
–Aela y yo los visitaremos pronto, tranquilos.
Sin hacer más larga la despedida, Daemon beso la frente se Rhaenyra y despeino los cabellos del pequeño Aegon, algo que hizo por impulso y al darse cuenta aparto rápido la mano limpiandosela en el proceso. Los miró por última vez y salió de los aposentos, directo al patio exterior dónde Caraxes ya lo esperaba. Subió en el dragón rojo y voló, sin mirar atrás.
°°°°🐲
Rhaenyra estaba hecha pedazos, su niña se había marchado y el hombre al que amaba también. Estaba sola, sin amigos, sin aliados, sola en un mundo donde todos la menospreciaban.
Aegon acariciaba los cabellos de su hermana mayor, mientras esta estaba recostada en su cama. El pequeño no entendía muy bien todo lo que pasaba, pero sabía que su hermana no estaba bien y él tenía que protegerla de cualquiera que quisiera hacerle daño.
–Nyra –susurró acercandose al oído de la mayor para hablar bajito sin ser escuchado por nadie más, a pesar de estar solos. El príncipe era muy reservado con sus muestras de afecto–. No estes triste, Aela vendra pronto y podremos cantarle y contarle historias, como lo haces conmigo.
Rhaenyra abrazó a su hermanito, mucho más fuerte. Ella lo amaba y él la amaba, no compartían por completo la misma sangre, pero sabían que eso no importaba porque se amaban. Ella lo cuidaría y el la cuidaría, un pacto nunca antes escrito.
°°°°🐲
Para no dejarlos muy perdidos con las edades:
•Rhaenyra: no hay edad exacta, pero piensen que ya tiene la edad suficiente como para tener un bebé jsjsjs.
•Aegon: tiene exactamente tres años. Su día del nombre es exactamente 20 días antes del nacimiento de Aela.
•Halaena: tiene un año. Su día del nombre es dos lunas luego del nacimiento de Aela, entonces esta próxima a cumplir dos años.
•Aemond: este cuenta con apenas unas cuentas lunas más que Aela.
Att: Sof🦋
26/06/2023
°°°°
Estoy editando algunas cuentas cosas porque no me gustan jajajaka no se preocupen, no estoy cambiando nada.
Att: Sof🦋
14/06/2024
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Dragon's Blood I: Pureza de sangre
FanficAela Targaryen, dispuesta a dar su vida por los que ama, una guerrera nata e inteligente, todo lo que la sangre de dragón es. La princesa Aela Targaryen, la verdadera sangre de dragón... Tan bella como la luna y tan peligrosa como la noche, eso era...