lo repetiré, una y otra vez

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Remus Lupin

—Remus —oigo mi nombre a mi espalda, lo pronuncia con suavidad y calma, pero sé que esta tensa— No creas que no lo noto... sé que te estas comportando extraño, no hace falta que te conozca de años para darme cuenta... Puedes decirme que pasa —se acerca por detrás y pone una mano en mi brazo, parando el movimiento enfurecido que hago al lavar los platos, me tenso ante su tacto por encima de mi jersey.

—Pienso en-demasiado... —hablo cortado, quiero decir tanto, pero hay una gran impotencia dentro de mí que me reprime.

—Debe de ser por la luna llena ¿Suele pasarte eso?

—No. No hasta que llegaste tu...

La oigo tragar en seco, su mano se aparta, pero no me inmuto, aunque anhele tenerla tocándome como si me sostuviera permanezco encorvado sobre el fregadero— ¿Soy el problema? —su voz se endurece un poco.

—No estoy seguro, solo sé que odio que te miren los demás, quien sea. Quien ponga sus ojos en ti y sea demasiado amable o demasiado despreciable, se gana mi odio —no puedo manejar el tono irregular de mi voz, sube y baja.

—¿Esos son celos? —pregunta, pero lo duda.

—No sé, estoy muy confundido, nunca había sentido tanto... Por lo general solo me irrito un poco, pero esta vez no puedo controlarme, tengo demasiado...

—¿Quieres que lo profundicemos más?

—No lo sé ¿Te importa?

—Tú me importas.

Me giro, la observo, tiene el cabello atado en una cola, pero permanece tan revuelto como siempre— Quiero que me digas la verdad ¿sí?

—Okey —asiente sin dudarlo, nuestros ojos se conectan y tengo que hacer un esfuerzo enorme para concentrarme en lo que voy a decir.

—¿Piensas que soy lo que mereces? Incluyendo a todo lo malo, mis celos que parecen irradiar más intensidad que hace algunos días atrás —continúo hablando antes de recibir su respuesta— Veo cómo te miran y no me gusta en lo más mínimo, por alguna razón no puedo controlar nada cuando esos pensamientos vienen a mi mente.

Su cabeza permanece inclinada hacia arriba, con sus ojos en mí, sonríe con ternura— Pienso, que incluso eres más de lo que merezco —suelto una burlona risa, no creyendo— No me lo tomo a broma, eres todo lo que quise, no sé porque lo dudas ahora, teniendo en cuenta que lo hablamos, pero tampoco tengo problema en recordártelo. Eres... eres todo para mí, te convertiste en lo que necesito, quiero tenerte, quererte y disfrutarte, quiero que si es necesario lloremos, pero juntos, no separados. Remus —mi nombre sonó como el canto más angelical que había escuchado— Te amo, te amo por todo lo que haces, con tus celos, con los míos, con miedos incluso, y amo a Teddy... Ahora no puedes separarme de él —suelta como un chiste, pero parece una realidad.

Siento lagrimas nublar mi vista, no soporto un minuto más sin tener su aroma inundándome los pulmones, sin sentir su cuerpo junto al mío y sin adorarla. Entonces la acerco a mí, abrazándola, y ella me devuelve el gesto.

—Tus palabras son hermosas, amor mío. Yo te amo con la misma intensidad, no sé como estar a la altura de lo que acabas de decirme —la aprieto contra mí, ahogando un gemido de disfrute en su hombro. — Pero acabas de dejarme más aliviado.

—Me alegra que sea así —susurra tan cerca de mi oreja que sufro un sacudón.

—Y la que no se puede escapar de Teddy eres tú, él no lo permitiría, te adora —sonrío. — Prométeme algo... —la alejo un poco para poder mirar su iris marrones, ella asiente para que continúe hablando— Vas a decirme si alguien se te acerca lo suficiente... Vas a contarme cuando quien sea te haga sentir incómoda, sobre todo. Solo te pido eso, saberlo ¿Por favor? —pido, con la mirada inquieta que no permanece en ningún lugar de su rostro y a la vez en todos.

—Solo si tú lo prometes también, cariño.

Suspiro aliviado, conmovido y feliz de su respuesta— Entonces es una promesa.

Su tranquila voz me deja más relajado, aliviado, amado. Aurora me ama, acaba de decirlo, no tengo porque dudar de lo real que fueron sus palabras, de lo fuerte que me llegaron al pecho, estallando contra mí, siento las consecuencias de sentirse amado, es hasta adormecedor de algún modo.

:🦆
yo lo intente, quería que se pelearan, que se gritaran no se, pero no pude, se me hizo difícil sabiendo como son, Aurora no se puede ir sin resolver las cosas con Remus, los dos son de hablar no de pelear

eat me; remus lupin (✔︎)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora