⇝Epílogo

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La familia Aimar-Mirabelli no se quedó quieta un segundo luego de conformarse como una unidad. No sabían lo que les iba a deparar los próximos años, pero si estaban más que seguros que todo lo que la vida les ponga por delante, iban a poder afrontarlo juntos.

Una vez recien llegados de su luna de miel, su vida sorpresivamente volvió a lo normal. Fue ahí cuando se dieron cuenta que un casamiento, aunque hermoso, no modifico nada de su vida, porque ellos ya eran así, sin necesidad de nada de por medio.

Roma siguió trabajando como representante legal de la AFA y Pablo como entrenador. Sus hijos seguian viviendo con ellos y yendo al colegio, menos Agustin, quien se habia concentrado más en su carrera futbolistica y el don que había heredado de su padre. Ahora jugando en Independiente, tenía asegurado la hinchada que lo iba a acompañar siempre.

⇝6 meses después...

Ya en epoca de vacaciones escolares, fue ese diciembre en el que decidieron llevar a sus hijos a la cabaña que Pablo le había regalado a Roma

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Ya en epoca de vacaciones escolares, fue ese diciembre en el que decidieron llevar a sus hijos a la cabaña que Pablo le había regalado a Roma. Necesitaba un poco de trabajo, Pablo tenia ideas de como modificarla, asi que se tomaron un mes para estar allá y trabajar todos juntos y luego volver para celebrar las fiestas en familia.

Sin darse cuenta, se había convertido en las primeras vacaciones oficialmente de familia. Para Roma, rozaba lo inusual, siempre había sido de familia chica, nunca había experimentado lo que era irse de vacaciones con los numerosos Aimar. 

Pero ahí se encontraba, cortando madera afuera mientras las dos más grandes se encargaban de hacer la comida.

Pablo y Agustin arreglaban algunos tablones que habían quedado sueltos mientras hablaban del pequeño cuarto que querían agregar a un costado de la casa para guardar cosas.

Era Eva, la que se encargó de plantar flores y suculentas que decoranban la entrada de la cabaña familiar, asegurandose de que todo quede en su lugar.

⇝1 año después...

Damiano Aimar - 3 kilos 200 gramos - Rio Cuarto, Cordoba

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Damiano Aimar - 3 kilos 200 gramos - Rio Cuarto, Cordoba

No fue algo que esperaban, pero tampoco era completamente ajeno a ellos. Sabian que podía ocurrir, pero dejaron que todo fluya y si se daba, se daba.

CREO - Pablo AimarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora