𝗔𝗻𝘁𝗶-𝗛𝗲𝗿𝗼 || Cobra Kai [ REESCRIBIENDO]

37 | The End Is Near

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Capítulo Treinta y siete.
El Final Está Cerca

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El sonido de las gotas de lluvia chocando contra las ventanas llenaban el silencio de la habitación cuando Mike entró nuevamente en ella, el hombre acababa de recostar a Jackie en su cama después que la niña interrumpiera la conversación que los dos adultos mantenian.

Isabella se mantenía sentada en la orilla de la cama con sus codos sobre las rodillas y su cabeza escondida entre sus manos. Mike sabía lo que pensaba, sabía que estaba intentan hallar otra solución y para ser sinceros el también deseaba que hubiera otra, pero aunque lo odiara sabía que era esa  la única manera y ella también.

Isabella levantó su cabeza cuando sintió la presencia de Mike frente a ella, encontrandose con la mano extendida del hombre en forma de una invitación silenciosa, una pequeña sonrisa nolstalgica se formó en los labios de la chica a la vez que conectaba sus manos con las de él.

La pareja comenzó un pequeño baile utilizando el sonido de la lluvia como música de fondo; Mike mantenía a Bella cerca intentando poder memorizar cada centimetro de ella, como si temiera que si algo malo pasara todo desvanecería.

- Mike, yo... - Intentó hablar Isabella.

- Lo sé - La cortó Mike sin detener su baile - Yo también - Respondió el hombre recargando su frente en la de ella concetando sus miradas.

- ¿Hasta el fin del mundo? - Le preguntó la castaña con lágrimas en sus ojos deseando que ese momento durara para siempre.

- Hasta el fin del mundo -  Le respondió Mike acariciando con el pulgar la mejilla de su mujer limpiando las lagrimas que se habían salido.

El recuerdo se desvanecio en cuanto Mike llegó a su destino, el hombre tomó una respiración profunda y se incó frente a la gran  lápida depositando un nuevo ramo de flores en ella; las grandes letras escritas en la piedra se sentían como miles de cuchillos enterradose en su pecho:

R.I.P Isabella Barnes.

No había día que Mike no fuera a ese lugar, ni uno solo y diferencia de lo que Jackie y Diego recordaran, el había estado ahí cuando la lápida fue puesta.

Había estado cuando Diego se tiro sobre esta rogando que su madre regresara, cuando Victoria apenas era conciente de lo que sucedía, y sobre todo, cuando Jackie había escapado hacía los columpios sin entender nada de lo que pasaba, nunca los había perdido de vista, no se hubiera perdona si lo hubiera hecho, siempre se había asegurado que estuvieran a salvo y ellos no lo sabían. Ellos siempre lo recordarían como el padre que los abandono cuando más lo necesitaban y eso le dolía, no iba a mentir, pero esa  había sido la única manera para que tuvieran una vida "tranquila".