Tu amor es mi nuevo tesoro (Fafnir × Oc)

Capítulo 34

Después de que el timbre sonara y el mayor sintiera hervir su sangre por el enojo se levantó él mismo para abrir la puerta, al hacerlo se encontró con un repartidor, al parecer le había llegado un paquete a la peliroja, por lo que el dragón solamente la llamó para que firmara y recibiera.

La caja no era muy grande, por lo que al ingresar de nuevo al departamento y sentarse en el sofá la puso sobre sus piernas mirando el remitente.

—¿Que es eso?— preguntó el azabache estando de pie frente a la chica.

—Al parecer es de mi abuela.. tiene una nota que dice "estaba revisando algunas cajas y encontré esto, espero que te guste" ¿cajas? Quizá hizo alguna limpieza profunda..

La chica abrió la caja encontrándose con varios artículos dentro, la gran mayoría eran cosas de su infancia, un par de juguetes de bebé, uno de sus trajecitos que usaba a los 2 meses y una fotografía, misma en la que salía ella de aproximadamente 2 años con una mujer de cabello rojo y ojos verdes, a su lado un señor de cabello rubio y ojos azules.

—Creí que no vería está foto de nuevo, creí que la había perdido cuando me mudé..

La chica sonreía con nostalgia mirando las cosas mientras el azabache se había sentado a su lado, mirando las cosas con detenimiento, los jueguetes estaban un poco mordidas, el traje era de color azul claro y se veía ligeramente desgastado, finalmente la foto lo hizo entender un poco.

—¿Son tus padres?— preguntó señalando la fotografía.

—Sí, ellos dos, obviamente la bebé soy yo.— respondió la joven dándole la foto para que pudiera verla mejor.

El mayor sostuvo la pequeña imagen mirándola con cuidado, el cabello de ambas era idéntico, solo que ____ solía tenerlo suelto la mayor parte del tiempo, y era cabello largo, el de la mujer era más corto y lo tenía sujeto en una coleta baja, por otro lado el señor que las abrazaba a ambas se veía diferente por el cabello, pero sus ojos eran idénticos a los de la menor, un azul claro y suave que resaltaba muchísimo más por su cabello.

—¿Haz pensado visitarlos alguna vez?— preguntó Fafnir casi sin pensar.

—Me encantaría, pero perdí la oportunidad hace mucho, ahora mismo solo podría ir a ver a mi abuela y quizá pasar unos minutos con ellos solo para saludar.

El dragón no había entendido del todo sus palabras, por lo que se quedó mirándola un momento, la peliroja al notar esto tomó de nuevo la imagen para mirarla con una sonrisa un poco más.. ¿dolida?

—Ellos fallecieron en un accidente hace 5 años, había quedado de verme con ellos pero me surgió una junta urgente, no pude cancelarla y se los hice saber cuándo venían de camino, pude escuchar el choque antes de que la llamada terminara, la junta se canceló después de eso por algo que no recuerdo.. me fui corriendo a buscarlos pero al parecer murieron de inmediato..

Los ojos del dragón miraban con bastante confusión a la chica, estaba hablando de algo bastante doloroso sin derramar una lágrima, sin que su voz se quebrara y sin negarse a decirle el más mínimo detalle, se escuchaba tan indefensa al hablar, pero su rostro y su postura no habían cambiado pareciendo incluso más dura que antes, no entendía como podía hablar de algo así tan fácilmente frente a él, mientras que por su parte él tardo en decidir contarle una fracción de su pasado.

—Si quieres detenerte no es necesario que continúes por mí.— mencionó el dragón en voz baja.

La chica negó suavemente con la cabeza con los ojos cerrados antes de suspirar y abrirlos de nuevo, pero ahora para mirar al contrario.