¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Seguirás usando la máscara?— Cuestionó el demonio radio mirando a Marionett.
—Si, prefiero prevenir a tener que arrepentirme después...— Comento acomodando la dichosa máscara y su gabardina.
—Si tu dices.— Hizo una pausa para sonreír aun de una manera sincera.— Aunque de todos modos tendrás que quitartela~....— su sonrisa se transformó en una más coqueta.
—Bien, Habibi.—
Ambos siguieron caminando sin más que decir y el simple silencio era suficiente en esos momentos de compañía mutua.
Estaban ambos bien después de todo y no sentían siquiera la necesidad de mirarse o hablar respecto a un tema.
Eran simplemente ellos y el silencio de las calles.
Sin duda... un momento tranquilo para ambos.
Llegaron al hotel sin pensar que alguien los estuviese esperando en la recepción.
—¡Pino!— Charlie miro primero pasar por la puerta al más alto para luego seguido entrar otra sombra detrás.—¿Alastor? ¿Porqué están los dos juntos...?— Cuestionó mirando al par.
—Nos encontramos en el camino de regreso... ¿Sucede algo malo... al respecto?— Cuestionó sintiendo las intenciones de Charlie. Su aroma la delataba.
—¡Claro que no! Bueno... me gustaría hablar.— Dijo mirando nerviosa al par.
—¿Con los dos? Por que yo no tengo nada que hablar contigo.— La sonrisa de antes, la sonrisa sincera y divertida se termino por convertirse en una forzada y demostrando su desagradó al estar ahí.— Es tarde.—
—Lo se, tenía que hablar principalmente con Pino, pero... como estas aquí Al, me gustaría poder hablar con ambos.— Pidió Charlie caminando un par de pasos ante el par.
—No gracias.— Dijo Alastor cruzándose de brazos y comenzando a ponerse impaciente, quería irse de ese lugar en ese mismo instante.
—Habla solo conmigo Charlie, deja que Alastor vaya a descansar... ya es tarde.— Pidió poniendo una de sus manos sobre el hombro de Alastor y ganarse una mirada por parte del pelirrojo.
—Yo... quisiera arreglar las cosas con los dos.— Dijo juntando sus manos pidiendo de favor que la escuchasen.— Por favor.—
—Alastor...— Llamo a lo que el contrario solo se cerró más y pensó por unos momentos.— Solo será un par de minutos y luego podrás ir a descansar...— Alastor pareció pensarlo.
—30 minutos.— Sentenció a la vez que hacia su bastón desaparecer y soltar un suspiro cansado.
—¡Que bueno que podamos hablar!— Charlie se alegro y tomó de las manos a Marionett saltando de la alegría, Alastor volteo a verla de reojo.