¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Papi... ¿Porqué no salimos más fuera de nuestro pentagrama...?- Cuestionó inocentemente la niña a la figura de Alastor que se encontraba cocinando.
-... Porque tenemos que cuidarnos, hay muchos males allí fuera.- Dijo sin apartar la mirada de la comida.
-¿Qué tipo de males...?- Cuestionó curiosa a Alastor.
-Muchos males... linda, estoy cocinando, ¿Vas a llamar a tu padre...?- Pidió Alastor a la pequeña.
-¡Claro! ¡Traeré a papá!- Rápidamente se fue corriendo de la cocina hacia el exterior de la casa dejando solo a Alastor.
Más, Alastor apago la estufa y se sentó en una de las sillas más próximas y se sujeto la frente tratando de pensar en cosas opuestas al hecho de que su hija ya cuestionaba todo.
-Lo último que quiero es que todo termine mal.- Dijo para si mismo.
Pero el clima y los colores cálidos cambiaron de golpe y todo se torno en un hambiente rojo y el aura de peligro.
Posteriormente escucho un grito fuerte fuera y rápidamente salió de la casa, sombras tenían sujeta a su hija, y Marionett no se encontraba por ningún lado.
Rápidamente se precipitó a atacar a las sombras y tratar de recuperar a su hija, pero todo lo que hacía parecía ser envano y no lograba nada.
Lentamente la desesperación y el miedo se apoderó de él y comenzó a pelear de manera más brusca tratando de recuperar a su hija a como de lugar, pero cada vez era más difícil.
Se la llevaron hasta lo profundo de un bosque y sin más...
-¡¡Papi!!- Grito la niña con miedo mientras sus extremidades eran sostenidas por cada una de las sombras, y comenzaron a tirar fuerte.
Alastor entro en desesperación y pánico, a lo que trato de acercarse lo más rápido que pudo a las sombras, pero más y más se interponian en su camino.
Hasta que en un instante en una mirada rápida observo como su hija fue desmembrada y caía muerta en diferentes pedazos en el suelo.
Alastor al momento entró en shock y destruyó todo a su alrededor, pero luego las sombras lo sostuvieron firmemente a la vez que lo obligaban a ver hacia otro lado.
Lo obligaron a subir la mirada y encarar frente a frente a Marionett.
-Mar...- Soltó en un suspiro aun en estado de shock, trato de soltarse de los agarres pero parecía imposible.
-¿Porqué nunca me dijiste que eras tu el que me mato?- Cuestionó molesto, Marionett.
-¿Qué...?- Cuestionó confundido y aturdido.
-¡¡Tu me mataste, yo quería vivir!! ¿¡Porque me mataste...?!- Exigió respuesta sosteniendo los hombros de Alastor con brusquedad y mucha fuerza.