Rhaenyra Targaryen suelta un suspiro mientras juega con la bola de cristal que representa su posición en el consejo, la heredera al trono de hierro. Sabe que su reclamo al trono será desafiado de manera directa en el momento que su padre muera, por lo que sabía que debía hacer algo.
No hace mucho se empezó a dar cuenta de las miradas que su medio-hermano Aegon le daba a su primogénita, Visenya. Sabe que debe usar eso a su favor y acercarse más a su hermano para evitar que el participe en una posible usurpación del trono.
—...y con eso la reunión finaliza —termina de hablar Lord Lyonel.
Rhaenyra es la primera en levantarse y hace una seña a los demás miembros para que sigan sentados.
—Deseo hablar —los miembros del consejo asienten ante las palabras de la princesa quien mira a la reina—He sentido la... lucha entre nuestras familias últimamente, mi Reina. Y por cualquier ofensa dada por la mía, pido disculpas. Pero somos una casa. Y mucho antes de eso, éramos amigas.
El silencio reina en la sala del consejo.
Aegon junto a su sobrina Visenya se miran asombrados por las palabras, ambos están escondidos entre las paredes que da al balcón del lugar y la gran ventana.
—Mi hija Visenya heredará el Trono de Hierro después de mí. Propongo que la prometamos con su hijo mayor, Aegon. Aliarnos de una vez por todas. Que gobiernen juntos.
—Una propuesta muy exquisita —apoya el Rey a su hija, mira a su esposa esperando una respuesta.
—Además, si Syrax trae otra nidada de huevos, su hijo Aemond podrá elegir entre ellos como un símbolo de buena voluntad.
Alicent se fija como los pechos de Rhaenyra empiezan a mancharse por un líquido, pero antes que pueda decir algo para humillarla se escucha un sonido.
Aegon se había lanzado por la ventana hacia dentro de la habitación con una gran sonrisa en su rostro.
—¡Acepto! —grita —Me casaré con Visenya. Gracias hermana.
En ese momento Rhaenyra nota que se estaba machando el vestido por lo que se sienta de manera disimulada para taparse.
Visenya sale con cuidado de su escondite y mira asombrada a su madre, pensó que la comprometerían con Jacaerys.
Viserys sonríe ante la presencia de su nieta favorita.
—¿Qué opinas, Visenya?
Todos los ojos están sobre la pequeña princesa que se quiere ocultar por tantas miradas.
Alicent sabe que Visenya es débil, nunca aceptaría esa alianza. La princesa no es nada comparada a su ancestro con quien comparte nombre, no es una guerrera, pero no porque no se le dé bien usar la espada, sino porque es muy dulce como para dañar a alguien, no es una política porque es muy sensible y rompe en llanto cuando discuten con ella. Incluso su dragona es débil y mimada, ingiere agua que debe ser cambiada todos los días y de las mejores carnes, no le gusta cargar muchas cosas en su lomo ni estar cerca de dragones que desconoce.
Ni hablar de su físico, tan pequeña que moriría en el parto si es que llega a finalizarlo.
—Creo que sería una buena opción si Aegon cambia algunas costumbres —responde mirando el suelo.
—¿Qué insinúas? —se molesta Alicent.
—Cambiaré mis costumbres, Visenya, lo haré por ti. Beberé vino solo en festividades y frecuentaré menos la calle de la seda, sé que te molesta eso.
—¿Y te disculparas con las sirvientas para luego no molestarlas?
—Lo haré.
Visenya asiente con una sonrisa, y Alicent se da cuenta que quizás la niña no es tan débil, es algo manipuladora con su hijo.
—Veo que ninguno de los dos tiene problemas con casarse con el otro —resume el Rey —Hablo por mí y por mi esposa de que aceptamos está hermosa propuesta.
Aegon abraza por los hombros a su sobrina quien se queda algo dura por el contacto físico.
La sonrisa en el rostro del príncipe es algo que no se puede ocultar, cumpliría su sueño de ser un esposo trofeo.
Aunque deberá pasar más horas entrenando para proteger a su amada y futuros hijos.
Visenya se separa del abrazo para caminar por los pasillos con Aegon siguiéndola de cerca, cuando la alcanza entrelaza sus manos.
—¿A dónde vamos, mi querida prometida?
Se sonroja por el nuevo nombre, ve como algunos miembros de la corte los miran curiosos.
—Le voy a avisar a Aemond que pronto podrá elegir un huevo de dragón.
—Tan amable que eres, pero mi hermano puede esperar.
—¿Esperar?
—Te quiero mostrar algo muy divertido.
Visenya duda un poco, pero asiente dejándose guiar por el mayor. Se adentran a las cocinas y Aegon empieza a agarrar unas copas y varios vinos.
—No me gusta el vino.
—Probaras un poco, solo por diversión.
Le tiende una copa con muy poco vino, más que nada para disgustar. Lo saborea un poco y deja el resto del líquido a un lado.
—No me gusto. Es muy dulce, prefiero el jugo de naranja.
Aegon agarro un vaso y le sirvió jugo de naranja mientras él bebía un poco de vino.
—No deberías estar bebiendo.
—Es para celebrar nuestro compromiso, será mi única copa.
Visenya no le creyó, pero se llevó una sorpresa al notar como luego empezó a tomar jugo de naranjas junto a ella.
<3
¿Segunda parte?
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One shots de ASOIAF (Pedidos abiertos)
FanfictionLo que dice el título. Shots de GOT y HOTD