Narra Yeonjun:
-¿Por qué estás jodiéndome de esta forma?- preguntó Yeonjun cerrando la puerta tras él sin preocuparse del escándalo.
-¿Perdón? ¿Jodiéndote?- levantó la viste de la pantalla del ordenador y lo miró serio- Lo siento, pero no tengo tiempo de estar jodiéndote, tal vez tampoco tenga tiempo para esta conversación.
Él se cruzó de brazos mientras miraba a su hermano. No debería sorprenderle que lo hubiera hecho, después de todo, Soobin siempre estaba buscando algo con que molestarlo.
-Sabes de que te estoy hablando, Soobin, acabo de encontrar esto sobre mi escritorio- bramó tirando el papel doblado sobre el escritorio de su hermano quien solo reaccionó mirando su reloj.
-¿Estas llegando justo ahora? Porque mandé esto a primera hora de la mañana- preguntó torciendo el gesto.
-¿Qué diablos importa a la hora que llegué? ¿Vas a decirme por qué vas a despedir a T/n?
Soobin no tenía una maldita idea de como le enfurecía que hiciera aquello, o tal vez si lo sabía y por eso intentaba explotar.
-Yeonjun, vamos por puntos- dijo abandonando por completo el ordenador e indicándole que se sentara, claro que él no lo hizo- ¡Como quieras! Lo primero es que sabes porque la despido, ustedes dos están violando una regla de no relaciones amorosas entre empleados. Es una norma muy vieja así que me niego a creer que no pensaste en ello.
¡Maldición! Si era una regla muy vieja, una que estaba ahí desde que uno de los grandes jefes de departamento, casado, se había acostado con una empleada y ambos habían ocasionado un escándalo que le había salido muy caro a la empresa. Recordaba la historia porque su padre se la había contado alguna vez, pero en aquella ocasión no lo había tenido pendiente.
-Segundo, no necesito notificarte cuando voy a despedir a un empleado, pero como eres familia y T/n es tu novia, decidí hacerte esa concesión, pero es evidente que tal vez solo debí enviarle su carta de despido en lugar de dejarlo en tus manos, porque yo soy el jefe.
-Yo también soy un Choi.
-Y estoy seguro de que das gracias a Dios por ello cada día.
Yeonjun ignoró el tono venenoso en sus palabras, sin duda alguna otro intento de hacerlo explotar.
-No voy a despedirla- objetó frustrado.
-Entonces yo lo haré- sentenció Soobin- Es solo una secretaria. Ya la tienes en casa, ¿Para qué quieres tenerla también aquí?
-¡Cierra la boca, Soobin!- rugió furioso- No quiero a Paige en mi oficina.
-Yeonjun, no hay quien te entienda, ¿No es una secretaria lo que quieres? Te estoy dando una y es Paige...
-No la quiero en mi oficina- puntualizó.
-Mira como son las cosas. Estoy haciéndole un favor a su hermano, el puesto de T/n es la única vacante, así que Paige va a ser tu secretaria- informó tan sereno como siempre, parecía como si amargarle la vida fuera su hobbie- Ahora bien, si dejas de patalear como niño de preescolar sin paleta, puedo buscar la manera de reubicar a T/n en cualquier otro lugar, ¿Te parece?
-¿Por qué no puedes dejar a T/n donde está y poner a Paige en cualquier otro puesto?
-Porque no- alegó- Tú elige.
-En serio a veces me pregunto si en tu tiempo libre te sientas a idear maneras de fastidiarme.
-Tengo cosas que hacer, Yeonjun. En serio me gustaría que te quedaras para contarme sobre las teorías que tienes de como gasto todo mi tiempo libre conspirando contra ti, pero no puedo. Ya nos veremos.
ESTÁS LEYENDO
Y Ahora ¿Que Hago? (Yeonjun y tu)
FanficT/n es una joven ejemplar con un futuro meticulosamente planeado: terminar la escuela, encontrar un trabajo, ingresar a la universidad... Todo estaba planeado, menos conocer a Choi Yeonjun. T/n nunca se había imaginado que se sentiría atraída por su...