Capítulo 15

344 29 3
                                    

- POV Naim -

Estoy en una nube desde el fin de semana que pasé con Chloe, hace ya un mes de eso, pero no hemos dejado de vernos. Cada semana intentamos quedar dos o tres veces, y hablamos a diario. Soy consciente de que estoy enamorado de ella, es única y hace que me sienta vivo, pero no sé cómo decírselo. ¿Ella sentirá lo mismo? Esa pregunta me atormenta desde la semana pasada, cuando fuí consciente de mis sentimientos hacia ella. Ya hace dos meses y una semana desde que nos conocimos, y desde el primer momento fuimos ella y yo, no ha habido terceros, cualquiera diría que salimos juntos, pero ninguno de los dos lo ha hecho oficial en ningún momento. Ni siquiera hemos hablado del tema...

—¿Estás aquí o con cierta morena de ojos verdes?

Veo a Silas zarandeando la mano frente a mis ojos mientras el resto del grupo me mira fijamente.

—Perdón chicos.

—Chloe te tiene absorto —protesta Joe.

—Como a ti la petarda esa —le increpa Orión—. Al menos Chloe no nos trae a sus amigas para fardar de contactos.

—¿Podemos centrarnos en lo verdaderamente importante? Quiero irme a casa —protesta Silas—. ¿Hacemos o no el concierto benéfico?

—Yo voto que sí —me apresuro a dar mi opinión, también quiero irme a casa.

—Por mi bien —dice Orión.

—¿Sabéis el significado de benéfico? Quiere decir "gratis".

—Joe, es para ayudar a las asociaciones que cuidan de animales abandonados —le recuerdo—. ¿Tanto te cuesta hacer algo por caridad?

—Un poco, la verdad.

Me llevo una mano a la sien y la masajeo.

—Lo siento, pero yo también creo que podríamos hacerlo —dice finalmente Silas.

—Bendita democracia —susurro—. Bien, tenemos concierto en dos semanas, el trece de septiembre. Podemos irnos.

—Esperad un segundo. Nos han pedido que, aparte de nuestras canciones, metamos alguna otra más popular. Nuestro mánager se ocupará de contactar con los artistas pertinentes para pedir permiso, pero tenemos que pensar qué queremos cantar y decírselo antes de finales de semana.

Todos miramos a Orión. Ninguno teníamos conocimiento de eso.

Estamos recogiendo los instrumentos cuando una idea cruza mi mente.

—Chicos, necesito vuestra ayuda para algo —todos se giran intrigados—. Quiero estar con Chloe, confesarle mis sentimientos, pero no se me da bien hablar de estos temas, así que quiero pediros que me dejéis escoger dos de las canciones.

—¿Vas a convertir uno de nuestros conciertos en un acto romántico? ¿Sabes cómo pueden ponerse las fans?

—Déjate de fans, Joe —interrumpe Silas—. ¿Vas a exponerla frente a todos?

—No, solo quiero que le lleguen mis sentimientos. No voy a montar ninguna escena romántica con Chloe, no sufras por eso Joe. Lo último que quiero es que lo nuestro salga a la luz —hago una breve pausa—. Vosotros sabéis bien lo que eso conlleva, y quiero mantenerla al márgen todo el tiempo que sea posible.

—Haces bien —dice Orión.

El peor momento de Orión como famoso fué cuando salió del armario, el segundo cuando presentó al que en aquel entonces era su pareja. La prensa no paró hasta destruirlos, y las fans tampoco ayudaron precisamente...

—¿Me ayudaréis? —insisto—. Se merece algo especial, y con la música puedo dárselo.

—Nunca creí que viviría para ver a Naim enamorado —se ríe Silas—. Cuenta con nosotros.

Una canción para sanar su corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora