Capítulo 22

311 26 1
                                    

- POV Naim -

Aprovechamos el puente de Octubre para hacer un concierto en la ciudad. Personalmente hubiera preferido ir con Chloe a su segunda residencia, pero el evento estaba pactado incluso antes de conocerla. Al menos puedo disfrutar viéndola cantar y saltar como una loca en primera fila. Está más alegre que de costumbre, e imagino que el hecho de que haya podido conseguir entradas para Ivy y Ava tiene algo que ver. Inés no ha podido venir esta vez y no quería que estuviera sola.

Al acabar el concierto, Chloe viene a mi camerino, acompañada de su hermana y de Ava. Siento alivio al ver que Ava actúa como cualquier persona normal al conocer a un famoso, ya empezaba a sospechar de que Chloe amenazaba a todos los de su círculo más cercano antes de hacer las presentaciones.

Silas y Orión entran un rato al camerino a petición mía para que les conozcan. Ivy no puede contener la emoción y les pide un autógrafo a cada uno, Ava les pide otro de forma tímida, y por la cara de Chloe sé que luego les va a caer una regañina.

—No se lo tengas en cuenta —le susurro.

—Les advertí que no lo hicieran —me mira seria.

—Tienen diecisiete años y acaban de conocer a dos integrantes del grupo más famoso de la ciudad. ¿Tú no harías lo mismo?

Me mira con las cejas alzadas.

—Obviamente no.

No sé ni para qué he preguntado, ni siquiera se interesó en mí de ese modo al conocerme.

—No todo el mundo tiene tu capacidad para pasar de la gente famosa y tratarla como a simples mundanos.

—Sois simples mundanos —me recuerda para bajarme los humos.

Orión parece encantado hablando con mi cuñada y su pareja. Silas hace rato que ha salido de escena, él lo niega, pero creo que ha quedado con Inés.

Al ver que la charla va para largo, voy a por bebidas para todos.

—¿Cómo decidisteis el nombre del grupo? —pregunta curiosa Ivy.

Orión se ríe. No puedo evitar intentar que no lo cuente, es penoso, pero me hace caso omiso.

—Estábamos borrachos, para qué mentir, y la fecha límite para decidir el nombre era esa misma noche. Se barajaron muchas opciones, pero Silas envió ese nombre por algún motivo que, a día de hoy, aún desconocemos. Ni siquiera recuerda haberlo enviado.

Intento cubrir mi cara mientras de reojo observo la reacción de Chloe. Para mi sorpresa, todas estallan en carcajadas.

—Será mejor que esto nunca salga a la luz —consigue decir Chloe mientras tose e intenta recuperar el aliento—. Es patético.

Ava promete guardar el secreto, Ivy es más lista y pide a cambio entradas para nuestro próximo concierto.

—Miedo me da tu hermana si con diecisiete años se atreve a chantajearnos —bromeo.

—Dale la mano y te cogerá el brazo.

Una canción para sanar su corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora