Mi eternidad eres tú [𝐄𝐢(𝐌𝐚𝐥𝐞) 𝐱 𝐘𝐚𝐞 𝐌𝐢𝐤𝐨]

XXVI.

Una decisión.

Ei Raiden y Yae Miko un hombre y una mujer que han demostrado que para el amor y deseos pueden cumplirse si solo se tiene el momento indicados, a lo que debemos referirnos es que ser perseverantes nos ayuda a alcanzar lo que queremos es un claro ejemplo que nos ha dado la Yokai pelirosa a lo largo de esta historia mientras que Ei el Todopoderoso emperador y Arconte Electro ha demostrado que no importa cuánto intentes aislarte del mundo exterior siempre vas a tener a alguien que te va a querer y amarte.

Justo ahora estos dos se encuentran dormidos juntos en la comoda cama del emperador electro y amaneció se puede ver cómo los rayos del sol atraviesan la ventana y pegaban a los ojos de Ei haciendo que este se despertara y se levantara lentamente.

Observaba a su derecha a su linda y amada Kitsune pelirosa la cual paso con ella una nueva noche de pasión y placer.

Tras levantarse observaba a través de la ventana todo Inazuma y de un espléndido y reluciente amanecer de un momento a otro siente como es tomado por detrás de alguien y se daba de cuenta de que era Yae.

Ei: Muy buenos días querída.

Yae: Muy buen día querido Ei.

Ei: ¿Que tal amaneciste hoy?

Yae: Mejor que nunca además estando contigo todo es magico~

Ei: Puedo decir lo mismo.

Posteriormente Ei se ajusta para poder estar a la par mirando hacia los ojos de Yae y este le iba acariciandole con sus manos las mejillas de la pelirosa y le besaría con delicadeza los labios para separarse rápidamente.

Yae sonríe ante aquel beso mientras que le iba acariciandole la espalda a Ei y abrazandole.

Ei: Cuánto te amo Miko.

Yae: Y yo a ti Ei.

-Mientras tanto Kujou Sara -

Podemos imaginar o ponernos en el lugar de Sara y ver cómo se siente a la jóven Kujou se le pueden notar ojeras en sus ojos y con un pañuelo totalmente húmedo el cual sigue usándolo en su nariz para sacudir sus fosas nasales liberando mocos.

Todo ello mencionado fue el resultado de lo que había visto ayer sin duda ver al hombre que ama y admira desde que era pequeña con una mujer que no es ella sin duda le ha roto totalmente el corazón.

Permanecía allí sentada en una banca detrás del palacio del Arconte Electro es un espacio dedicado solo para el uso del emperador y sus súbditos de alto rango como lo es Sara la cual es general del ejército del Shogun.

Sumida en sus pensamientos más tristes y deprimentes la única salida que tiene para eso es una cantimplora de Sake que tiene justo a su lado y parece que es un galón entero sin embargo de la forma en como lo esta bebiendo parece que lleva más de la mitad consumido.

Seguía con lágrimas en sus ojos era la primera vez que ella se siente tan vulnerable ni siquiera en su más duro y extenuante entrenamiento se vio tan vulnerable como lo esta en estos momentos, de pronto una serie de recuerdos pasan por su mente algo por lo cual ella se enamoro de Ei Raiden desde hace mucho tiempo.

-Años atras-

Se puede apreciar como una pequeña Kujou Sara se encuentra usando una espada de madera y golpeaba un maniquí de combate pero este maniquí a base de los golpes que recibe este se mueve con mayor intensidad y entonces Sara falla un golpe y caia al suelo y se lastimaba el codo del brazo derecho.

Sara: Aaauh! *Solloza*

Uno de los que estaban al cuidado de Sara se le acerca a ella y le pateaba levemente lo más seguro se trataba de su mentor y maestro.

Mentor de Sara: Vamos! Levantate el enemigo no tendrá piedad cuando estés en el suelo levantate Kujou!

Sara: Me duele el brazo...

Mentor de Sara: Sin excusas tu-

Cuando aquel hombre miraba al frente de la puerta del dojo quedó totalmente en silencio y trataba saliva debido a los nervios que siente.

Mentor de Sara: Lo-Lord Shogun que sorpresa tenerlo por acá en mi dojo ¿Que se le ofrece? Le cumpliré sus órdenes.

Shogun: Primero quiero que hagas silencio...¿Por qué estabas pateando a esa niña?

Sara: *observa al Shogun* (Es tan tan... Imponente quiero ser como el)

Shogun: Ya veo en dado caso me la llevaré y no quiero ninguna objeción de tu parte o las consecuencias serán graves.

Tras esas palabras El emperador electro tomaba a Kujou Sara de la mano y así los dos se irían caminando juntos por aquel patio en dónde estaba ese antiguo dojo.

Sara miraba al Shogun con admiración pero en sus ojos se notaba la alegría de tener a alguien como el a su lado y se siente muy agradecida con el tanto que frotaba su rostro en la mano de aquel varón pelimorado.

Sara: ( El Lord Shogun es tan suave...cuando sea grande...quiero ser su esposa)

Fue la decisión que ella tomo desde aquel entonces ¿Que podrá hacer ahora que sus cartas no están a su favor?