Herederos Del Infierno #1 Evangely

Capitulo 16: Fuerzas ingobernables

Evangely

El roce de sus dedos en mi muslo luchaba contra mis sueños, mi piel se eriza bajo su toque, pero aun así no podía abrir mis ojos, podía escuchar su voz llamándome desde la oscuridad mientras los recuerdos de la noche anterior se paseaban detrás de mis parpados haciendo que las yemas de mis dedos ardieran por tocarlos de nuevo, tres meses habían pasado desde que Hazel había vuelto a nuestras vidas, Gedrick ya no me miraba como a una niña y me lo recordaba cada noche en la que dormía exhausta en sus brazos, Hazel por otra parte se escabullía cada que podía para estar con nosotros, todo empezaba a encajar y por primera vez en mucho tiempo ya no me sentía sola, Gedrick y Hazel parecían jamás cansarse de tenerme y no podía quejarme al respecto, por alguna razón simplemente tenía la certeza de que aunque el universo ardiera ellos estarían a mi lado mientras mirábamos las cenizas caer.

Ambos estaban trabajando en el plan de Taylor y los habitantes de las aldeas habían mostrado un notable avance en sus habilidades de batalla, las hechiceras también estaban siendo exhaustivamente instruidas acoplando cada nuevo dato del libro azul que creíamos necesario, Paige por otra parte se había dedicado por completo a su preparación, verla era la certeza de que el reino estaba en buenas manos, Gedrick ordeno un entrenamiento intensivo para ella igual al que tomaron todos los de la guardia real, y además de ello debía tomar lecciones directas de las ancianas de la aldea de la luna rota, mi entrenamiento había sido casi imposible, pero ella lo manejaba con entereza, incluso hacia espacios para estudiar como el éter afectaba su magia, hasta ahora no había logrado controlarlo, pero ella no dejaba de intentarlo, Gael parecía decidido a ayudarla, jamás se separaba de su lado a pesar de que las ordenes de Gedrick eran darle espacio, Paige seria incluida en la guardia real apenas terminara sus entrenamientos, tenía un largo camino que recorrer, pero lo cierto es que era una de nosotros y lo demostraba en cada paso del camino, siempre habíamos sido solo Góspel y yo sin embargo la hechicera se estaba ganando no solo mi confianza, sino también el lugar que le correspondía desde su nacimiento, apenas terminara la misión seria instalada en el castillo, pero por ahora lo mejor era mantener su bajo perfil, ella era nuestra arma secreta y mientras menos se supiera de ella o de su potencial mejor era para todos.

Gedrick beso mi cuello y me pegue a él en busca de más mientras se reía en mi piel.

–Arriba Ly– me dijo mientras sus manos recorrían mi vientre

–Paige te espera– mordió mi oreja y solo paso un segundo antes de que olvidara por completo el cansancio de mi cuerpo y estaba lista para él, nunca pensé que este día llegaría, pero ahora Gedrick estaba en mi cama cada noche y mi cuerpo lo agradecía de maneras exorbitantes, Gedrick había puesto a Peerce el segundo al mando a cargo de los entrenamientos con los serafines y ahora estaba por completo dedicado a la preparación de Paige, yo por mi parte trabajaba en mi control mental y me unía a los entrenamientos cada que podía.

Taylor se había comunicado hace poco con nosotros, la idea del sorburu no dejaba de dar vueltas en mi cabeza desde que lo dijo y por otra parte estaba la seelie, teníamos tan poca información sobre ella, pero los hermanos Lee estaban seguros de que era una parte fundamental para hallar las respuestas que necesitábamos, confiaba plenamente en ellos, pero por otra parte temía que mi mejor oficial de inteligencia estuviera perdiendo tiempo vital en un caso que no nos guiaría a ningún lugar, todavía no teníamos noticias de Góspel más allá de la carta que todavía no podía descifrar, por otra parte estaba Isabella, Blake no se había rendido en su búsqueda, pero a la vez se mantenía enfocado en armar el plan de rescate de Heather, el día de la misión al reino de las sombras se acercaba con rapidez y mi corazón latía con fuerza de solo pensar que la volvería a ver, no sabía cómo tomaría lo de Blake, era distinto en su caso los hijos de la luna roja eran más pasionales y su compañero de vida era un límite que no estaban dispuestos a dejar cruzar, pero confiaba en que ella entendería la situación, ella era un ser racional y además no teníamos tiempo para dramas, Blake por otra parte parecía convencido de lo contrario por lo que apenas me hablaba y solo si era extremadamente necesario, situación que parecía encantarle a Gedrick y a Hazel, yo en cambio no podía evitar sentirme incomoda, mucho más allá de lo que habíamos pasado juntos Blake era el mejor amigo de mi hermano y desde mi perspectiva lo único que me quedaba de él, su distanciamiento no era fácil para mí, estaba acostumbrada a tenerlo cerca, siempre molestándome desde pequeños y luego como un compañero con el que disfrute y en el que confié, no tenía idea de cómo ayudarlo con su adicción al éter y esa era otra de las cosas que me pesaban, me sentía culpable, pero también sabía que traer a Heather de vuelta era lo único que podría ayudarnos, Heather era innegablemente la más brillante de todos, Taylor era un excepcional estratega militar, pero en todo lo que tenía que ver con las ciencias de los reinos la indicada era Heather, y en medio de tantas preguntas sin duda ella representaba nuestras respuestas.