Capitulo 31: Nacimos para arder

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Lisa

Escucho los latidos de mi corazón mientras corro dentro de los calabozos, la mayoría de los serafines se han marchado al reino de las mareas y sé que con ellos también se han marchado mis verdugos, abro tantas celdas como me es posible con el cristal que Izzy hechizo para mí, no logro diferenciar a las Devas de las hechiceras y el miedo empieza a tomar el control de mis pensamientos, rostros inconscientes aparecen ante mi desde distintas direcciones, están sucios y cubiertos de cicatrices.

La sangre que bañaba el piso era tan roja como el rubí que sostenía en mis dedos, por lo que sabía que estaba en el lugar equivocado, Salí de la celda y repetí el proceso en todas las demás, la mayoría de las hechiceras habían sido enviadas al reino de las sombras, pero las que recolectaban debían pasar primero por un "juicio" en el que se desidia su destino, las opciones eran ser esclavas de algún ángel o terminar en el reino de las sombras, la magia de las hechiceras se reducía cada vez más si se mantenían lejos de su luna por mucho tiempo, por lo que las esclavas que se quedaban en el reino de cristal eventualmente perdían toda su magia por lo que era indispensable que encontrara a una hechicera que acabara de ser recolectada.

La cornalina emanaba calor en mi bolsillo mientras revisaba a tantas chicas como podía, era cuestión de segundos antes de que mandaran nuevos guardias a tomar el lugar de los serafines, por lo que nuestro plan se veía cada instante más imposible, no había plan B, ni opciones, debía haber una hechicera dentro o todas perderíamos la oportunidad de escapar.

Mi vestido tan blanco como mi sangre se deslizaba sobre el mar carmesí mientras la desesperación empezaba a inundarme, había huido durante años del rey y de sus verdugos, era el único ser vivo que había logrado evadir a la muerte blanca, este no podía ser mi final, mi frustración empezó a hacer estragos en mi antes de que la cornalina quemara mi piel, la saque con rapidez de mi bolsillo y mire como brillaba detectando la presencia de sangre ámbar, respire despacio mientras miraba las pilas de cuerpo a mi alrededor

–vamos hechicera ¿dónde estás?– dije antes de que gotas empezaran a caer sobre mí, el líquido se sentía espeso al tacto y luego pude vislumbrar que era del mismo color de la cornalina, las gotas siguieron cayendo mientras se alejaban de mi formando un camino que me llevo al final de la pila de chicas, detrás de ella una pequeña niña yacía inconsciente de espaldas al resto, separe su cabello mientras las gotas ámbar se unían al sucio de su vestido, y ahí estaba una pequeña herida en su rostro enmarcada por restos de sangre ámbar, podía escuchar su débil respiración, por lo que sabía que no tenía mucho tiempo, la cornalina podía devolverle sus poderes, pero había un punto de no retorno y sabía que la pequeña estaba muy cerca de llegar a él, tome la cornalina y la puse en su pecho tal y como Izzy me había enseñado, en solo segundos se fundió dentro de él y rece al universo para que no fuera demasiado tarde, este era el primer golpe de la resistencia, y más allá de ser nuestras presentación ante la tiranía, era la oportunidad de salvar millones de vidas inocentes, y el primer paso para derrocar al rey.

La resistencia había bajado las defensas del sótano, por lo que apenas la hechicera estuviera lista podría usar sus poderes, pero el tiempo no estaba a nuestro favor, a pesar de que la prioridad era la triada, el reino aún estaba fuertemente custodiado, por suerte algunos de los serafines de rango inferior eran infiltrados de la resistencia, y hoy estaban a cargo de la seguridad del reino, muchas cosas podían salir mal, pero también era la mejor oportunidad que tendríamos en mucho tiempo.

La pequeña niña abrió los ojos y el alivio invadió mi cuerpo, inmediatamente Izzy se enlazo a ella y tomo el control de su cuerpo a través del cristal, y en segundos el portal estaba abierto dejando que los centinelas del reino de fuego entraran a los calabozos y junto a los serafines de la resistencia tomaron a todas las chicas hechiceras o no y las llevaron al reino de fuego, los serafines de la resistencia fueron los últimos en cruzar, era cuestión de horas para que entendieran que ellos nos habían ayudado, la fortaleza de cristal ya no era segura para ellos.

Herederos Del Infierno #1 EvangelyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora