Resiliencia

Problemas.

Gabriel:
Los ojos me pesaban, me pesaban tanto que tuve que abrirlos y me los restregué con las manos, hasta que me di la vuelta en la cama y ahí vi a la tal Marissa.
Era tan distinta a Nicole que daba hasta miedo porque Nicole era natural, muy natural, y cuánto más natural estaba más cómoda se sentía.
Esta mujer no, esta mujer era completamente distinta.
Cuanto más maquillaje mejor para ella, estaba muy buena si, pero le encantaba abusar del maquillaje.
Yo me levanté de aquella cama que ni sé dónde estaba, y me vestí corriendo porque necesitaba llegar a mi casa cuanto antes.
Así que cuando terminé de vestirme salí de aquella habitación y ahí fue cuando caí en la cuenta de donde estaba, en el chalet de mi amigo Antonio.
Sin ni siquiera despedirme de nadie en cuanto salí de allí cogí un taxi, necesitaba una ducha urgentemente.
Cuando llegué a mi casa y abrí la puerta me encontré con House durmiendo en el sofá, que cabrón era.
Estaba malditamente seguro de que lo hacía para increparme al siguiente día, tenía una especie de obsesión con Nicole y conmigo.
Cuando cerré la puerta House se despertó por el ruido, y la cara que tenía no era muy buena que digamos.
-¡Hombre mira quién está aquí, el tira mujeres!
Yo rodé los ojos, ¡que hijo de puta!
-¿Se puede saber que coño te pasa? Te voy a quitar las llaves de mi casa, eres muy pesado, tío.
House se levantó del sofá concarandose conmigo, y me dijo:
-¿Se puede saber que coño te pasa a ti tirándote a esa señora? Tío, de verdad ¿de que vas?
Yo me aparté de él y me senté derrotado en el sillón llevándome las manos a la cabeza, ya estaba hecho y no podía darle marcha atrás.
-Estoy muy jodido, House, muy jodido.
Me jode el no poder tenerla, entonces he decidido disfrutar de mi verano y no pensar en nada más.
Vi como House se sentó en el sofá enfrente de mi, y me dijo:
-Tio, yo te entiendo perfectamente, pero ten cuidado con lo que te haces.
Yo me levanté del sillón y lo abracé, House apretó el abrazo y me dijo:
-Yo ya me tengo que ir, me voy por Europa durante julio y agosto, así que espero que te comportes ¿vale?
Yo asentí y cuando abrió la puerta antes de irse me dijo:
-Nicole Wallace.
Y la sonrisa que se me escapó de los labios fue épica, el muy cabrón jamás dejaría de mencionarmela.
Pero yo tenía un jodido problema, un problema serio.
¿Cómo coño con solo nombrar su nombre sentía que una tensión me recorría por todo el cuerpo? Enserio, es que era automático, no me hacía falta ver su cara porque con solo oír su nombre me volvía loco.
Estaba pensando en eso cuando el sonido de mi móvil me sacó de mi ensoñación.
"Ey, no te has despedido.
Pero si quieres podemos vernos luego, ¿te parece bien?"
Coño, Marissa, ya me había olvidado de ella.
¿Y que coño le digo?
"Gabi tú y yo no podemos tener nada por las películas, pero sobre todo por nuestra amistad"
De pronto esas palabras me invadieron la mente para hundirme un poquito más, así que cogí mi móvil y le puse.
"Claro, luego a eso de las tres de la tarde quedamos en la Warner. Un saludo Marissa"
Y rápidamente mi móvil volvió a sonar, y leí el mensaje que me había dejado.
"Es Maritere. Y si, a las tres estoy ahí"
Las horas pasaron rápido y ya me encontraba en la Warner, también habían venido unos cuantos amigos y Fernando con el que estuve trabajando hace años en Skam.
Y ahí la vi, llevaba una coleta alta con unas gafas.
Joder, que diferente estaba a como la vi anoche.
No llevaba a penas maquillaje, una camiseta negra de tirantes y unos vaqueros.
Así que me acerqué a ella y la saludé:
-¡Hola Marissa!
Vi como ella resopló algo molesta, ¡madre mía hija, que yo no me suelo quedar con los nombres, y menos con el tuyo!
-Soy Maritere.
-Ya, ya, Perdón.
Ella cambió de semblante, de tener una mala cara a sonreirme, y le dije:
-¿Vamos?
Ella asintió y yo le puse una mano en su nuca, y ahí fue cuando vi como Fernando estaba grabando, pero lo que no me imaginé es que lo subiría en su Instagram.
Así estuvimos durante todo el día y la verdad es que me lo pasé bien, Marissa era divertida y empezó a seguir a todos mis amigos en Instagram, hasta a House.
La dejé a ella en su casa, hoy no tenía ganas de fiesta.
Así que cogí mi móvil que no lo había visto durante toda la tarde y lo que vi me dejó helado; tenía a todo Twitter e Instagram, más tiktok hablando de Marissa.
-¡Mierda! Lo que me faltaba, que me casen con ella.
¿Y si lo ve Nicole?
¡Mierda, mierda, y más mierda!
Nicole:
Mi móvil no dejaba de palpitar por las notificaciones y yo ya me estaba cansando, ¡joder, que pesadez!
Así que lo cogí y empecé a mirar en Instagram todas mis notificaciones, pero hubo un cierto story que me llamó especialmente la atención.
Gabi estaba en la Warner con sus amigos y agarrando por detrás del cuello a una mujer, y no parecían muy amigos, si no que era algo más.
-¡Me cago en tu puta madre Gabriel!
Asi que fui directamente a mi cuenta y archivé la publicación que hice cuando estuvimos haciéndonos aquella sesión de fotos, ¿quieres guerra Gabriel? pues la vas a tener.
Yo estaba llorando sentada en el sofá cuando mi hermana y Marina entraron por la puerta de casa, y las dos me miraron sorprendidas sin saber que coño me pasaba.
-¿Hermana estás bien?
-No, no estoy bien.
Marina se acercó a mí y me abrazó con Chloe haciendo lo mismo, y me preguntó:
-¿Pero que te ha pasado?
-Gabriel se lo ha pasado muy bien hoy con una mujer en la Warner, y todo por mi maldita culpa.
Y Marina me contestó:
-¿Por qué crees que es tu culpa?
Yo me separé de ellas y me puse de pies, el coraje y la rabia estaban pudiendo conmigo.
-¡Por mi maldito miedo, joder!
Tengo muchísimo miedo, miedo de perderlo, miedo de que empecemos algo y no salga bien; de que las películas se vayan a la mierda por un calentón.
Chloe negó con la cabeza, y se levantó para ponerse enfrente de mi.
-A ver, a ver, a ver.
Un calentón tampoco, que aquí todo el mundo sabemos que habéis estado encoñados desde lo de Skam.
Pero no sois fáciles, si él te da guerra tú le respondes siempre y sin despeinarte.
Marina se echó a reír, y me dijo:
-Pues yo le acabo de dar ufollow, lo siento me parece un cabrón.
-Si, pero tampoco puedo pretender que se quede en su casa llorando porque yo no le digo que si. ¡Pero me da un corajeeeee, que quisiera romper todo lo que hay a mi paso!
¿Por qué cojones la tiene que agarrar así por el cuello, eh? ¿Por qué?
-Hermana, sois los dos demasiado tóxicos..
Joder, no vivís ni dejáis vivir, ¿eh?
Tú le dices que no quieres nada con él, ah, pero cuando lo ves con otra te entran los mil demonios por el cuerpo.
Yo miré a mi hermana con ganas de matarla, pero cuando fui a contestarla Marina me interrumpió diciéndome:
-¿Sabes qué Nicole?
Y pregunté yo:
-¿Qué?
-Que mañana nos vamos a Granada, así que prepara tu maleta que nos vamos.