Resiliencia

La llamada

Gabriel:
¿Y precisamente todos son gays?, ¿todos? ¡Venga ya!
-Si, claro, House. Todos son gays, ¿no?
Vi como House resoplaba, la verdad es que él y Antonio estaban teniendo muchísima paciencia conmigo.
-Gabriel, si vas a Jordania lo único que vas a conseguir es que Nicole se aleje más de ti, y tú no quieres eso ¿verdad?
Yo me quedé pensativo, no, no quería eso.
-No, no quiero eso.
-Bien, así se hace compadre.
Pero yo no estaba nada feliz, nada.
Un rato después de colgar a House me quedé en la habitación tratando de calmarme, me encendí un cigarrito y me senté en el balcón.
Nicole estaba con sus amigos, y parecían todos gays.
Al manos cuatro de ellos si que lo eran, pero ella iba con cinco ¿quién era el quinto?
Mira que no sea quién yo pienso, porque como sea quién yo pienso lo entierro en la arena.
Justo en ese momento Nicole subió otro stories, y ahí vi como arrobaba a Manuel.
No, eso sí que no.
Cogí corriendo mi móvil y apagué el cigarro de malas maneras, para después marcar el número de ella.
Nicole no me lo cogió ni a la primera ni a la segunda, pero si a la tercera:
-¿Se puede saber que coño quieres?
Me preguntó de muy malas maneras, y yo le contesté también de muy malas formas.
-¿Como que coño quiero?
¿Se puede saber que coño estás haciendo ahí con cinco hombres tú sola?
Oí como ella se reía detrás de la línea, ¿enserio?
-¿Te estás riendo de mí?
Pregunté elevando el tono de mi voz, pero me dió exactamente igual que alguien lo pudiera escuchar.
-Es que yo no sé quién coño te crees, tío.
Pero yo ya no me pude aguantar más, y le dije:
-O te vuelves ahora mismo para España, o si no te juro que voy hasta allí y te traigo aquí aunque sea arrastras si hace falta, pero de que te traigo te traigo.
Oí como ella empezó a reírse todavía más fuerte, pero también pude notar ese deje de amargura porque esa risa no era de felicidad, aunque si que se estaba riendo de mí.
-Claro que si, moreno, me traes a España y de paso nos tomamos una copa los tres juntos.
Y ahí me quedó clara una cosa, Nicole estaba celosa y eso me hizo sonreír como nunca.
¿Eso significa que también me quieres, pecas?
-Con que celosa, ¿eh?
-¿Yo de ti?
Y esta vez mi sonrisa se ensanchó más, por supuesto que lo estaba.
-Vuelve a España, te juro que dejo a Maritere por ti. Además, tampoco es nada serio.
Oí como ella soltó todo el aire que le cabían en los pulmones, y me dijo:
-Es que esto es el colmo chaval, el colmo.
Osea, que te largas por ahí con una señora que podría ser tu madre ¿y soy quién se tiene que joder? ¿por qué, Gabriel?
Mi única reacción fue tirar contra el suelo otro vaso, y ella lo escuchó por lo que se quedó completamente muda.
-¡Me cago en la puta, joder! Vuelve ahora mismo porque si no me voy a presentar allí.
-¡No me da la gana!
¡Y ya basta Gabriel, enserio!
Empecé a morderme los labios del mismo coraje, tanto que casi me hago hasta sangre.
-Me dijiste que yo estaba soltero y que podía hacer lo que me diera la gana, ¿no? ¿ahora a que viene todo esto, Nicole?
-¿Hace falta que te lo explique? Te has ido con esa señora por ahí, y encima tienes los cojones para dar ese like que me dolió en el alma.
Una bala en el pecho me habría dolido menos, pero ella tenía razón:
-Lo siento, lo siento mucho, pececito.
Noté como ella sonrió, y ahí fue cuando creí que tenía la oportunidad de convercerla.
-Vuelve a España, Pecas, y lo hablamos.
-Ya te he dicho que no.
Y yo empecé a apretar los dientes, y le dije:
-Con lo caras que salen estas llamadas más te vale que no me cuelgues.
Y oí como ella empezó a reírse pero esta vez con ganas, y a mí eso me enervó todavía más.
-¿Quieres ver como si?
-Ni se te ocurra, ¿me oyes, Pecas? no lo hagas, por favor.
-¡Adiós, Gabriel! Saluda a tu señora de mi parte
-No, no, no, Nico...
Pero de pronto escuché: Piii.....
-¡Me cago en mi puta vida!
Y justo en ese momento entró Antonio, y me miró con la cara desencajada al verme así de alterado:
-¿Y ahora que te pasa?
-Está también su amiguito el tal Manuel, y ese de gay no tiene nada.
Antonio negó con la cabeza y se acercó a mí, eso sí, con cautela.
-A ver, Gabriel, deja a Nicole en paz.
-¡No me da la puta gana!
¿por qué coño no lo entiendes?
-Porque soy tu amigo, y porque sé que si pierdes a esa chica no vas a levantar cabeza.
Antonio tenía razón, pero yo seguía con la mía.
Así que saqué un cigarro de mi bolsillo y me lo encendí, mientras que Antonio volvió a hacer una videollamada con House:
-Él es su amigo, nada más.
¿Me estás escuchando, Gabriel?
Y yo contesté a regañadientes:
-Si, te estoy escuchando.
-Muy bien, hermano.
No hagas ninguna tonteria, Nicole está bien y deberías estar contento.
Y yo hice una mueca y empecé a reírme con ironía:
-¿Contento? O sea, que cinco gilipollas se llevan a mi chica a Jordania, ¿y yo tengo que estar contento? No sé, a lo mejor algún día se casa con alguno de ellos y yo podría ser el padrino, o el cura, ¿quién sabe?
House y Antonio empezaron a reírse de forma que me tocaron bastante los cojones, ¡cabrones!
-Gabi, por favor, ya vale.
Escúchame, Nicole no está con ninguno de esos chicos.
Y yo me alejé sin contestar, pero si escuché que le dijo House a Antonio:
-No permitas que se vaya a Jordania, por favor.
Y contestó Antonio:
-No te preocupes que no lo hará.
Una hora después estábamos en la terraza de un bar con mi amigos, y Marissa quién solo sabía que hacerse fotos para Instagram dejando claro que estaba conmigo, le hubiera dicho que se dejara de tonterías pero quería que Nicole lo viera.
Si ella me jodía, yo más.
Cogí el tercer cubata y me lo tomé sentado en un banco alejado de los demás, y empecé a ver fotos suyas.
Estaba condenamente preciosa en todas, pero lo que más me gustaba de ella era su naturalidad y esos hoyuelos en sus mejillas.
Como quisiera tenerte aquí conmigo, pecas.
-¿Todo bien, hermano?
Y yo negué con la cabeza, estaba jodido y borracho así que nada podría ir bien.
-Cinco hombres, ya no se conforma con uno que se va con cinco hombres dejándome claro que es ella quién gana.
-Pues como todas las mujeres.
-La quiero, Antonio.
-Y yo estoy seguro de que ella a tí también, porque si se ha ido a Jordania y habéis tenido esa llamada es porque le has jodido pero bien.