Solo nosotros dos ||Jk+Tn||

•15장•

¡¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS JUNGKOOK!!!
Hoy nuestro Jeon Jungkook cumple 26 años de edad.
Creo que hablo por muchas de nosotras cuando digo que BTS nos ayudó a mejorar para bien. En mi caso, Jungkook es mi bias
asique lo tomo a él como ejemplo y también porque es su cumpleaños, claro.

Gracias Jungkook por cuidarnos tanto y preocuparte por nosotras cuando somos unas simples fans y tu un Idol muy famoso e importante. Te lo agradezco mucho.
Te amamos.

<3

Solté un suspiro de alívio al ver que todo había sido un sueño, o, más bien, una pesadilla. Miré la hora en el reloj que tenía en la mesita de noche y pude ver que eran las 6:58, faltaban 2 minutos para que mi alarma hiciera ese sonido que tanto odio.

Miré a Jungkook quien me miraba algo preocupado mientras acariciaba mi mano.

-¿Tuviste una pesadilla?- Me preguntó. Lo mire a los ojos y sentí. -¿De que?

-Soñé que tus padres me mataban con una puñalada mientras me decían que no era lo suficientemente buena para ti y que…- Le me interrumpió.

-No ya ya. Ya no cuentes más, ven.- Con sus brazos abrazó mi delicado cuerpo.

El olor de su colonia invadió mis fosas nasales degustándome con el olor tan peculiar, tan masculino, tan perfecto que tenía Jungkook. También, además de su bendita colonia estaba el calor que su cuerpo me brindaba, en una mañana fría, es lo mejor.

Con una mano acariciaba mi cabello y con la otra me sostenía contra el dándome un cálido abrazo. Mientras Jungkook me abrazaba me calmé un poco, al menos ya respiraba tranquilamente hasta que sonó mi estupida alarma.

Me separé de él para apagarla y me dirigí al baño para hacer mi rutina.

Me tomé un baño de agua fría. Salí del baño viendo cómo Jungkook se había vuelto a acostar y estaba dormido.

Me dirigí a mi clóset y saqué mi uniforme. Lo puse sobre la cama y empecé a vestirme.
Después sequé y peiné mi cabello y después volví finalmente a donde Jungkook para despertarlo pero, al acercarme me pude dar cuenta de que estaba despierto.

-¿Estabas despierto todo este tiempo?- Me ruboricé.

-Si.- Me sonrió.

-¿Me visite mientras me cambiaba?- El asintió.

-¡Ay Jungkook!- Le tiré una almohada mientras el reía.

-Ahora tengo ganas de hacerlo.- Dijo con un puchero.

-Pues esta semana no se puede.- Dije y me crucé de brazos.

-¿Y eso por qué?- Me preguntó y se sentó en la cama.

-Hoy me bajó.- Dije.

-¡Ay nooooooo!- Se dejó caer hacia atrás.

Me reí.

-Yo estoy peor que tú, créeme.- Me senté en la cama.

-¿Te duele?

-A veces un poco y otras veces mucho. Ahora me duele pero puedo soportarlo... espero.

Me levanté de la cama y camine hacia la puerta pero el me detuvo agarrándome de la muñeca. Me atrajo hacia el y besó mis labios mientras sus manos se posaban sobre mi cintura.

Su lengua no tardó en pedir permiso para entrar a lo cual, claramente, obviamente y es lo que todas haríamos, la dejé entrar al mismo tiempo que yo metía la mía.