B R E A T H-Jasper Hale

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Habían cosas que hasta un niño de cinco años podía notar y comenzar a decir "esto no creó que sea normal".

Lo que menos quería Clare era que su pequeña hija comenzará a sospechar y temer de ellos, de su familia sobrenatural, cuando eran quienes más sentían un enorme amor hacía ella.

—¿Porqué Nessie crece más rápido que yo? Ya pronto estará de mi porte— hizo un puchero mientras terminaba una pequeña tarea sobre las vocales, Esme había dicho que mientras no pudiera asistir a un jardín de niños ella se encargaría de su educación en casa.

Clare que estaba a su lado con la vista en un par de folletos sobre maternidad en niños de tres a cinco años no pudo evitar tensarse.

Guardó silencio por varios segundos sin tener idea de que decirle a la niña, notando como Jasper que estaba del otro lado de la mesa con la computadora y papeles la observaba con seriedad.

Jasper teme decirle la verdad a Adhara.

Bella soltó un suave suspiro desde la sala notando la situación de los Hale y sin dudarlo formó una sonrisa en sus labios y se acercó dando pequeños saltitos.

—Iré al supermercado a comprar un poco de cosas y tal vez me sobre dinero para unos helados con crema y malvaviscos. ¿Alguien se anima a acompañarme?

—¡Mami!— exclamó al instante Adhara borrando su puchero para reemplazarlo por una emoción que hizo brillar sus ojos— ¿Podemos ir con tía Bella? Di que sí, mami. Por favor, por favor.

—De acuerdo, pero primero termina tu tarea.

—Estoy segura que mi cerebro podría funcionar mejor con azúcar.

—¿Así, pequeña charlatana?— tocó su pequeña nariz causando una dulce risa en la menor—. De acuerdo, pero a la vuelta la terminarás y no quiero quejas. Ahora ve a ponerte tus botas y ve por tu abrigo.

Adhara soltó un chillido de emoción bajándose de un saltó para ir en dirección a las escaleras, se podían escuchar sus rápidos pasos por todo el lugar y cómo llamaba a gritos a su prima que estaba tocando el piano junto a Edward en la sala continua.

Clare sonrió sintiendo aliviada, miró a la castaña a un lado para formular un pequeño gracias a ella.

—Iré a ayudarlas— se despidió Bella dejando una suave caricia en el hombro de su amiga para darle ánimos.

Los ojos color fuego de Clare viajaron hacía el otro lado de la mesa notando aún como Jasper estaba tenso con su mirada en la computadora, pero era obvio que su mente no estaba en nada de lo aparecía en la pantalla.

Con delicadeza se acercó a él abrazándolo desde atrás.

—Ella ya lo está notando— murmuró con su ceño fruncido.

—Aún tenemos tiempo, Zachary dice que esta mejorando.

—Pero no todavía, aún llora al dormir si no estoy con ella o se paraliza cuando hay oscuridad. Presenció como un vampiro asesino a su madre, uno de los neófitos de Victoria y para ella es un monstruo — sus puños se cerraron inconscientemente al punto de crujir—. Es tan pequeña y tuvo que pasar por algo tan horrible.