B R E A T H-Jasper Hale

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— ¿Y si la lastima?— murmuró Edward por lo bajó, tan bajo para que solo ellos dos se escucharan solamente.

— Jacob no la lastimara— dijo en el mismo tono mirando la pizarra dónde el profesor estaba pasando unas diapositivas.

— Sabes que son inestables. Mira a Emily, la historia que conocen los ciudadanos de Forks es que fue atacada por un oso. Pero tu y yo sabemos que no es así.

Clare apretó los puños, tanto que su lápiz crujio en sus manos. Se calmó y miró al cobrizo de mala gana a su lado.

— Si te hace sentir mejor, después de la escuela tengo que ir a darle clases a Seth. Después de eso iré a ver que tal las cosas y me vendré con Bella a casa, necesito pedirle más material de estudio a Charlie.

Edward apretó los labios.

— Faltan tres horas para que acaben las clases.

Clare alzó su brazo molesta, pero rápidamente Edward se lo bajó el leer sus intenciones de acusarlo con el profesor y pedirle que lo cambiara de puesto.

— Esta bien, no diré nada más— susurró rendido el cobrizo haciendo una mueca.

Clare miró el cuaderno de Seth detenidamente por unos largos segundos, se fijó en como resolvía las ecuaciones y en lo rápido que las hacía. Sonrió ligeramente y volvió su vista a su gran libro de Química y siguió subrayando en este para después escribir en su libreta de resúmenes.

Frunció el ceño, el bullicio le molestaba, miró hacía la sala dónde los chicos gritaban y reían mirando la televisión. Ella estaba sentada en la mesa junto con Seth y Leah, la última viendo los folletos de las universidades que tendría que elegir Clare.

Emily y Kim estaban en la encimera ordenando las magdalenas recién horneadas en una charola.

— Instituto Tecnológico de Massachusetts, ¿eh?— interrogó Leah mirando a la inmortal con una ceja alzada—. Si que eres una cerebrito.

La verdad era que Leah Clearwater le gustaba la compañía de la vampira, cosa que sorprendió a todos al principio, pero después de ver en la mente de la única integrante femenina de la manada supieron que era porque Clare la hacía sentir más a gusto por su aura de felicidad. Era algo que todos agradecían, ya que Leah no estaba constantemente lanzando comentarios venenosos a la manada y eso lo agraciada tanto Sam como Emily al tener un ambiente más grato en el cuál convivir.

— ¿Y a cuál tienes pensado ir? Dios, son tantas opciones— Kim se unió mirando todos los folletos que tenían la chica Clearwater en sus manos.

— Aún no lo tengo decidido— hizo una mueca dejando de subrayar y mirando a ambas chicas, miró de reojo el cuaderno de Seth—. Recuerda, el volumen se obtiene con la altura y el radio.