B R E A T H-Jasper Hale

●11●

Clare se había quedado hasta tarde en casa de los Cullen, incluso Edward había ido a dejar a Bella antes de las cinco. Por lo que era la única humana dentro de la casa.

Estaba en el pequeño balcón que tenía la habitación de Jasper, el estaba a su lado mirándola atentamente. Le gustaba el cómo sus ojos vagaban en distintos puntos por el bosque que tenían enfrente y el cómo sus largas pestañas revoloteaban por la brisa que corría. Con su habilidad vampírica de ver todo más claramente podía ver que Clare era aún más perfecta ante sus ojos.

— ¿Y hace cuánto que eres vegetariano?— preguntó en un susurro la muchacha mirando está vez al él.

— Alice me encontro en 1948 en un restaurante en Filadelfia, estaba sólo, iba de un lugar a otro. En ese entonces no era vegetariano y no tenía un mínimo de autocontrol— su mirada fue perdiéndose en frente hacía el bosque mientras contaba un poco de su historia, pero la chica siguió viéndolo con atención—, nos hicimos rápidamente muy unidos. Fue un lazo de hermandad que se formó al instante y después de dos años en dónde Alice me cambió la dieta nos unimos al clan Olímpico, dónde Alice encontró a Zach. Desde entonces los tres somos inseparables, ambos me ayudan aún a controlarme— admitió lo último un poco apenado.

— Esté es el clan Olímpico.

Jasper la miró con una sonrisa de medio lado y asintió. Hubo un momento de silencio dónde la cabeza de la humana era un revoltijo, hasta que reparó en algo que había olvidado hacer.

— Jazz...— murmuró con la mirada baja— Nunca te agradecí por haberme salvado en el bosque.

— Descuida.

— Gracias, Jasper— dijo esta vez mirándolo a los ojos.

Fue un intercambio de miradas electrizante para ambos, Clare pudo sentir como sus entrañas se retorcían en su interior al ver ese dorado en sus ojos. Era algo demasiado bello, algo tan fuera de lo normal. Jasper era algo que, definitivamente, le seguía intrigando y llamando la atención.

— Eres asombroso— murmuró sin pensar, por lo que rápidamente se percató de su error y abrió sus ojos. Sus mejillas no tardaron en encenderse por la vergüenza— Ay, lo siento. No sé porqué dije eso.

El rubio soltó una risa entre dientes, estaba seguro que sí fuera humano sus mejillas también estarían ligeramente sonrojadas por tal comentario.

— También eres asombrosa, Clare Sweety.

Una tímida sonrisa se formó en los labios de la humana, quién ligeramente aturdida acomodó la manguera en su nariz. Jasper había visto varias veces ese tic, estaba nerviosa y ansiosa, no era necesario usar su empatía para saberlo.

Definitivamente, Clare era alguien tan única, esa sonrisa y esa vibra de energía que la envolvía. No lo podía sentir en ningún otro lado que no fuera estando cerca de ella, esa sensación de vida que desprendía y lo hacía sentir a gusto. De hecho, pudo notar que todos en su familia estaban más a gustos con la presencia de Clare, incluso Rosalie, antes de que llegara Bella.