cap [4]

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¿Crees que soy poca cosa para ti?


En el pasado, tanto su mamá, como su papá y su hermano David... la
llamaban 'Sofy' pero Sofía ya no se consideraba tan agradable como antes. Se
sentía rota por dentro. Su familia se había ido, y a ella le habían tendido una
trampa y había pasado tiempo en prisión.
—¡Sra. Li! —dijo Colin sacudiendo la cabeza. —No dudas ni un instante en
entregar tu marido a otra mujer. Siendo así, ¿cómo puedo rechazar tu oferta?
Colin colocó los dedos bajo la barbilla de Sofía y le levantó la cara, como si
la examinara.
Después de todo este tiempo, él esperaba que ella mostrara al menos una
pizca de afecto por él, pero lo que vio fue indiferencia. Era como si esa mujer
hubiera perdido su alma y fuera incapaz de expresar emociones.
—Sr. Li, puedes hacer lo que quieras e irte con la mujer que desees. ¡No me
importa! —Sofía Lo rara vez le sonreía, y él estaba acostumbrado a ello. Sin
embargo, esta vez le dirigió un gesto de desprecio.
¡Grandioso! ¡Bien hecho, Sofía Lo!Siempre sabía como arreglárselas para
hacerlo enojar.
Molesto, Colin la arrastró al dormitorio y cerró la puerta. La empujó hacia
la cama y la arrojó sobre ella. Luego la sujetó y le echó el cuerpo encima.
—¡Hoy se me antoja jugar con una mujer como tú! —Miró su rostro
inexpresivo. Sofía le devolvió la mirada y notó un dejo de peligro en sus ojos.
Entonces desvió la mirada y dijo: —Sr. Li, es tarde. Es hora de dormir un
poco.
—¿Es esta tu sugerencia? ¿Me estás pidiendo que me acueste contigo?
—... —Sofía Lo luchó contra Colin, pero fue en vano. Él era bastante fuerte
y ella estaba firmemente sujeta debajo de él.
Por primera vez supo lo fuerte que podía ser un hombre, y lo indefensa y
débil que podía sentirse una mujer.
A pesar de su despreciable comportamiento, no pudo evitar distraerse por lo
bien que olía él. Decidida a no entregarse, contestó con amargura. —¡Sr. Li, por
favor, compórtate!
—¿Comportarme? Qué gracioso... —Colin se echó a reír: —Nunca he oídoque un esposo deba comportarse frente a su esposa.
Sofía Lo se avergonzó un poco cuando él mencionó su relación, por lo que
levantó la voz. —¡Déjame ir!
—¿Por qué, Sofía? ¿Estás molesta conmigo?
—¡No! —Colin la miró. Era una mujer extraña, ¿por qué diría que no,
sabiendo que sí lo estaba?
Harto de juegos, se levantó y tomó una toalla de papel para limpiarse las
manos.
—¡Sal! —Colin se dio la vuelta para tirar la toalla de papel usada a la
basura.
La mujer aprovechó esta oportunidad para salir aprisa de su habitación,
Luego corrió hacia la suya y cerró con seguro.
Sintió que su pecho se agitaba con el simple esfuerzo necesario para
respirar. Nunca había estado tan asustada en su vida.
Cuando se calmó, decidió distraerse con el trabajo. Fue a su mesa y
encendió su computadora.
La noche pasó rápidamente y antes de que ella lo supiera, eran las 2 a.m.
Pasadas las dos y media, ya le era imposible mantenerse despierta. Estaba
tan cansada que se metió en la cama sin quitarse la ropa.
Al día siguiente, Sofía Lo se sintió mal.
Su cabeza, garganta y ojos le dolían... . .
Había pensado en pedir el día libre, pero tenía una reunión importante en la
oficina, de modo que decidió que sería mejor llevar sus medicamentos con ella.
Cuando bajó, Colin ya estaba desayunando. Wendy estaba en la cocina
comiendo un huevo frito.
Al verla bajar las escaleras, sonrió y dijo: —Sofía, ven a desayunar.
Sofía le devolvió la sonrisa y caminó hacia la mesa. Quería preguntarle a
Wendy si ella había preparado el desayuno, pero no quería que notara su voz
ronca, así que sólo asintió y se sentó en la mesa frente a Colin.
Nadie habló. Cada uno de ellos parecía estar perdido en sus propios
pensamientos.
Sofía comió lentamente debido al dolor de garganta.
A Colin no le pasó desapercibido este detalle, y reflexionaba sobre si había
sido un poco mezquino la noche anterior y si eso podría provocar que ella se
fuera.
Wendy sabía que Sofía anoche se durmió muy tarde, y se daba cuenta de
que no estaba bien.
¿Había sido Colin el causante de que ella no durmiera bien?
Sonrió al imaginar lo que podría haber ocurrido entre ellos la nocheanterior. Entonces colocó un bollo al vapor relleno de filete en el tazón de Sofía.
—Sofía, sé que te gusta el pescado. ¡Por favor, come un poco!
—¡Gracias mamá! —asintió, mostrando aprecio.
Wendy no notó la diferencia en su voz, pero Colin sí lo hizo.
Se preguntó si Sofía estaría enferma.
No era su responsabilidad cuidarla.
Sofía Lo salió de la villa con Colin y lo siguió hasta su coche. Wendy se
despidió y se volvió hacia la villa después de que hubieron acelerado por el
camino de entrada.
Tan pronto como salieron del vecindario, Sofía dijo con frialdad: —Sr. Li,
¿puedes dejarme aquí, por favor?
Colin levantó la ceja ante su petición.
Sofía Lo había vivido en un hotel antes de mudarse a la villa. Estaba
acostumbrada a trasladarse a la oficina en metro y no necesitaba un automóvil
propio. El Grupo SL estaba ubicado en el centro de la ciudad, por lo que utilizar
el metro era muy conveniente.
El Maserati de color azul no disminuyó la velocidad.
10 minutos más tarde, Colin entró en el estacionamiento subterráneo de la
compañía y se detuvo en su espacio reservado.
—Piensas que soy poca cosa para ti, ¿verdad, Sofía Lo?
¿Como podía ser eso posible? Colin provenía de una familia militar, y en la
actualidad era el presidente del Grupo SL. Su educación y estatus lo hacían la
pareja ideal de cualquier mujer.
Entretanto, Sofía Lo creía que la fila de mujeres que querían casarse con
Colin era tan larga que podía rodear la Tierra tres veces.
Pero, ¿que había de ella?
Antes del accidente, su padre había sido catedrático universitario. Su madre
era miembro de un equipo arqueológico. Considerando sus profesiones, no eran
lo suficientemente apreciados.
El padre de Sofía formaba parte de una familia literaria.
En cuanto a los familiares de su madre, excepto su abuelo, un famoso
contador, los demás eran personas comunes.
Y ella, Sofía Lo, había sido la más desafortunada. Justo después de
graduarse de la universidad, se vio implicada en un asesinato y fue encarcelada.
—Sr. Li, has tardado demasiado en comprender mis palabras. Quería salir
del auto para que nuestros colegas no nos vieran juntos.
El hecho era que a ella no le gustaba que él se le acercara.
Aunque estaban casados legalmente, en su matrimonio ella no era más
que... No, simplemente no quería enamorarse de otro hombre.Aunque era cariñosa con sus suegros
Porque tenía miedo de...
Mucho miedo de...
Si descubría a Li teniendo relaciones con otras mujeres, podía iniciar el
divorcio y terminar la relación sin arrepentimientos.
Quería ser más fuerte e investigar la muerte de su madre. Además de eso,
no podía olvidarse de lo que Paulo había hecho.
Sofía Lo salió del auto y cerró la puerta rápidamente, sin dejar ninguna
posibilidad de respuesta para Colin, Quien apretó sus manos contra el volante.

ENAMORADA DE COLIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora