cap [20]

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¿Cómo atrajo a Colin Li?

—¡Imagínatelo! ¿Por qué fue Sofía Lo liberada antes? ¿Cómo llegó al País
Z como secretaria del CEO en SL? ¿Por qué ella estaba con Colin Li? —Dolores
había oído la noticia de que Sofía había sido liberada antes. Inmediatamente
había enviado a alguien para averiguar quién la ayudó a salir de la cárcel. Sin
embargo, hasta ahora, no había encontrado ninguna pista.
Sofía Lo ahora era libre y estaba con Colin Li, un hombre tan perfecto
como Daniel. ¡Dolores odiaba todo esto!
—Cariño, vamos a ver a Sofía! —Paulo no podía esperar para ver a su
primer amor.
Dolores lo fulminó con la mirada. —¡Pero el contrato es nuestra principal
prioridad! —Paulo se encogió asustado y dijo.
Sin embargo, Paulo le recordó que no importaba si el contrato se firmaba o
no. Lo más importante durante este viaje al País Z era que Dolores superara la
prueba del viejo señor Lien y se hiciera cargo del Grupo Lien. Así que Dolores
contuvo su ira y fue a ver a Sofía Lo con él.
Por la madrugada, alguien golpeó la puerta de la oficina. Sofía había estado
ocupada escribiendo en el teclado.
Extraño. ¿Quién podría ser?
—Adelante. —Sofía se quitó las gafas y miró hacia la puerta.
Su rostro se oscureció y sus puños se apretaron cuando vio entrar a las dos
personas.
—Oh Sofía, todavía estás aquí. —A pesar de la ira de Dolores, Paulo se
acercó a Sofía y la miró con cuidado.
Sofía era aún más hermosa ahora que cuando tenía dieciocho años.
—¿Por qué? —Dijo Sofía en tono frío.
Dolores Lien y Paulo Tai. ¡Se lo haría pagar!
Dolores se adelantó y apartó a Paulo. —Tú pequeña zorra, ¿cómo te lo
hiciste para liarte con el señor Li? —Preguntó Dolores con una mirada celosa.
Paulo la hizo retroceder y le recordó: —Dolores, vinimos a pedirle
disculpas a Sofía. ¿No te acuerdas?
—Sofía, Sofía, y Sofía... Paulo Tai, ¿todavía la amas? —Preguntó Doloresenojada, señalando a su marido.
Sofía podía ver cuál era el lugar de Paulo en la familia. No podía entender
cómo le podía gustar tanto el dinero que estaría tan dispuesto a vivir una vida sin
ninguna gracia.
Paulo le agarró la mano y la calmó con ternura. Dolores bajó la mano y le
tomó el brazo haciendo una mueca.
Ver la intimidad de Paulo y Dolores hizo que Sofía se sintiera incómoda. Se
entristeció.
—Sofía, lamentamos lo que hemos hecho. Por favor no te enojes. —Dijo
Paulo con voz cariñosa.
Dolores, por supuesto, notó su tono, pero sabía que no era el momento
adecuado para centrarse en eso. Así que dijo a regañadientes: —Lo siento, Sofía.
Nadie lo tomaría como una disculpa, porque no sonaba sincero en absoluto.
Sofía estaba confundida. ¿Por qué se disculpaban? ¿Por qué ahora?
Esto podía ser algo que Paulo haría. ¿Pero la arrogante Dolores Lien?
¿Cómo podía disculparse... a Sofía?
—No acepto tus disculpas.
¿Pensaba Dolores que una disculpa no sincera desharía lo que le había
hecho? Dolores le quitó al novio a Sofía y la envió a la cárcel. ¿En qué estaba
pensando?
Dolores quería tirarle el bolso a la cara a Sofía. Señaló a Sofía. —¡Puta!
¡No seas desagradecida!No hubiera venido a ver tu estúpida cara si no fuera por
los contratos. ¡Deberías estar agradecida de no haberte golpeado hasta la muerte!
¿Contratos? Sofía trató de averiguarlo. ¿Eran los contratos entre el grupo
Lien y SL?
La puerta se abrió de nuevo, y entró un hombre. Dolores al instante cambió
su actitud.
—Señor. Li, Sofía ha sido una ingrata. Se daba aires y no aceptaba nuestras
disculpas. —Al ver a Colin, volvió a su habitual dulce personalidad.
Colin no la miró para nada. Caminó hasta el sofá y se sentó. —¿Darse
aires? Eso es lo que debería hacer. Pero si no aceptó tus disculpas... eso significa
que no fuiste lo suficientemente sincera. ¡Sigue pidiendo disculpas!
En el momento en que Sofía vio a Colin, lo entendió todo.
El corazón de Sofía latió más rápido al mirar al hombre sentado fríamente
en el sofá. Era él... Era él quien hizo que Dolores y Paulo se disculparan con ella.
Él sabía que ella odiaba a esas dos personas, y por eso lo había hecho...
¿para hacerla sentir mejor?
De repente se sintió cálida por dentro. Miró a Colin, y había ternura en sus
ojos.Dolores temblaba de furia. ¿Por qué tenía que disculparse con ella, con
Sofía Lo, la persona a la que más odiaba?
Escucha. Darse aires y rechazar las disculpas porque no eran lo
suficientemente sinceros. Dicho esto, Colin Li sólo hizo que Dolores sintiera
como si él estuviera del lado de Sofía Lo.
¡Maldita Sofía Lo!¿Cómo atrajo a Colin Li?
Paulo no pensaba tanto. No quería ver a Sofía enojada otra vez. —Lo
sentimos, Sofía. Por favor, no te enojes. Ese día fue culpa nuestra. No
deberíamos... no deberíamos haberte golpeado.
Como esto se debía a los contratos, Dolores se metió las manos temblorosas
en los bolsillos, respiró hondo varias veces e hizo una sonrisa que estaba peor
que su cara llorosa y dijo: —Lo siento, Sofía. Fue culpa nuestra. Por favor,
perdónanos.
Sofía vio rabia en sus ojos. Dolores Lien, una mujer arrogante había
logrado disculparse. Eso debería haber sido duro para ella.
Sin embargo, cuanto más enojada estaba Dolores, más feliz se ponía Sofía.
Ella sonrió. —Disculpas aceptadas. Pero el resto depende del señor Li.
Colin tembló ante la sonrisa de Sofía. Sofía Lo... ¡Su sonrisa era muy
buena!
En ese momento, sintió que todo lo que había hecho valía la pena.
También entendió que la enemistad entre ellas no podía eliminarse con una
simple disculpa. —Firma con la señorita Lo mañana por la mañana. Pero
señorita Lo, usted puede decidir si firmar o no —dijo Colin.
—¡Sí, señor!
... El rostro de Dolores se ensombreció. Colin Li estaba jugando con ellos,
¿no? Ya se habían disculpado, pero él le había dejado la decisión a Sofía Lo.
Aunque Dolores estaba enojada, no se atrevía a descargar su ira frente a
Colin. Así que arrastró a Paulo fuera de la oficina enojada.
Sofía Lo. Esa zorra. Dolores juró no tener piedad con ella si tenía la
oportunidad.
La oficina estaba otra vez en paz. —Gracias Señor. Li —dijo Sofía
suavemente. —Pero no quería que estuvieras involucrado en este asunto.
No había querido que nadie se involucrara y se viera afectado por los
asuntos entre ella y Paulo y Dolores. Había querido resolverlo por sí misma.
Las palabras de Sofía arruinaron el ánimo de Colin.
—Sofía Lo, ¿no crees que estás siendo hipócrita? Eres tú quien quería
aprovecharse de mí durmiendo conmigo. ¿Y ahora me dices que no intervenga?
¿Estás eliminando competencia? ¿O estás haciéndote la difícil? ¿O aún amas a
Paulo Tai y te preocupas por que lo destruya? —Colin se reclinó en el sofáperezosamente, lanzando pregunta tras pregunta a Sofía.

ENAMORADA DE COLIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora