Pete entró a la habitación que recordaba como la de Vegas esa noche del incidente, recordaba haberse sentido cohibido e inseguro, pero esta vez era diferente, esta vez era el esposo de Vegas. Se giró y Vegas detuvo sus pasos al quedar frente a él. – Es la segunda vez que entro aquí. – le lanzó una mirada por debajo de sus pestañas.
- Es la primera vez como mi esposo. – fue la respuesta de Vegas. – Ven te mostraré algo. –
Vegas lo guió hacia el balcón de la gran ventana y con la luz de la luna podía observar un hermoso jardín con todas las flores que le gustaban.
- He descubierto que no tienes preferencia por cierto tipo de flores, simplemente te gusta plantar en el jardín, así que mande a hacer esto hace mucho tiempo para ti. – debajo de un gran árbol de roble se encontraba un quiosco de madera tallada, prístino y hermoso.
- Vegas es hermoso. – Pete estaba encantado con el detalle y no sabía que mas decir, para mandar a hacer semejante regalo se tuvo que invertir tiempo, eso quiere decir que este regalo lleva aquí mucho tiempo.
- Puedes modificar lo que tu desees, eso incluye la casa principal y esta. – dijo su esposo lo que le produjo curiosidad.
- ¿Cuántas propiedades tienes? –
- Tenemos dos casas y una cabaña, la hacienda donde se produce carne y leche, el club y bar, una fábrica de cuero y dos líneas de trenes. Eso solo aquí. – Pete estaba con la boca abierta, no tenía ni idea que su esposo fuera tan rico.
- ¿Hay más? Espera dijiste ¿tenemos? –
- Vegas lo condujo adentro de la habitación dejando la ventana del balcón abierta donde aún se podía ver la luz de la luna, habían velas por toda la habitación y la alfombra estaba llena de pétalos de rosas ¿Cómo es que apenas se daba cuenta de esto?
- Pete, eres mi esposo y todo lo que es mío te pertenece, incluyéndome. Si hay algo que quieras solo dímelo y será tuyo, el mundo entero puede estar a tus pies si eso quieres. – Vegas sostenía sus manos con fuerza y besó cada nudillo antes de posarlas en su cuello.
- Ahora déjame mostrarte como debió ser nuestra primera noche. - Sostuvo su cintura con ambas manos y lo acercó a su cuerpo, Pete pudo sentir el calor emanar del cuerpo de su esposo y se derritió con el beso que siguió.
El toque anhelante de su esposo lo transportó a un lugar donde solo ellos dos importaban, esta noche presentía Pete sería una que nunca olvidaría.
Vegas fue acercando lentamente su rostro al de Pete y con un roce de sus labios sintió escalofrío en todo su cuerpo. La mano derecha de Vegas fue a la cinta que ataba su prenda en el cuello. La desato y la parte superior de su ropa cayo por sus brazos, dejando su pecho solo con la camisola qie servía de ropa interior.
No bastaba con eso y Vegas se separó para quitarse su propia ropa superior, dejando su torso bien definido totalmente descubierto, la forma en que alfas y omegas se vestían era completamente diferentes. Mientras que los alfas usaban trajes de batalla que constaban de pocas capas, los omegas usaban capas y capas de ropa, todo su cuerpo debía estar cubierto.
Ahora el frío del exterior se filtraba por la ventana abierta y su piel blanca se estaba sonrojando.
En cambio la de Vegas se veía apetecible. Los ojos de su esposo se fijaron en los suyos y se acercó nuevamente, soltó la cinta de su cintura y la capa superior cayo al suelo, procedió a quitar la bata que servía de ropa interior, dejándolo solo en calzones.
***
Vegas admiraba la piel blanca y cremosa de su esposo, pasó la lengua por su labio inferior saboreando en anticipación. Deseaba a Pete desde la primera vez que lo vio, lo amó desde la primera vez que se enfrentó a él y probablemente su esposo no lo entienda, pero se lo demostrará en cada momento a partir de ahora.
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BODAS DE ODIO
FanfictionPete es la perla de la manada, como omega de alto nivel tiene un deber que cumplir, pero su corazón ya pertenece a alguien más. Vegas el alfa de la manada a puesto su mirada en un dulce omega y desde la primera vez que lo vio ayudando a un niño en...