"Dicen que el amor es ciego y apenas entiende de nada. No sabes cuándo va pasar, cómo va a suceder o quién se va a cruzar en tu camino."
"No soy lo suficientemente mayor para él . Sólo estoy esperando hasta tener dieciocho"
-Adaptación de "18- Sooka...
Tropiezo con mis propios pies y acabo de rodillas en la arena, riendo como si no hubiese mañana.
—Dios, Haerin—Yeonjun se apresura a levantarme.
—L-lo siento—digo entre risas.
El alcohol estaba empezando a hacer efecto en mi sangre.
Estoy jugando al equilibrio en un parque cercano al bar, donde hay una fila de ladrillos rodeando un arenero, al parecer es un lugar donde juegan los niños, pero como son casi las dos de la mañana, obviamente no hay ningún infante cerca. Tambaleó hacia un lado, casi cayendo de nuevo, hasta que Yeonjun me toma por el brazo y me hace bajar.
—Oye, me estaba divirtiendo—le digo soltándome de su agarre.
—Haerin, es hora de irnos—me molesta su actitud tan seria.
—Aún no—cruzo los brazos y me siento en la fila de ladrillos, pero al bajar resbaló un poco en el piso y terminó con la cabeza en la arena. Vuelvo a reír sin levantarme y Yeonjun parece a punto de perder la paciencia, lo que me causa más risa.
—¡Haerin! —se pone en cuclillas en frente de mí y levanta mi cintura—Mira, te ensuciaste todo—sacude la tierra de mi cabello y suspira—¿Dónde cree tú madre que estás? —intento contestar pero me da un poco de hipo—¿Por qué tenías que pasarte tanto con el alcohol?, ni siquiera eres mayor de edad—me pone de malhumor que haya mencionado eso, así que le pongo los ojos en blanco—Andando—me toma de los hombros para levantarme y luego pasa mi brazo por los suyos, porque apenas soy capaz de pararme sin tambalear.
El cansancio del día de repente hace que me deshaga en su agarre, casi como un muñeco de trapo, lo cual le hace soltar un gruñido pues acabo de poner todo mi peso a su disposición, pero no se queja.
Llegamos a su auto y él me apoya suavemente en él mirando hacia el mientras busca sus llaves.
Nunca había visto a alguien tan guapo como él, verlo bajo la luz de la luna es casi como ver un cuadro, este chico debería estar en un museo.
—Estas mirándome fijo—dice él devolviendo mi mirada, sus labios ahora son el punto central de mi visión—¿Haerin?
Dicen que el alcohol es valor líquido.
Yo más bien diría que es estupidez líquida, porque me hizo lo suficientemente estúpida como para acercarlo a mí y besarlo. Pero ¿Cómo demonios lleguen a eso?
Bueno, todo empezó esta tarde...
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Horas antes....
El viernes por fin llegó, y con él nuestra actuación en el bar "Lights Out".
El maquillaje que Minji me hizo esta vez incluía lentes de contacto de un color casi gris.
—Estas lista—dice después de pintar mis labios con una tinta—Espero que no vayas coquetearle a mi hermano, fíjate en Taesan—dice bromeando, al menos eso creo.
