Hidden Love - Choi Yeonjun

12

Beomgyu

Minji dormida era una de las cosas más hermosas que había visto.

Se veía tan relajada, serena, parecía un maldito ángel. Me encanta la forma en que se aferra a mi cuando está dormida, me encantaría que pudiera hacer lo mismo cuando está despierta.

Nuestra relación es complicada y lo siguiente.

A veces me preocupa que solo quiera tener sexo conmigo, pero luego, terminamos en situaciones así donde ella duerme cómodamente en mi pecho mientras la tengo abrazada, y creo que podría sentir lo mismo que yo.

—Tu corazón late muy rápido—dice ella. No me había dado cuenta de que estaba despierta. Se pone en una posición sentada en la cama, estirando los brazos y dando un bostezo. Se ve tan bonita.

Quiero despertar a su lado por el resto de mi vida.

—Son las 7, bebé, ¿tu familia no estará preocupada? —remuevo su cabello de su rostro—Te pasaste todo el día aquí.

—Le avise a mamá que estaba contigo, sabes que le caes bien. —dijo ella levantándose—Pero si, debería irme—Solo estaba usando una de mis camisetas más grandes, dándome una buena vista de esos muslos blancos que me volvían loco—¿Dónde lanzaste mi ropa? —preguntó. Cuando vino aquí directo de sus clases, a pesar de haberlo tenido toda la noche, me sentía demasiado ansioso por estar con ella de nuevo.

—Creo que quedó detrás de la puerta—ella asiente y la busca donde le dije. Al encontrar sus jeans empieza a ponerlos pierna por pierna haciendo saltitos, ya que son apretados—Minji—llamo su atención.

—¿Si? —se saca mi camiseta y toma su blusa.

—Creo que deberíamos hacerlo oficial—suelto.

Minji me ve con sus hermosos ojos abiertos, pero por la mirada en ellos, podrías creer que le pedí que me regale a su primogénita.

—¿Oficial qué?

—Nuestra relación.

—No tenemos una relación, Beomgyu—no pensé que unas palabras podían doler tanto—Tú y yo somos... Esto, hacemos esto y somos amigos, nada más.

—¿Estás hablando en serio? —no puedo creer lo que dice—¿No sientes nada por mí, Minji? —me levanto de la cama.

—No de esa forma.

—Estas mintiendo.

—¿Qué te hace pensar eso? —se cruza de brazos.

—El hecho de que tengas tanto miedo—me acerco a la menor y la tomo de los brazos—Yo jamás te haría daño, Minji.

—No se trata de eso—dijo—Beom, ¿quieres tener una relación conmigo?, no va a funcionar, aprecio mucho tu amistad, no quiero que seamos la parejita del mes por un segundo y después descubras que en realidad soy más difícil de lo que pensabas y me dejes, y luego no podamos ni vernos la cara.

—Eso jamás pasaría.

—¡No lo sabes!

—¡No puedes vivir tu vida pensando en que pasará mañana! —le digo con desesperación.

—Y tú no puedes vivirla sin planear nada—me refuta—¿No lo ves?, acabas de sugerir una relación y ya estamos peleando—niego con la cabeza.

—No me importaría pelear contigo todos los días—le digo tomando su mano y llevándola a mi pecho—Dijiste que mi corazón estaba latiendo demasiado rápido, es por ti. Estoy enamorado de ti, Minji—puedo ver la lucha interna de sus ojos, hasta que me quita su mano y se aparta.