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-Z-Zoro...-suspiro el rubio entre gemidos.

-¿Si?¿lo estas disfrutando?-Sanji asintió rápidamente.

-M-me gusta mucho.-sus ojos habían lagrimas, no porque estuviera triste, si no por que el placer que sentía su cuerpo, era demasiado que lo hacia lloriquear.

Sus piernas estaban abiertas, eran tomadas por las manos del peliverde para sostenerlas arriba, el rubio no tenía fuerzas para hacerlo.

Zoro entraba y salía del interior del cocinero, mientras este se retorcía sobre el colchón de la cama, sus piernas temblaban y de sus labios era inevitable callar sus gemidos, el peliverde había encontrado ese punto que lo hacia retorcer, Sanji no tardo en rogar por más.

-¡A-ahi!, justo ahí.-gimio.

Sanji clavaba sus uñas sobre la espalda del peliverde dejando tiras de rasguños de color rojo.

-Esto debe ser un sueño por lo bien que se siente.-susurro Sanji.

-Deberías despertar.-Zoro susurro en su oido.

-¡Sanji!‐escucho una voz a lo lejos.

-¡Sanji!-escucho una vez más.-¡Sanji!

-¿Q-que?-respondió el rubio confundido.

-¡Sanji!-otra vez más esa molesta voz.

-¡Sanji despierta!

Despertó.

-¡Que!-grito por el susto al ser despertado de golpe.

-Llegarás tarde al trabajo.-era Violet.

Vio su reloj y rápidamente se levantó de la cama, ni tardo en darse cuenta que estaba húmedo y con una ereccion.

Afortunadamente Violet no se había dado cuenta.

Se baño lo más rápido que pudo y salio volando a su closet a buscar ropa, se puso lo primero que encontró y así fue al restaurante.

Al llegar al primero que se encontró fue a Zeff.

-¿el gerente llegando tarde?-pregunto.

-No me molestes.-dijo molesto, aun le habían faltado unas horas de sueño.

Sanji apesar de ser el gerente también se dedicaba a cocinar y eso era lo que había día a día, no solo se la pasaba dentro de una oficina.

Fue una jornada pesada, y estaba agradecido de que así fuese, no había tenido tiempo de pensar en ese sueño húmedo que había tendió en la mañana.

Como todos los días salio tarde otra vez, se encontraba en su auto sentado solo viendo a la nada.

A su cabeza llegaron recuerdos de ese sueño que recordaba con claridad, se había sentido tan real, se preguntaba si algún día llegara a pasar se iba a sentir así de bien o mejor.

Sacudió su cabeza para tratar de sacar esos pensamientos pervertidos de su cabeza, no quería imaginarse como el de abajo.

Zoro se encontraba comiendo tranquilamente junto a Hiyori.
-¿Haz pensado en pasar más tiempo con Sanji?-corto con el silencio.

-¿Porque lo preguntas?-pregunto.

-pregunto porque Violet y yo somos amigas, así que nos gustaría que ustedes se llevarán bien y convivieran más ¿no crees?

-¿y eso en que nos beneficiaria?

-En realidad en nada, solo así podríamos salir los cuatro juntos.

COMPROMISO//ZOSANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora