Capítulo 36

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Despierto antes de lo previsto y miro el reloj sobre la mesita de noche que me dice que no dormí más que dos miserables horas. 

Intento salir de la cama, pero cuando recobro totalmente la conciencia veo que parezco una lapa sobre Axel, aunque mi ego está sujeto a la dignidad gracias a las extrañas circunstancias de la noche. 

O solo este mal interpretando el agarre en mi cintura casi posándose por completo en mi culo que tiene Meyer sobre mí. Hago otro intento por salir de la cama, pero lo único que consigo es que Meyer aumente más su agarre ahora dejándome totalmente pegada a él.

- Mucho que no a la posesión y mírenlo - susurro divertida

- Nunca dije que no era posesivo - aclara sorprendiéndome aún sin abrir los ojos  mientras me pega más a su pecho - nunca intentaría ocultar que soy un posesivo de mierda, dije que no era mi primera motivación para decirte que eres mía

Explica tomándome de las caderas hasta posar todo mi cuerpo sobre el de él

- Hola tú - me río un poco por la familiaridad de la situación

- ¿A dónde planeaba ir nuestra pequeña mentirosa? - interroga esta vez abriendo los ojos dejándome por unos segundos embelesada

- Solo planeaba ir al baño no esperaba que una muralla me intentará detener

- ¿Así que el que lleves media hora moviéndote en la cama no tiene nada que ver?

- No se que hablas Sherlock - contesto con una pequeña sonrisa sintiéndome expuesta 

- Lo que digo es que antes de que fueras consiente de que estaba aquí estabas respirando más rápido de lo normal y no parabas de dar vueltas en la cama 

- Creo que ya tuve suficiente de tus delirios por esta mañana. El gran Sherlock esta buscando un caso en donde no lo hay - le hago ver intentando levantarme, pero lo único que consigo es terminar debajo de él - De verdad que tu lado dominante no acepta un no. Puto ego de mierda el de ustedes los machotes 

- Te diría que lo único que no acepta mi ego ni ninguna parte de mi es a una cobarde, pero no estaría aquí por ti - confiesa tomándome del mentón para que lo mire - Suelo ser muchas cosas, pero no mentiroso por profesión 

- El gran Axel Meyer no miente - levanto una ceja inquisitiva - Cada vez sales con más chorradas imposibles de creer

- Y tú sales huyendo cada dos por tres. Gran equipo ¿verdad?

- No recordaba que Genova tuviera tan buen sol. Eso de que nos tiremos unos trapitos al sol a ver quién sale perdiendo no parece de alguien decente - chasqueo la lengua tratando de deshacerme de su agarre en mi barbilla, pero lo único que hace es intensificarlo - Pero olvide que la decencia no es lo tuyo. Todo menos decencia si hablamos de Axel Meyer

- Tienes razón, no es lo mío - acepta - Porque si hablamos de todos los pensamientos que llegan a mi mente contigo frente a mí es imposible que tenga decencia y tranquila que no me molestaría tu falta de ropa. Siempre será un placer verte sin ropa De angelis. Entre menos prendas mejor 

Asegura guiñándome un ojo cambiando totalmente el curso de la conversación colocándole más calor de la que ya existe entre los dos.

- Claro que es mejor - coincido viéndolo directamente a los ojos - entre menos ropa tengas más fácil será que tu polla reciba toda la atención que tu mano le puede dar. Suerte con tu paja mañanera

- ¿Suerte? Contigo queriéndote quitar el placer de ver como corro en tu linda imagen - entrecierra los ojos mirándome incriminadoramente - no creo que eso sea suerte Brünette. Esperaba más a decir verdad 

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